“15 años y un día”
Director: Gracia Querejeta
España
2013
Sinopsis (Oficial):
Jon, un adolescente conflictivo, es expulsado del colegio. Cansada, su madre decide enviarlo a la Costa de la Luz para que su abuelo, un militar retirado, pueda enderezarlo. No será fácil. Al chico le gusta el peligro, y el ex militar es un hombre de costumbres que se ha asentado en un punto muy cómodo de la vida. Los dos deberán enfrentarse a sus limitaciones y sus miedos.
Creo que cualquier cinéfilo con dedos de frente no puede entender por qué la Academia de Hollywood ha dejado fuera a “15 años y un día” a favor de (entre otras) “Alabama Monroe” (5 nominaciones a los Premios del Cine Europeo), “Un episodio en la vida de un chatarrero” (Gran Premio del Jurado y Mejor actor en el Festival de Berlín), “L'image manquante” y “Omar” (Mejor película y Premio del Jurado respectivamente de la sección ‘Un Certain Regard’ del Festival de Cannes), “La caza” (nominada prácticamente a todo desde su estreno), “El gran cuaderno” (Mejor Película en Karlovy Vary), “The Grandmaster” de Wong Kar-Wai o la flamante ganadora de los últimos Premios del Cine Europeo, “La gran belleza” de Paolo Sorrentino. Nadie da crédito a tal desprecio. Pero si la película de Gracia Querejeta arrasó en el Festival de Málaga… Pero si ya hubiera querido Hitchcock para “Marnie, la ladrona” una transición rojo putón para reavivar el flashback traumático. ¡Pero si Nicholas Ray mataría por las grandes e incomparables ideas que hay aquí para su “Rebelde sin causa”! En resumen: NO LO ENTENDEMOS. ¡Nadie lo entiende! ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué?
Tampoco se comprende por qué los Premios Feroz han ignorado nuestra candidata a los Oscars de este año. ¡Ni una nominación! ¡Pero si “Los amantes pasajeros” tiene cinco nominaciones allí! ¿Y esos se hacen llamar ‘informadores cinematográficos’? WTF!? Esperemos que “15 años y un día” arrase, al menos, en los Goya porque, entonces, ¿qué sentido tenía que los mismos que la mandaron a Hollywood ahora la den la espalda salvo trollear a Pedro Almodóvar? Lo irrebatible es que Gracia Querejeta ha dedicado una película a su padre repleta de cáncer, suicidios, secretos, puñaladas traperas, proclamas independentistas (TONI MARICÓN), maltrato animal, con títulos de crédito sacados de un puticlub de carretera y, por supuesto, mucho HAMOR de madre. Que Maribel Verdú, cuyo papel es de una actriz gafe pisa-mierdas que anunció pasta de dientes con dentífrico (a base de semen), no enseñe las tetas muestra cierta madurez… aunque dicho hecho hizo que la película apenas recaudara un 15% en taquilla de los 3,6 millones de euros que formaron su presupuesto. ¿Es una españolada ver durante hora y media a Tito Valverde haciendo footing, echando un quiqui con una furcia en una secuencia de montaje y plasmando un pseudo plagio en plan cutre del papel de Tommy Lee Jones en “En el valle de Elah” con canís y en la Costa de la Luz? Pues no, aunque nos encanta ver el reflejo de España, ese país donde las enfermeras mandan al orden a las inspectoras de policía y las niñas marroquíes son explotadas (laboralmente) por sus padres y tienen menos memoria que un pez.
Sin aire acondicionado, sin música ni televisión y, por supuesto, sin cine. Todo está roto con las manos de estropajo y parafilias por lavar el pelo a moribundos. Es incomprensible que la Academia de Hollywood haya pasado por alto a una película-manifiesto donde se retrata claramente que la causa de la crisis y el paro es no aceptar socialmente trabajos tan respetables como ‘rellenador de aceitunas’, donde la culpa de todo es de los ecuatorianos (que en realidad son catalanes independentistas) que viene a ‘robarnos’ y que tienen, además, un oído tan afilado que saben la orientación sexual de una persona con escucharla tocar el piano. En definitiva, este país que es España y que manda lecciones vitales del tipo:
— Era un chulo… pero de ahí a que haya muerto… tan joven… No sé. Mi padre dice que los chulos viven 80 años, pero con éste se ha equivocado.
— Tu padre es una especie de filósofo, ¿no?
— Bueno, es mi padre.
Bueno, pues es nuestra película seleccionada y hay que defenderla a muerte salvo que usted sea uno de esos que coge al chucho y lo deja en la carretera una vez llegan las vacaciones... Algo, que al parecer, se le da la mar de bien a nuestra Academia y que ha demostrado con la perruna “15 años y un día”, que hace honor a su título: desde “Mar adentro” ni nos nominan al Oscar y la película de Alejandro Amenábar es del 2004… O sea, 1-2-3-4-5-6-7-8-y-9... Jo, nos quedan 6 años para mojarla. Jo, ¿y por qué? ¿por qué? ¿por qué? ¿Es que no sabemos hacer cine festivalero internacional para que los académicos americanos mojen sus bragas o esto forma parte de la campaña para perseguir al fútbol español porque nos tienen envidia? Sí, sí, sí... nos tienen envidia. Confirmado.
Más razón que un santo tienes en esta crítica, la opción de llevarla a los Oscars no sé a quién se le ocurrió o si fue un bien quedismo más, pero es una película muy floja y con un guion y personajes muy mejorables. Te dejo la crítica que hice en su momento:
ResponderEliminarhttp://www.cineenconserva.com/2013/06/critica-quince-anos-y-un-dia.html
Feliz Navidad y que nos sigas regalando tu ironía y buen criterio cinematográfico en 2014!