Agents of S.H.I.E.L.D. (3x18) The Singularity: Hydra ha muerto, larga vida a Hive

Pensemos en que “Agents of S.H.I.E.L.D.” desea ser esa singularidad televisiva capaz de aunar todos los conceptos alrededor de una serie de personajes con superpoderes y, al mismo tiempo, añadir elementos de thrillers de espionaje/acción e incluso guiños tanto a la transhumanidad de “Orphan Black” como al Universo Marvel. “The Singularity”, decimoctavo episodio de la tercera temporada de la propuesta de ABC, llega para que veamos los planes de Hive para conquistar el planeta y que vayamos integrando esa amenaza que supone Los Inhumanos en el mundo. Tras el hiato del proyecto cinematográfico en pos de dar forma a “Spider-Man: Homecoming” y “Ant-Man and The Wasp” en la Fase 3, entendemos que el show al servicio de Daisy Johnson va a hacerse con el baluarte mitológico de esa especie creada artificialmente por los Kree. Es cierto que la duda también aquí pudieran ser los propósitos de los escritores para integrar “Capitán América: Civil War” en “Emancipation” (3x20) debido a su estreno en EEUU el 6 de mayo. Para aquellos que ya hemos visto el film de los hermanos Russo no sabemos hasta qué punto se va a fracturar el grupo (de por sí fracturado) con los Acuerdos de Sokovia, con los que el gobierno norteamericano tratará de coordinar las misiones de SHIELD si éstas utilizan a Inhumanos (se entiende). La pregunta es simple y sencilla: ¿quedan Inhumanos entre el equipo de Coulson y los suyos? ¿No nos dejó claro “The Team” (3x17) que The Secret Warriors duró menos de medio capítulo ante el peligroso influjo de Hive? Más allá del marketing y de diferenciar larvas y parásitos, “The Singularity” revela desde su primer plano secuencia que Daisy fue la única infectada y que Lincoln es el único Inhumano interesado en quedarse para encontrar a su novia. En realidad, Daisy podía haber acabado con todos sus compañeros fácilmente o dejarlos enterrados de por vida allí. No lo hizo, simplemente no quería que la siguieran y saboteó las puertas del hangar. Coulson mantiene la esperanza de recuperar a ese personaje que considera la hija que nunca tuvo y que conforma junto a May una extraña familia. El episodio quiere incidir sobre esas mecánicas con la habitual inteligencia de los libretos de la serie y nuestras dudas eran tanto al movimiento de Daisy, con ese extraño artefacto Kree y los cristales terrígenos, así como la reacción de SHIELD ante esa nueva amenaza que asegura que Hive que se ha metido con el equipo equivocado. ¿Será verdad? ¿Se convertirá en realidad la terrible visión de Daisy? Repasemos “The Singularity”. 

La mecánica para esta recta final de temporada es simple y sencilla: Hive está construyendo un ejército de Inhumanos y su objetivo es dominar el planeta. Que Hive tenga el cuerpo de Grant Ward aporta ese concepto de interés en los propios guiños al pasado de la serie, haciendo que sus encuentros con el resto de personajes sean más satisfactorios. En el caso de Daisy la conexión de ambos seres en ese enjambre da empaque incluso a la muerte de Grant, como si esa alma sedienta torturada hubiera hallado el cauce para transformar su vacío interior en algo mayor. Al fin y al cabo, “Agents of S.H.I.E.L.D.” siempre ha tratado sobre la metamorfosis de sus personajes y en cada nueva transformación crecen todavía más. A nivel científico, “The Singularity” trata de revelar que Hive no es un parásito común ya que no quiere atacar y debilitar a su huésped sino que les ofrece una motivación sin límites estimulando el centro de placer de su cerebro… ¿Cómo, entonces, podrán desinfectar a Daisy? ¿Acabarán recurriendo al mítico vampírico y encontrarán que el único modo es acabar con el propio parásito? El transhumanista Dr. Holden Radcliffe es clave y vamos a tener una misión conjugada por Simmons, Fitz y Mack para que los científicos se quiten las batas blancas y se transformen en agentes de campo en un club privado de Bucarest, utilizado como tapadera para el mercado negro a gran escala para tecnologías emergentes. Evidentemente las cosas no van a salir como estaban planeadas cuando Daisy, Hive y James pongan todo patas arriba…

Por parte de la otra trama troncal, la lucha entre SHIELD y Hive es por los Inhumanos que todavía se encuentran por decidir bando o ser ‘captados’ por su ‘dios’. Pensemos en ciertos paralelismos con Apocalipsis del universo de los X-Men aunque la idea del villano es más cercana a “La invasión de los ultracuerpos”, haciendo que todo la población global sea un único organismo bajo su manto de control. En ese aspecto, no es que Hive desee construir un ejército para iniciar una guerra sino que desea acabar con todas ellas privando a la humanidad de su propia esencia caótica y libre albedrío. Alisha (y sus dobles) llegan como nuevo Inhumano en la mirilla tanto de SHIELD como de Hive y Coulson coloca a Lincoln un traje explosivo como seguro, ‘detonado’ obviamente una crisis de confianza al no poder permitir que Hive se haga con otro miembro del grupo. Aquí se va a explorar la mecánica entre Coulson y May respecto a la sangre que ambos tienen en su conciencia y si el director de SHIELD utiliza a la asiática como un instrumento y arma. ¿Un concepto similar al de la quinta temporada de “Homeland” entre Saul y Peter Quinn? Alisha ya estaba alienada con Hive y tendremos tensión en ese encuentro con un resultado explosivo para esa Inhumana capaz de generar réplicas de sí misma. No obstante, veremos que Hive es capaz de paliar esos terribles efectos secundarios que sufría Alisha cuando morían sus clones y que el nuevo dios de los Inhumanos es capaz de hacer que éstos controlen sus poderes rápidamente una vez están en su enjambre como comprobaremos en el caso de James. En cierto modo, se entiende que esas criaturas diseñadas por los Kree estaban preparadas para construir un ejército manejable a las órdenes de su ‘dios’ y general. El problema es que Hive era demasiado poderoso y ahora entendemos por qué los Kree se arrepintieron de su creación. También seremos testigos de que ese artefacto Kree que rescató Daisy tiene otra pieza compañera y que es realmente lo único que puede matar a Hive. Los cristales terrígeneos, además, forman parte de ese plan para despertar a aquellos Inhumanos que todavía no ha mutado. 

Dejando apartada esa esencia humorística respecto al nombre de Inhumano de James (¿pon un Cisco Ramon en tu vida?), el título de “The Singularity” hace referencia a esa singularidad como momento definitorio en la relación de Fitz y Simmons. Su amistad es lineal con todo sus alicientes matemáticos pero la tensión sexual llega a su fin para que comience su relación romántica. Y ya no hay vuelta atrás… El reencuentro se va a producir tras aumentar ambos su adrenalina. Fitz recibirá una última amenaza en plan Darth Vader de Daisy mientras que Simmons se topará con Hive con todas las connotaciones que ese instante simboliza. Simmons volverá a apretar el gatillo aunque sabemos que Hice es un dios inmortal en ese aspecto… y que tiene en mente poseer (a todos los niveles) a aquellos que Grant conoció. Por parte del siguiente movimiento en contra de Hydra veremos cómo el gobierno estadounidense elimina sus infraestructuras en el resto del mundo. ¿Hydra ha muerto, larga vida a Hive? Esas imágenes un tanto residuales sobre la muerte de Bin Laden similar a esa fotografía de Barack Obama con su equipo de seguridad nacional la establecen May y Coulson. Todo ha cambiado. Prueba de ello es que Hive tiene el dinero de Gideon Malick y ha comprado un pueblo entero para que Holden Radcliffe inicie los mismos experimentos en seres humanos que conceptuaron su creación. ¿Su plan? Redefinir la humanidad para que todos sean parte de su enjambre y único organismo recreando el experimento Kree. Ahora empieza todo… ¿Podrá salvar a Coulson y a sus agentes su nuevo tuneado escudo de energía homenajeando a Steve Rogers? ¿O el product placement simplemente vale para salvar el día en lo que marketing se refiere?

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