¿Hay explicación para todo lo que vemos? ¿Existe un esclarecimiento al final de “Twin Peaks”? Como todo desenlace de una serie de culto —o de una candidata a revolucionar la forma de hacer y entender la ficción televisiva—, “Twin Peaks – The Return” ha sembrado la semilla de la discordia. Obra maestra indiscutible para algunos, grotesca y decepcionante para otros. La cuestión considero que tiene que ir más allá de la simple necesidad de los espectadores por tener todo cerrado. El cliffhanger ya era una (dis)función para atrapar a la audiencia y, en las aristas de ese juego, siempre se escondía un punzante y letal reverso. ¿Qué ocurre con esas series que acaban con numerosas tramas inconclusas y que son finalmente canceladas? Mark Frost y David Lynch vivieron en sus propias carnes esa experiencia y precisamente no han querido incluir apenas tramas en su ‘series finale’. Showtime ya nos avisó que este retorno iba a ser un viaje de una temporada aunque, sin embargo, siempre existiría una vía para que David Lynch vuelva atravesar el telón del mundo que creó en los próximos años… Quizás el autor, junto con Frost, tengan que plantearse si tienen una historia que contar y, en cierta medida, “Episodio 18 (Part 18)” nace de un juego de escritura (‘what if?’) para confeccionar las infinitas posibilidades del cosmos que crearon juntos. En el ‘series finale’, por lo tanto, la concepción es desmarcarse de cualquier clase de estereotipo o predisposición de la audiencia pero también y, al mismo tiempo, establecer cierta constante de sus planteamientos. Todo trató desde un comienzo sobre la batalla entre el bien y el mal. Y el mal supremo aguarda… La información ya es pasado. Apenas hay diálogos y si éstos aparecen son breves y concisos. La imagen parece querer tomar ya el control, como si la irrealidad deseara ser la materia de ese sueño que han construido alrededor de Dale Cooper. Tal vez incluso todo este regreso sea un sueño aledaño de Audrey Horne junto a otro principal de Laura Palmer… Precisamente se ha criticado bastante que no existe ninguna clase de referencia o explicación respecto a su destino. ¿Está en coma? ¿En el limbo? ¿Atrapada en otra dimensión o una institución? Creo esos ataques más que injustificados son inconsecuentes porque, para empezar, nos enteramos que el personaje había sobrevivido a la explosión con la finalizaba “Twin Peaks” por un libro que publicó el propio Mark Frost. La serie se negó a dar una explicación más allá del explosivo lance en el que se veía envuelta Audrey. Los creadores ya no quieren utilizar trucos más allá de entender el cliffhanger como un material moldeable a otra clase de intereses: la propia historia y sus posibilidades pueden ser más impactantes que el más atronador punto de giro. De este modo, llegamos a “Episodio 18 (Part 18)” para no tener ninguna clase de respuesta clara sino nuevas y superiores incógnitas que decepcionen a unos o, por el contrario, catapulten al más amplio culto a una propuesta destinada a reinar en los próximos años por la revolución y riesgos que ha establecido. Repasemos el último capítulo de “Episodio 18 (Part 18)”.