American Horror Story. Freak Show (4x13) Curtain Call: Showtime

El final de “American Horror Story: Freak Show” ha aterrizado para confirmar todos los defectos y méritos de la propuesta perpetrada por Brad Falchuk y Ryan Murphy. Aunque la serie sigue siendo el gran reclamo de audiencia de FX se ha constatado el completo desgaste de la antología al servicio de Jessica Lange. ¿Continuará la actriz nominada cada año a los Globos de Oro y Emmys o se convertirá en el fantasma de la quinta temporada? Sea como fuera, John Landgraf ha anunciado que la próxima entrega conllevará un cambio radical en el ‘horror show’ sin demasiados detalles al respecto. ¿Reducirán el número de capítulos a un modelo ‘british’ o nos espera una sorpresa que ‘revolucionará’ de nuevo la televisión? Es hora de recapitular los traspiés, de sentir la sensación después de todo espectáculo. La irregularidad ha sido el mayor defecto de “American Horror Story: Freak Show” y sus referencias, discursos y guiños a “La parada de los monstruos” de Tod Browning y “El carnaval de las almas” de Herk Harvey le permiten ser suficientes para mantenerse en la memoria como icono. Sus covers, esa maleta diabólica de diseño o la conexión con “American Horror Story: Asylum” puede que sepan a poco en esa historia que podía (y debía) dar para más. El desenlace, eso sí, «tiene que ser teatral» nos avisa Jimmy. Repasamos “Curtain Call”, decimotercero y último capítulo de la aparatosa y escénica “American Horror Story: Freak Show”. 

Si usted ha leído el avance de este bastardo blog, comprobará que el 95% del capítulo está contado en ese post. Podemos confirmar que los guionistas no tenían muchas salidas para trazar un ‘happy-ending’ tras una masacre y giro divisado en “Orphans” (4x10). Elsa Mars tenía que convertirse en la reina de la pequeña pantalla y formalizar ese discurso (e incluso sobre-lectura) acerca de que los ‘freaks shows’ desaparecieron en los años 50 al aparecer otro espectáculo donde los monstruos puedan reinar (y no molestar al ser incapaces de atravesar la pantalla). Los ‘freaks’ tienen que encontrarse al otro lado del vidrio, ya sea en esos recipientes de museo o al otro lado de la mampara catódica. No tienen lugar en el mundo de esa otra sociedad inhumana que condena la diferencia, imponiendo los cánones y determinando la ‘normalidad’. Esa sociedad ‘bonita’, con dinero (y asesina), representada por Dandy, nos lleva a Desiree y su recuerdo de ser «el mayor monstruo de todos». Miss Mars es esa emperatriz y soberana (y ama del bondage) que va a colocarse su corona, pasar por el infierno para alcanzar su cielo personal. En cierta medida, Brad Falchuk y Ryan Murphy desean despedirse de la actriz por si decidiera no continuar es su antología. Ella ha sido, es y será la gran majestad del espectáculo, esa narcisista detestable a la que acabamos amando y “American Horror Story: Freak Show” quiere ser coherente con todo aquello que hemos ido divisando toda la temporada. Sea bueno o malo. Nos guste o nos haga aborrecer el conjunto. Dandy Mott, tras comprar el circo, va a cumplir su sueño de ser un freak. ¿El problema? Nunca lo ha sido y nunca lo será… nunca será uno de ellos. 

El primer acto de “Curtain Call” está dedicado al ‘showtime’ de Dandy y a ratificar que a nadie le interesa verlo ‘actuar’ sobre un escenario salvo que saque su lado oscuro y psycho-killer. Paul the Illustrated Seal se lo indica a Penny y al propio espectador: no hay otro lugar para ellos ni salida ni escapatoria. Ese ‘Freak Show’ a manos de un bebé malcriado y psicópata es su único refugio y su propia tumba. «Nuestro mundo se está muriendo, cariño» nos machacan para verificar esas líneas alegóricas e incluso previsibles a aquello que va a suceder. La ciudad ha tenido su ración de ‘freaks’ y asesinatos violentos y no va ir al lugar del que procede el supuesto responsable de la masacre de la fiesta del tupperware. Conocemos que la gente de Jupiter es muy rencorosa y los freaks tienen que estar agradecidos de que no hayan aparecido por allí los pueblerinos en una turba para quemar todo y a todos. Paul, el único defensor con una filosofía de callar y aguantar, estallará finalmente y los monstruos se revelarán ante su jefe para dejar claro que no es especial, es aburrido y que nunca será uno de ellos. Nunca… Es hora del ‘showtime’ de Dandy y de una masacre con su pistola para poner los sesos de los freaks patas arriba. Mueren todos. Todos… Si algún monstruo tenía alguna pistola y/o arma… desaparece por necesidades del guión y únicamente Amazon Eve se enfrenta a ese psicópata desatado. El sacrificio de la mujer gigante salva a Desiree Dupree… aunque no sabemos por qué se quedó dentro de su caravana si podía haber huido hacia el exterior… Jimmy Darling llegará tarde para comprobar que Dandy dejó a todos los freaks muertos en el escenario, amontonados para dar su habitual chillido de impotencia insertado en cada avance de cada capítulo de esta temporada. No falta susto por parte de Desiree… la única superviviente de la matanza… junto a las siamesas Tattler, secuestradas por ese caballero oscuro. “Curtain Call” romperá la dinámica al pasar a la boda de Dandy con Bette y Dot Tattler. ¿Nos hemos perdido algo? Al contrario, sabemos qué va a pasar cuando nos confirman que las siamesas han preparado un banquete de boda magnífico con todos sus platos favoritos gracias a una ‘nueva’ ama de llaves y cocinera formada en Francia que han contratado. Desiree en 3, 2, 1…

Dandy es drogado y llega el recital visual: el juego de velas, planos que desembocan las cabezas de Tattler, la aparición de Jimmy y el disparo de Bette con esa pistola de oro con la que su esposo ha ejecutado sus crímenes. Dandy pasa de ser el hombre más afortunado del mundo y pensar en formar una familia freak con bebés de tres cabezas, a darse cuenta de que ha sido engañado sobre sus propios sueños. Nadie allí quiere su dinero manchado en sangre, simplemente acelerar aquello de que hasta la muerte nos separe. El problema vuelve a ser el mismo: todo está demasiado mascado y (sobre)explicado. ¿Era necesario meter un flashback aclaratorio sobre el acercamiento de Jimmy a la mansión y contacto visual con las siamesas? ¿Remarcar que Bette es un homenaje a Bette Davis y, al final, era la mejor actriz de la función? La cuestión es meter a Dandy en el tanque de Theodore Hardeen que hizo famoso Houdini y volver a remarcar esa vía de ser show del espectáculo y cambiar el lado del cristal (y destino). Los monstruos heredarán la tierra y los otros monstruos serán una maldita atracción de feria. Cambio de roles. Es hora de las palomitas y reciclar ese baño de Dandy con su propia sangre y alma en el envase. Su deformación sobre el cristal reitera todas las ideas y, como venía siendo habitual en los últimos capítulos, Desiree acuña la comedia negra y la estampa final de la venganza irónica. El ‘showtime’ de Dandy llegó a su fin y ‘curtain call/fall’. No se olviden de las palomitas.

“American Horror Story: Freak Show” tenía que contarnos el paso al ‘Walk of Fame’ de Elsa Mars y el estilo documental un tanto kitsch (y en blanco y negro) contrasta con esa película en ocho milímetros de su pasado. Previamente nos revelaron que Elsa Mars deseaba ver al señor Henry V. Gablees, el presidente de la cadena. Sí, Elsa no trata con intermediarios. ¿Qué clase de lugar es este donde te ignoran y te tratan como la suela de un zapato? Hollywood. Nada nuevo. Que saquen a Marlene Dietrich por medio no hace más que desatar a la bestia y el vicepresidente junior de casting, Michael Beck (Beckenbauer), será tanto la seña del cameo de David Burtka como la conexión necesaria para que Elsa consiga acceder al show business televisivo. El amor lo mueve todo. En 1960 Elsa Mars sigue siendo la reina de la televisión la noche de los viernes y toda una galardonada celebridad. ¿El problema? Los anuncios de café están mal escritos (?) y, tras creer completar su sueño, Elsa se ha dado cuenta de que nada ha cambiado. Buscaba que la amaran y, finalmente, ahora todos aquellos de los que está rodeada se comportan como sus viejos monstruos en el ‘Freak Show’. La fama se compra aunque se necesita un buen publicista para no acabar como Dandy. La visita de Massimo Dolcefino aparta a Elsa de poder volver a re-escribir su propia historia y felicidad. Existen dos lecturas por el trabajo de carpintero de ese Gepetto que ayudada a construir aldeas y hacerlas estallar con sus bombas atómicas. Esa conexión precisa con el trabajo televisivo de Miss Mars. Elsa quiere escapar con su gran amor pero Massimo tiene cáncer en sus pulmones y le queda un mes de vida al extenderse en sus huesos. Da la impresión de que sus historias de amor están condenadas como en “American Horror Story: Coven” . Para colmo, la periodista Hedda Hopper consiguió la película snuff de Elsa revelando la mentira que dijo a su esposo. ¿Un accidente ferroviario? El matrimonio es la más fea mentira y parece que Brad Falchuk y Ryan Murphy lo odian a muerte. Hedda no es sobornable y se ha marcado como objetivo desenmascarar a Elsa Mars. En Jupiter, Florida, hallarán una fosa común con todos los integrantes del ‘Freak Show’ muertos. Sí, todos… Elsa accede a pagar por sus pecados y errores cometidos, por ser el mayor monstruo de todos y accede a actuar en Halloween por imposición de la cadena. Es un suicidio. 

El regreso de Edward Mordrake y sus fantasmas —entre los que está Twisty the Clown—, ante el cover de ‘Heroes’ de David Bowie escenificado por Elsa sobre el plató de televisión, es consecuente y muy previsible. Nadie ve a los fantasmas y Mordrake cumple con su función aunque el destino de Miss Mars sea otro distinto. “American Horror Story: Freak Show” quiere propiciar el cielo a sus personajes más queridos y previamente nos revelaron la conexión televisiva de la actuación de Elsa con el resto de supervivientes. Desiree Dupree está casada con Angus T. Jefferson y consiguió su sueño de tener hijos y una familia. Del mismo modo, Jimmy Darling y las siamesas Tattler son pareja y esperan un bebé. El número de cabezas está por determinar. Elsa volverá a la carpa de su ‘Freak Show’ para formalizar el homenaje a “El carnaval de las almas” e incluso una resolución similar a “American Horror Story: Murder House”: únicamente en la otra vida se puede hallar la felicidad que fue imposible culminar en la mortalidad. Los fantasmas de sus monstruos se reúnen y Ethel y Elsa se reconcilian. Solamente se admiten allí freaks y Elsa, por fin, podrá volver a ser amada y enlazar con esa primera actuación de la temporada. ‘Life on Mars?’ de David Bowie marca la despedida de una ‘normalización’ de los freaks y una deconstrucción de su protagonista para volver a ser monstruo, para volver a ser inmortal como designio de esas musas icónicas donde cualquier pecado y crónica ‘bizarra’ hollywoodiense son perdonados. Es obvio que nos encontramos ante un cruce de caminos, impuesto muchas veces a bandazos con personajes incoherentes como Dell Toledo, Maggie Esmerelda... 

Por lo tanto, “Curtain Call” deja en la huella de su coherencia estructural el mayor de sus méritos, pero condena la temporada a una función ciertamente previsible en esos márgenes de inconsistencia de sus personajes. Se trata de una redención ante los fans de ‘American Horror Story’, a los que les habían prometido la mejor de todas la temporadas y se han encontrado con la peor y más irregular de las mismas. El resto de monstruos mortales entonará un «Te odio, te odio, te odio» como nuevo canto a ese espectáculo tan brillante que finalmente quiso deslumbrar tanto que dejó ciegos a sus telespectadores. Ciegos de ira o amor. He ahí el sentido del artista, de esa superficialidad y cursilería, de esos sueños predecibles empaquetados en ese showtime que fue pasado y seguirá siendo nuestro presente. 

A continuación, las reviews de “American Horror Story: Freak Show”:

☼ 4x01 “Monsters Among Us”

☼ 4x02 “Massacres and Matinees”

☼ 4x03 “Edward Mordrake: Part 1”

☼ 4x04 “Edward Mordrake: Part 2” 

☼ 4x05 “Pink Cupcakes”

☼ 4x06 “Bullseye”

☼ 4x07 “Test of Strength”

☼ 4x08 “Blood Bath”

☼ 4x09 “Tupperware Party Massacre”

☼ 4x10 “Orphans”
☼ 4x11 “Magical Thinking”
☼ 4x12 “Show Stoppers”

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