Agents of S.H.I.E.L.D. (2x03) Making Friends and Influencing People: Sobre pulsaciones

La segunda temporada de “Agents of S.H.I.E.L.D.” confirma tras “Shadows” (2x01) y “Heavy Is the Head” (2x02) dos datos fundamentales para entender su futuro: 

1.- Los guionistas han corregido prácticamente todos los errores cometidos en el pasado y la serie de Joss Whedon es más sólida, notable y madura gracias al apoyo argumental de “Capitán América: El soldado de invierno”. 

2.- La serie no interesa a la audiencia norteamericana y su éxito estreno y malas críticas provocaron una desbandada general, haciendo caer la audiencia a unos niveles preocupantes para poder consolidarse la noche de los martes en ABC. 

“Making Friends and Influencing People”, a la espera de confirma los datos de audiencia, ratifica los apuntes anteriores. El tercer capítulo de la segunda temporada de “Agentes de SHIELD” corrobora que la serie es más y mejor y la lluvia de noticias debería hacer replantear a los espectadores norteamericanos concederle una nueva oportunidad. Hasta Robert Downey Jr. quiere apuntarse y suenan los rumores de inclusión de Mockingbird (Pájaro Burlón) en el reparto. ¿Se acabó eso de pedir un Chris Hemsworth y que nos traigan al tirillas de Peter MacNicol? ¿Tendremos un guiño a “Guardianes de la Galaxia”? ¿Alguna referencia a la venidera “Los vengadores 2: La era de Ultron” o en ésta llegará la inclusión de “Agents of S.H.I.E.L.D.”? Marvel tiene un objeto para potenciar e incluir toda clase de ‘extras’ que agradecerán los seguidores de su universo cinematográfico y, ahora, televisivo. Por favor, dé una oportunidad a esta nueva “Agents of S.H.I.E.L.D.” que dejó de ser “Agents of S.H.I.T.” tiempo atrás. Es hora de repasar “Making Friends and Influencing People” y hacer amigos e influenciar a la gente. 

“Agents of S.H.I.E.L.D.” también tiene un pasado —por irregular e inestable que parezca— y este capítulo es buena prueba de ello. Volvamos a la primera temporada y preguntémonos sobre el destino de Gravitón (Dr. Franklin Hall), Akela Amador, Mike Peterson (Deathlok), las peleas de gatas asgardianas como Lady Sif o Lorelei y, por supuesto, Donnie Gill. Precisamente vamos a recuperar al joven que formó parte de la escuela de cadetes de SHIELD en “Seeds” (1x12) y que vimos tomaba el poder del peligroso artilugio que construyó. También los guionistas confirman su buen trabajo ampliando a los personajes y sumergiéndolos en nuevos conflictos. Pensábamos que el rol de Jemma Simmons iba a limitarse a un componente de la imaginación y daños cerebrales de Leo Fitz, pero nos habían reservado una sorpresa con la que no contábamos. ¡Simmons se encuentra trabajando para Hydra! ¿Cómo, cuándo, por qué…? Hábilmente van a unir los destinos tanto de la talentosa bio-química y científica como del joven con poderes que se encuentra en Marruecos y que nos revela rápidamente sus dones para congelar cualquier cosa al instante. ¡Que le manden al Polo Norte para que no se descongele ‘La Cosa’! También comprobaremos que Hydra quiere reclutarle y ser entregado en barco a Maribel Del Mar. ¿Entendemos que es una ciudad o una bella latina de Hydra? Obviamente es hora de ver cómo Donnie convierte a personas en cubitos de hielo con sus manos o a través de los objetos que toca. 

¿Y qué pasó con Jemma Simmons en los laboratorios de Hydra? Pasa que es una agente encubierta trabajando para SHIELD y Coulson. Simmons va a revelar la información que tiene sobre Gill y que Hydra quiere reclutarlo. El problema de la científica es que es una don nadie y la recomendación de Coulson para hacer nuevas amistades va a tomar un giro cuando es conducida directamente a Sunil Bakshi, mano de derecha de Daniel Whitehall, ese otro villano de temporada. Whitehall nos va a demostrar en este capítulo cómo hacen cambiar de bando a sus objetivos, como la Agente 33 (Maya Stojan), y Simmons tendrá que esforzarse para no acabar con el cerebro lavado. Bakshi conoce la vinculación pasada de Simmons con SHIELD pero también que es perfecta para ‘convencer’ a Gill al conocerse ambos, ser nerds y esas cosas del salvarte la vida tiempo atrás. Como la mecánica de grupo va a cambiar, debido a la nueva incursión de espía de la científica, Leo Fitz se va a sentir como ese juguete roto que no cuenta para nadie. Descubrirá la celda de Ward y en su conversación ‘sin aire’ se pondrá al día para descubrir que a Donnie Gill Hydra le lavó el cerebro previamente. Tanto Simmons como el equipo de SHIELD está en peligro. En un barco de Casablanca y, tras una conversación entre Simmons y Donnie Gill, el encuentro entre amigos y enemigos es inevitable. La intención es mantener las pulsaciones a toda costa, que May rinda cuentas con Hunter (y así que éste no pueda disparar a Simmons) y, finalmente, que sea la propia Skye que confirme su entrenamiento de ‘zorra implacable’ acabando con Donnie al ser de nuevo ‘hipnotizado’ por Bakshi y acabar con todos aquellos que se encontraban en el interior de ese barco a punto de congelarse completamente. Otra bala de Skye le servirá a Simmons fingir salvar la vida del villano para así ganarse un ascenso en Hydra y potenciar el suspense de ese otro thriller de espías que nos espera en esta temporada con muchísimos e interesantes frentes.

Que el cuerpo de Donnie no sea recuperado abre una futura puerta a su regreso y la conversación entre Coulson y Fitz, posterior a la charla del nerd con Ward, potencia también su personaje. Fitz se entera asimismo de la misión de Simmons y veremos cómo encaja ese choque contra su enfermedad mental y visiones. Para completar de aumentar las pulsaciones con algún cliffhanger, Skye y Ward tendrán una de esas charlas a lo Dr. Lecter que son la nueva tónica de la serie y en la que el traidor revela a la hacker y agente de SHIELD que su padre sigue vivo… y que él puede llevarla con tan misterioso personaje. Ward no miente, sí… pero esconde interesada información. Aquí aumentan las pulsaciones de Skye para que se quebrante el témpano de hielo que había generado en su corazón marcado por el entrenamiento de May. Recordemos que esa tensión sexual entre Hunter y Skye fue pulverizada por algún comentario de la asiática y los guionistas se reservan una posibilidad de futuro entre Ward y Skye. ¿El típico triángulo romántico pero con gente enferma y amoral esta vez? Tal y como revela Ward, él no era un loco fanático de Hydra sino que obedecía únicamente a John Garrett. Muerto el perro acabó la rabia… pero siguiendo el consejo de Raina y sabiendo qué y quién es Skye considera que ambos son monstruos condenados el uno al otro. Veremos todas esas líneas de continuación de un sólido y notable show que esperemos consiga aumentar el número de televidentes gracias a sus buenas pulsaciones. “Agents of S.H.I.E.L.D.” se lo merece. ¡No la ponga en el frigorífico! 

La foto la firma un tal abc, como diría Mariló Montero

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