El regreso de Jenna Hamilton marcado por “Surprise!” llega ahora al duodécimo capítulo de su tercera temporada
bajo el título “And Then What Happened”.
Aunque “La chica invisible (Awkward)”
no contará con su creadora para su cuarta entrega en 2014, Chris Alberghini y Mike
Chessler —nuevos showrunners— deberán ponerse las pilas para alcanzar el
nivel mostrado en capítulos como el objeto de esta review. La serie de MTV
despliega un estilo en la narración para sorprender a la audiencia sobre los
catastróficos eventos que sucedieron en el 17º cumpleaños de Jenna. Tras el
beso furtivo a Collin en plena entrada exterior e interior de la morada y la
primera fiesta sorpresa en su vida, en todos los sentidos terminales, “And Then What Happened” era un
capítulo muy esperado para comprobar tanto el estado de forma de la comedia
como la nueva dirección de la serie. ¿Conseguirán salvar la percepción de la
audiencia de una adolescente infiel, mentirosa y adultera? Sí, no está casada pero
ya saben cómo son los norteamericanos con estas cosas... Es momento de repasarlo y no con precisamente con besuqueos.
Veamos, Matty va a comprobar que el supuesto amor de su vida se está
dando el lote con Collin, el chico bohemio, carismático e inteligente que nunca
podrá a llegar a ser ¡SORPRESA! Realmente Jenna funciona cuando tiene que tomar difíciles
decisiones como aquella parodia crepusculiana
de Team Matty y Team Jake y ahora tendrá que escoger entre aquello que quiere
ser en la vida o su vertiente típico-tópica dentro de los márgenes de
popularidad de instituto y conseguir el corazón del chico más popular y
estrella del equipo del colegio. El choque emocional y romántico tenía que
explotar y “And Then What Happened”
va a desplegar las credenciales más originales en la escritura de la serie al
ir recomponiendo todo aquello que sucedió por todos los integrantes de la
fiesta que generó el beso e infidelidad de la protagonista. Así, veremos la
perspectiva en cadena de Lacey Hamilton que se pondrá en contacto con Valerie
Marks para que vayamos a la cafetería y Ming, Jake, Tamara, Fred, Lissa, Clark
e incluso Tamara nos desvelen todo aquello que sucedió en la fiesta de
cumpleaños más trending topic del
momento.
Comenzaremos y acabaremos con la depresión terminal de Jenna y sus
remordimientos con el aislamiento en el domicilio y la preocupación de su
madre, que activará la sucesión de descubrimientos en boca del resto de
personajes. Nadie sabe si realmente Jenna y Matty han roto y las agradecidas
apariciones de Clark y Lissa, también aportarán un cúmulo de sucesos para
completar los instantes previos y posteriores al beso de Jenna y Collin. Desde
la nariz rota de Collin hasta la vuelta al collarín de Lissa con un incendio
incluido, “And Then What Happened”
guarda perfectamente sus cartas y convierte una ruptura y momento trágico en un
carrusel de situaciones cómicas. Sabremos que Tamara fue aquella que golpeó a
Collin, que Matty volvió a la habitación de Jenna donde estaba siendo consolada
por Clark (aunque ella le tendría que consolar a él tras la cancelación de “Welcome to the Family”), evitando un
golpe de Valerie a una piñata que acabó en la cabeza (y piñata) de Lissa antes de ser
pisoteada por una turba y que tras todas las aportaciones seguimos igual…
hasta que Sadie hace acto de presencia para trollear
al personal (y llamar troll a Tamara)
y soltar su siempre funcional «You are welcome».
Después de ofrecer una perspectiva complementaria de los secundarios y
funcionar mejor que esa voz en off de Jenna que ya comienza a cansarnos, llegan
las lágrimas con el reencuentro de Jenna y Matty para aclarar su relación. Aunque
Matty está dispuesto a perdonar a Jenna, ella no podrá volver a mirarle a la
cara después de todo aquello que hizo… Me suena esta historia... Es momento de pasar página y que Collin
cambie a Jenna aunque nos tememos que la ruptura de mutuo acuerdo va a hacer
que los amigos tengan que tomar también complicadas decisiones. Es evidente que
el crecimiento de la serie y la futurible entrada en la universidad de la protagonista tenga que ir cambiando incluso de dinámica a todo el conjunto y evidentemente forma. Esperemos que la serie siga
utilizando la escritura creativa en sus guiones y dando mayor protagonismo a
los secundarios para crear nuevas vertientes dentro del universo que presenta “La chica invisible (Awkward)”. De
hecho, estos capítulos que van a formar nuestra entrada en el mundo romántico y
saga de Collin están obligados a ofrecer el punto de vista de esos secundarios
que también van a tener que recomponer filas. Y por favor, un capítulo donde Sadie sea la absoluta
protagonista y acabe perdiendo su virginidad con Matty soltando después del
coito «You are welcome». ¡Y no vuelva a hacer llorar a Matty, que nos partimos de risa con sus trágicos intentos de actuar!
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