Veamos,
Dexter acabará vivo o muerto… entre rejas o fugado del país, con hermana o sin
hermana… y siempre con hijo. ¿Arrestado y/o asesinado por Debra y/o Laguerta?
¿Asesinado por el antagonista que no están reservando para correr el velo
final? ¿Sacrificándose por salvar a su hijo y/o hermana y convirtiéndose en un
héroe que fue un desconocido asesino en serie? ¿Entregándose él mismo y diciendo
a cámara: «Soy Dexter Morgan, soy un asesino en serie»? Las posibilidades son
múltiples pero la serie ya está sembrando sus particulares gérmenes para
conseguir un crecimiento adecuado. Esta séptima temporada nos está sorprendiendo
a todos: va directa al grano y están pasando muchas cosas… Acertadamente han
cambiado planteamientos para que el juego y ritual habitual de Dexter incluya a
Debra y los enfrentamientos morales entre ambos. Por otro lado, la sádica hermandad
de Koshka encabezada por Isaak Sirko va a dar rápidamente con la identidad del asesino
de su compañero caído… Todos los caminos parecen que van a cruzarse en “Run”,
cuarto y próximo capítulo, y esto no acaba nada más que comenzar…
Si
Sirko y sus hombres están haciendo limpia de personajes molestos, Debra debe
visionar aquello que hace su hermano para impedir nuevas muertes… aunque debe matar
a un asesino en serie para tal fin, ejerciendo de justiciero. Para agilizar
todo rápidamente los personajes empiezan a unir piezas. Dexter está atrapado
como en una jaula por la supresión del pasajero oscuro que le ha sido impuesta
por su hermana. Piensa en cargarse a Louis o Masuka… pero en la (y su) realidad
intenta estrangular a un sospechoso que se pone chulo al tomarle una prueba de
ADN. Su hermana intercede para evitar el asesinato y Dexter le explica que
suprimir sus impulsos no es la solución: debe canalizarlos… y para ello
necesita libertad, claro. Dexter aquí vuelve a la rutina de acechar sospechosos
y objetivos y el de este capítulo es Raymond
Speltzer, que seguramente haya asesinado a varias mujeres pero ha sido puesto
en libertad condicional. Dexter lo vigila en su gimnasio y confirma que ha
iniciado su ritual para matar a una nueva víctima… Debra no es tonta y está
siguiendo a su hermano… algo con lo que ya contaba Dexter… Así, Debra se
encuentra con aquello que hacía su hermano: conseguir la prueba que demostrara
la culpabilidad de Speltzer y cargárselo antes de que mate a alguien. Debra no
lo tolera y Dexter intenta hallar un pendiente de una de sus víctimas como
prueba de su culpabilidad…
Los destinos del panolis de Quinn y Nadia están
ligados: se gustan pero a la bailarina le han encomendado sus peligrosos jefes
sacar información al detective. Pregunta por una pulsera que debía llevar su
asesinada compañera de trabajo la noche en que la mataron. Aunque Nadia y Quinn
llegan a un acuerdo para aprovecharse de la información mutua y así satisfacer
a sus ‘jefes’, lo interesante es que esa pulsera contiene un chip GPS que
podría desmantelar su red de heroína si es descubierto por la policía. Viktor
cogió el brazalete de Kaja y a nivel informático y por los métodos que tuvo que
emplear Dexter, es obvio que George e Isaak
van a dar con su barco… Para hilar todo presenciamos cómo Dexter decide ‘deshacerse’
de Louis. Envía la mano a Masuka con una nota que incrimina al creador de
videojuegos… Obviamente el pervertido oficial de “Dexter” le despide inmediatamente.
Cuando llega a casa se encuentra a su
novia Jamie viendo el vídeo con una prostituta que le ha
enviado un anónimo… Louis alega que era una puta y que, por lo tanto, no son
cuernos. Aparte, obviamente, de acusar a Dexter… Jamie corta con él… Abatido va
con un taladro al barco de Dexter para sabotearlo y recibe la visita de Viktor
y George. Inicialmente Louis se presenta como el dueño, pero al ver que el
sádico y sociópata de Viktor iba a sacarle los ojos sin matarle… les indica que
pertenece a Dexter Morgan. Isaak lo liquida con un disparo entre ceja y ceja
y George se deshará del cadáver… aunque el plano detalle con las gotas de
sangre que quedan en la cubierta nos informa que Dexter conocerá pronto de este
asesinato. Louis fue un personaje interesante en la pasada temporada pero al
revelarse en esta como un simple friki pernicioso se desangraron sus
posibilidades. Descanse en paz. El encuentro entre Isaak y Dexter será
inmediato… y de hecho ya se ha producido en este capítulo en una curiosa
conversación en el club de striptease. Recordemos que el cadáver de Tony ha
sido encontrado y Batista pasa por allí para echar la bronca e intimidar a
George…
Para empezar a tejer el entramado de la temporada
aparece la madre de Randall, el asesino en serie que se suicidó delante de
Dexter en “Sunshine and Frosty Swirl”. Al
morir su hijo la madre ha traído objetos que podrían dar información del
paradero de las víctimas que dijo pudo haber asesinado. Al analizar los objetos
encuentran que algunos de ellos pertenecían a una mujer llamada Janice… Lo que
llevará a Batista y a Dexter a visitar a la que fue la novia adolescente de
Randall que no participó en los crímenes: Hannah. El feeling ¿y
flechazo? es inmediato y Dexter se pone nervioso al tomar una muestra del ADN
de su mejilla…
Dexter sabe que Speltzer esconde algo en un mausoleo
privado… pero Debra evita que entre en su interior. Hacer las cosas bien
supondrá una nueva víctima inocente. Debra habla con Laguerta y utiliza ‘el
cerebro de lagarto’ de su hermano para mostrar que tiene la corazonada de que Speltzer
va a matar pero no ha podido conseguir la orden para entrar en el mausoleo.
Laguerta le propone poner vigilancia fuera de los libros… Así lo hace pero una
urgencia provoca que la policía deje la casa de Speltzer y llegue la que será
su víctima… a la que vimos en la secuencia en la Debra y Dex coinciden con él el
bar. Debra decide cubrir la guardia y Dexter entra en el mausoleo para
descubrir el pendiente en lo que parece un santuario creado por Speltzer.
Dexter manda la foto a su hermana pero allí no tiene cobertura. Al salir
descubre que su hermana se dirige a la guarida del lobo y se encamina también
allí. Speltzer ha creado una especie de laberinto en la planta alta de su piso
con los muebles para perseguir a su víctima. Debra llega para escuchar los
gritos y encontrarse con la ‘bestia’. Pese a que lucha con Speltzer su arma se
queda atorada en unos alambres. Dexter aparece para salvarla de la bestia, que finalmente
huye. Descubren el cadáver de la chica y Speltzer queda en busca y captura.
También ha cogido los objetos del mausoleo… Después de replantearse todo lo
ocurrido Debra charla con Dexter y le indica que él tenía razón: esa joven
estaría viva si él hubiera utilizado su viejo código. Por fin entiende lo que
hace su hermano y lo considera un mal necesario aunque le indica que sus
muestras son trofeos, como los pendientes de Speltzer. A Dexter le gusta
cómo le hace sentir matar a esos otros asesinos, a Debra le parece simplemente
que le disfruta matando. ¿No habíamos
quedado en que era un asesino en serie? Ambos no van a cambiar… Nada y todo han
cambiado. Dexter por fin está fuera de la jaula en la que le
había encerrado Debra… Pero, ¿qué precio tendrá su libertad?
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