Mr. Robot (2x07) eps2.5_h4ndshake.sme: Orange is the New Hack

El control a veces puede ser una ilusión. Pero a veces necesitas la ilusión para obtener control. La fantasía es una forma fácil de darle sentido al mundo, de ocultar nuestro entorno con consuelos evasivos. Después de todo, ¿no es por eso por lo que nos rodeamos de tantas pantallas? ¿Para poder evitar vernos? ¿Para poder evitarnos entre nosotros? ¿Para poder evitar la verdad?

Adentrarse en el séptimo episodio de la segunda temporada de “Mr. Robot” supone ceder a ese espíritu de la serie de Sam Esmail para ir en todo momento por delante del espectador, conduciéndolo a una zona de control para dar el golpe y desestabilizar todo de nuevo. El creador de la propuesta de USA Network se encuentra al volante aunque nos da algunas pistas de todo ese proceso complejo que se desarrolla en la mente del protagonista. Elliot Alderson, desde el comienzo del espectáculo, demostró que era un narrador poco fiable y que no confía del todo en nosotros. De hecho, podríamos entender la ficción como esa relación de confianza entre el cronista y aquel al que se dirige. “Mr. Robot”, recientemente renovada por una tercera entrega, siempre se ha basado en los contrastes y hacernos despertar con golpes de efecto que cambien el escenario y contexto de sus secuencias. Es curioso que “eps2.5_h4ndshake.sme” arranque con una versión libre de la expresión «echar un jarro de agua fría» utilizando, de nuevo, su propio lenguaje y expresión cultural en el proceso. Veremos cómo Joanna Wellick modula y alterna su realidad abrazando sus recuerdos junto a su esposo, presenciando junto al personaje toda esa luz esperanzadora que se abría ante la pareja y el ascenso conseguido. Tyrell Wellick es el gran ausente de la temporada y cada vez la idea de que Mr. Robot cogió la pistola de la máquina de palomitas, para deshacerse de ciertos cabos sueltos, cobra más sentido. A Joanna únicamente le queda su pequeño retoño y esa instantánea de felicidad será quebrada por ese «jarro de agua fría» convertido en pintura roja sobre una cerda capitalista. Nuevamente, ese detalle nos remite a ‘Careful Massacre of the Bourgeoisie’ como marca de un film ficticio que dio sentido a la cruzada de Elliot y Darlene y que sea la huella de la criminales para que Angela ate todas las piezas. Otro de los detalles en el discurso de esta entrega del espectáculo de USA Network está siendo la integración de la religión en el componente de locura de la psique del antihéroe. Salvar al mundo genera que la mitad te ame y la otra mitad desee acabar contigo, como si Elliot fuera un nuevo profeta y Mr. Robot una entidad divina que desea traer su nueva palabra al planeta. Un cartel marca el contexto después de enlazar con la imagen de Elliot mirando ese crucifijo que da la impresión de lanzar una alegoría sobre un mártir capaz de sacrificarse por los pecados de la humanidad… El hijo de Dios, el hijo de Mr. Robot. Ese anuncio indica a Elliot que no está solo, que todos somos diferentes y que todos somos iguales. Sobre tal contradicción, “eps2.5_h4ndshake.sme” también instaura un sentido de ese juego de máscaras habituales en todos los personajes, con dobles personalidades que demarcan los héroes y villanos. Pero Elliot, por su parte, está condenado a ser el líder de una revolución… que por su parte ha quedado en punto muerto posiblemente hasta este momento de asimilación tanto de Mr. Robot como de su actual situación… Repasemos “eps2.5_h4ndshake.sme”. 

Era obvio que tenía que llegar un momento dentro de la segunda temporada en la que se resolvieran ciertos problemas con los que se ha topado Elliot pero, no obstante, nada ni nadie en esta serie es superficial o accesible sino que Sam Esmail nos tenía preparada una sorpresa para marcar el punto de giro hacia la recta final. Tal y como indicaba anteriormente, “Mr. Robot” es una serie que siempre va por delante del espectador y cuando creemos que estamos a la par, o incluso por delante, surge un terremoto que desestabiliza nuestra sensación de control. El mundo en sí mismo es un gran engaño y la metáfora es obvia y evidente gracias a un narrador poco fiable y con problemas mentales. Conviene ya correr el telón y desatapar la bomba lógica de “eps2.5_h4ndshake.sme” para concretar y amplificar las muchas preguntas que surgen ante esa nueva revelación. Y es que los puntos de giro de “Mr. Robot” no suelen ayudar al espectador a entender el espectáculo sino a que aparezcan nuevos misterios e incógnitas al mismo tiempo que la fascinación crece. Elliot va a derrotar a Ray pero su victoria esconde una culminación a una verdad y realidad que (nos) había ocultado. Recuerden el leitmotiv de la presente temporada: el control es una ilusión. Sam Esmail, por lo tanto (y aunque pida disculpas a través de su antihéroe), no nos estaba engañando del todo sino dándonos numerosas pistas de una vuelta de tuerca que cambia la dimensión y análisis de estos primeros episodios. En realidad, Elliot estuvo en prisión desde “eps2.0_unm4sk-pt1.tc” (2x01) y todo ese control y horarios que había implementado es su vida formaban parte de la propia penitenciaría, siendo su carcelera alguien similar a su madre. Pese a todo, tal revelación no solamente dinamita el estado actual de la serie sino que nos remite a muchas preguntas para encajar esa nueva realidad que surge en una de sus sesiones de terapia con Krista Gordon. ¿Supone todo lo anterior que Ray y sus hombres eran parte del personal de prisiones y que mantenían desde allí sus turbios negocios en internet? ¿Al acabar con los mismos otros presos que se nutrían del mismo iniciaron un violento acoso contra Elliot que culminó en un intento de violación? ¿Plantó Whiterose (y por extensión Ejército Oscuro) a Leon para proteger a Elliot entre rejas y regalarnos la secuencia de sexo anal más enferma de la televisión de 2016? ¿O incluso fue el Ejército Oscuro aquel que se encargó de culpar a Elliot para mantener a tal pieza del puzle a buen recaudo y sin margen de maniobra hasta que ellos quieran? Y, volviendo a la gran pregunta que se nos plantea, ¿por qué está nuestro protagonista en prisión? Entendemos que por el ataque a ‘Evil Corp’ no ya que el FBI le hubiera interrogado una y otra vez y no tenemos constancia de nada de eso. ¿Utilizó, por lo tanto, un delito menor (el hackeo al amante de Krista) para protegerse tanto a él como a la sociedad de Mr. Robot y ahora su colaboración para derrumbar ese oscuro negocio de Ray le ha servido para ganarse un trato y puesta en libertad? 

Vayamos a “eps2.5_h4ndshake.sme” y también al desarrollo del resto de tramas y personajes. Teníamos pendiente el hackeo al FBI a lo “Ocean's Eleven: Hagan juego” de fsociety con Angela Moss como agente de campo a tal efecto. Dominique DiPierro apareció como una mosca cojonera y sospecha de la empleada de ‘Evil Corp’ que curiosamente lo fue de Allsafe. Aquí los personajes son vigilantes sin capa ni máscara, aceptando una nueva identidad para sumergirse en el peligroso mundo corporativo y los hackers que desean dinamitarlo. Angela se deshará de DiPierro utilizando el coqueteo con el agente del FBI pero su integración en esta temporada, aparte de comodín, es para revelar sus auténticas intenciones respecto a esa demanda colectiva que ella misma puede tumbar. Sabemos que Phillip Price está también utilizando a la joven y desconocemos el plano general de esa lucha de poder y arribismo de Angela. Otro de los focos que se está desarrollando es todo ese contexto sociopolítico tras la crisis de Cinco/Nueve ya que la situación es cada vez más caótica e inestable pero están surgiendo nuevos modelos de negocios y todo el mundo ya habla de Ecoin como la nueva moneda de cambio para salir del paso. El gigante evidentemente se está reconstruyendo y fsociety es conocedor que debe destruir su única posibilidad de regeneración… aunque Darlene, Mobley y Trenton tienen entre manos otro foco de incendio que podía quemarlos hasta la muerte a todos. Se trata de esa conspiración supuestamente gubernamental que se puso en marcha tras el asesinato de Romero y que tiene a hackers como objetivo… De momento, fsociety ha borrado sus propias huellas siendo consciente DiPierro del hackeo y que Angela ha sido parte del mismo. Y Angela sigue jugando entre esa nueva personalidad corporativa, como si hubiera encontrado a su verdadero ser y tanto su padre como la propia agente del FBI no reconozcan a esa nueva mutación. ¿Acaso no protegemos todos nuestros planes malignos? La relación de Angela y Price es otro de los focos de interés, donde ahora la joven va a conseguir lo que quería pero va a rechazar ya al diablo… ¿Tal vez el año que viene accederá a acompañarlo en su cumpleaños? Con sus logros, Angela consigue ser gerente en el Departamento de Control de Riesgos y empezará a labrarse su carrera rápidamente pero, en su primer enfrentamiento con su nuevo jefe, se dará cuenta (junto al resto de espectadores) que toda esa burocracia empresarial dentro de ‘Evil Corp’ parece ya tanto un laberinto kafkiano e interminable escalada a una pirámide que parece no tener nunca fin. Tal vez no sea tan lista como quiere creer ser y Price haya puesto a Angela exactamente donde quería.

“eps2.5_h4ndshake.sme” también sigue incidiendo en Joanna Wellick y su desarrollo, en su cada vez más cercana incapacidad de asimilar que su esposo nunca regresará y tendrá que conformarse con ese amante que no podrá completar ninguno de sus sueños (e incluso fantasías enfermizas sexuales). ¿Su citación de divorcio es el mejor regalo que ese camarero podía recibir? ¿Dónde quiere hacernos llegar Sam Esmail con esta trama? ¿No resulta un poco absurdo que Mr. Robot matara a Tyrell por temor a ese asesino a sueldo del matrimonio y que su ‘viuda’ pudiera iniciar su venganza una vez que descubra tal hecho? ¿No vamos al mismo punto? El foco principal del episodio, por el contrario, es esas partidas de ajedrez que juega Ray con Elliot y el propio Elliot con nosotros. Entendemos que ese movimiento de piezas final de Ray, hablando de su esposa y cómo creo esa web donde se puede encontrar de todo, era también parte de la profundidad de su personaje, aceptando el jaque mate de Elliot y anticipándose incluso al mismo. Ray, en el fondo, sabía que Elliot iba a delatarle tanto a él como a los suyos en el mismo momento que posase sus manos sobre el teclado del ordenador. Esa liberación de uno de los villanos de la temporada desea también confirmar que la serie se suele mover en claroscuros éticos y morales y que, al mismo tiempo, la intención fue de ‘rellenar’ parte de los arcos argumentales y material psicológico y dramático para el golpe de efecto final. Sam Esmail es coherente a su propio argumento de la partida de ajedrez: cuando veas un buen movimiento (vuelta de tuerca de la primera temporada: Elliot es Mr. Robot) busca uno mejor. Y ese movimiento mejor es voltear la realidad y revelar que Elliot estuvo en prisión en todo momento durante esta temporada. ¿Significa todo esto que la llamada a su puerta en el cierre de “eps1.9_zer0-day.avi” (1x10) obedecía a su propio arresto? Ciertamente todos estos primeros capítulos han ido enfocados a dar una envoltura satisfactoria al enfrentamiento entre Mr. Robot y Elliot dentro de su mente. Al principio, Elliot pensaba que su álter ego era causa del dolor pero ahora se ha dado cuenta que es su socio perfecto y compañero… parte de sí mismo. Caídas de testículos del toro de Wall Street en la Cámara de los Representantes aparte, lo importante es la revelación final y sus implicaciones. Elliot nos pide perdón por su engaño y sumergirnos en su fantasía pero también nos ofrece su mano para un apretón y gestionar un nuevo trato. Todo ha comenzado de nuevo… aunque sigamos si saber si es un inicio o simple comienzo de un fin.

Historias Bastardas Extraordinarias by Maldito Bastardo is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional License.