Por un lado tenemos una serie en un claro descenso terminal que ha perdido ya hace un par de temporadas su premisa inicial y se
ha convertido en una serie de parejas protagonizadas por geeks. Por otro, un aumento
exagerado de audiencia y nominaciones a premios. El pasado jueves vieron “The
Decoupling Fluctuation”, segundo capítulo de la sexta temporada de “The
Big Bang Theory”, 15.400.000 espectadores. Es la
serie más vista del momento y contrariamente cada vez los episodios son más
estúpidos. El problema es que ya no lo digo yo sino propios fans de las
anteriores y desagradables temporadas desde que se convirtió en un mal-plagio de “Friends”. Algunos han decidido guardar silencio para que los actuales
detractores e indignados con el destino final de Sheldon Cooper no nos envalentonemos;
otros me han llegado a ‘amenazar’ en el recibidor de mi hogar… Aunque no daré
más detalles al respecto. En definitiva, “The Big Bang
Theory” dejó de ser hace mucho tiempo “Big
Bang” aunque debo vivir en una galaxia muy lejana a juzgar por el robo de cerebros que se produce cada semana… Es el
momento de recapitular lo ocurrido en este segundo capítulo.
Podía resumir “The Decoupling
Fluctuation” en una línea y es que el enésimo problema de la
serie de Chuck Lorre y Bill Prady es la simpleza romántico-bobalicona de las
actuales tramas: Penny se plantea dejar a Leonard al no tener sentimientos por
él… pero finalmente declina su intención al no querer herirle. ¿Cómo sucede
todo lo anterior? En una reunión de chicas sale el tema sobre el futurible
matrimonio de Penny… pero la camarera no siente absolutamente nada vinculado
con el amor. La rubia ha estado enamorada y conoce esas sensaciones. Esta vez no
son las mismas… No sabe si romperá con Leonard. “Big Bang” hace tiempo que se
ha convertido en una revisión geek de “El diario de Noa” y en este capítulo se
confirma que Howard sigue en el espacio aunque comunicado perfectamente
gracias al mundo virtual y las vídeo-llamadas. Por otro lado, Stuart ejerce su
rol de acompañante de Raj y es tolerado y aceptado por Sheldon para mantener el
equilibrio de su rol grupal.
Para echar un poco de fuego Amy le confiesa a
Sheldon las intenciones de Penny en un cine e inicia los desbarajustes para que el físico
mantenga el secreto. Por ocasiones anteriores conocemos que va a sufrir y que
no podrá… pero gracias a desafortunados ejemplos a modo de metáforas Leonard
entiende otra cosa. Sheldon acaba entrando por la noche al apartamento de Penny y su dormitorio. La rubia comprende que Amy le ha contado algo y se inicia el cruce de llamadas. Mientras que Howard es acosado
con novatadas en la Estación Espacial, Penny se replantea su relación…
Al final Penny va a romper con Leonard pero éste
pone la cara del gato de “Shrek” y da mucho pena a la rubia… que acaba haciéndole
el amor. Al revelarse a sus amigas, éstas se alegran y se burlan tanto de su
decisión como de la nueva kriptonita de la rubia. Alguna referencia a “Los Vengadores” y a la teoría de cuerdas para darse cuenta que “The
Decoupling Fluctuation” es una broma pesada sin gracia. Entiendo que darán
el Premio Nobel a aquel que dé una explicación sobre la nula inteligencia de
una serie con personajes inteligentes y audiencia millonaria y de récord…
¿inteligente? ¿Si la serie ahora mismo
es tan mala por qué el público no ha iniciado el ‘desacoplamiento’? ¿Es que al
igual que Penny le da pena dejar algo que ya no enamora? ¿O tal veZzZz estamos ante “Los Serrano” de la sitcom y no nos hemos dado cuenta?
tienes toda la razón de vez en cuando tema parejitas vale, pero esto es ya un poco cansino, para eso nos ponemos a ver Friends
ResponderEliminarHola azira!
EliminarEn el tercero de esta temporada se confirmará de qué va todo esto... aunque resulta claro, ¿no?
Saludos y gracias por el comentario