“What the Little Bird Told Him” (1x12) nos dejó completamente conmocionados y destrozados a muchos… Personalmente no sé si podré acabar sin llorar antes de que llegue el final de la presente frase. “Gotham” ha decidido prescindir de su mejor personaje y que las vacaciones de Jim Gordon en el Asilo Arkham duraran apenas un simple y paupérrimo capítulo. NOTA: tiene nueva churri… y el resto nos hemos quedado viudos sin la novia de la serie de FOX. “Welcome Back, Jim Gordon”, decimotercer episodio de esta primera temporada, llega para constatar el ascenso épico del protagonista del show y así comenzar a limpiar esa putrefacta ciudad desde su propia comisaria. He ahí esos conflictos morales en papel mojado debido a su vinculación con Oswald Cobblepot y todo ese fin que justifique los medios que van a poner sobre el tablero inconscientemente. Recordemos, Fish Mooney y Butch Gilzean han sido ‘pescados’ por Carmine Falcone y su futuro es más negro que el del perchero de Barbara Kean. Drama. Nuestra queridísima y fundamental Liza la Gremlin fue estrangulada cruelmente en ese recital caricaturesco de vergüenza ajena y trospidez que compone esta serie. Es momento de repasar nuestras penas y pesares en “Welcome Back, Jim Gordon” escrito por Pepe Gáfez. Repito, no sé si podré acabar sin llorar otra vez antes de que llegue el final de la presente frase.
Si me piden que califique con una palabra este episodio diría inmediatamente «lamentable». Sí, «lamentable» a todos los niveles. Los personajes aparecen y desaparecen sin mucho sentido y no podemos entender que en toda esa lucha contra la corrupción de Jim Gordon no hagan acto de presencia Crispus Allen ni la ex novia del perchero: Renee Montoya. Tampoco desconocemos para qué nos presentaron al famoso Comisario Loeb si vuelve a desaparecer cual fantasma… mientras que la llegada de nuevos personajes a la comisaría más teatral de la galaxia televisiva va a servir para esa relación entre Edward Nygma y Kristin Kringle como único punto serio. Sí, es lo más serio… como quitar quirúrgicamente la cebolla de la comida. El contraste lo pudiera ejercer esa ruptura infantil y absurda de Selina Kyle y Bruce Wayne en plena edad del pavo con Ivy Pepper trolleado por doquier. Sí, «lamentable». Selina se siente presionada por Bruce y decide salir por la tangente contando ahora al joven que no vio al asesino de sus padres… Se lo inventó todo. ¡Pero si saltaron juntos por esas azoteas! ¡Si se besaron! Sí, «lamentable». El empapamiento de bragas de Bruce lo secará Alfred Pennyworth y el joven Wayne investigará otras pistas y posibilidades para hallar la verdad… Inicialmente la trama alrededor de aquel que se transformará en Batman era uno de los puntos más interesantes del show. Ahora, se ha convertido como la futura Catwoman y Hiedra Venenosa en meros ‘okupas’ de la serie. Los guionistas no saben muy bien qué hacer con ellos hasta que presumiblemente en la recta final vuelva a sacarse de la manga a Molly Mathis y esa conspiración en Industrias Wayne. O algo así. Sí, «lamentable».
Planteemos que todo el potencial de “Welcome Back, Jim Gordon” lo ejerce la propia vuelta del detective para encontrarse con el asesinato de un testigo en plena comisaría por uno de los suyos… Los agentes están divididos entre aquellos que quieren hacer lo correcto y los corruptos hijos de fruta que quieren seguir con sus actividades ilícitas, siendo intocables por sus contactos. La balanza tiene que decantarse hacia Gordon y el asesinato a golpe de picahielos de un anciano a manos del detective de narcóticos Arnold Flass, que está protegido por gente importante y con el comisario en nomina. Corrupto, asesino y traficante. Malo, malo y mil veces malo. Por cierto, ¿esa comisaría es un instituto o qué? Mucho chulo de pasillo por allí suelto. Mucho chulo. Según Asuntos Internos el asesinato se convierte en suicidio. Su viuda es vieja y tonta así que tampoco se va a quejar mucho, pero motivará las ansías escrotales de Gordon por conducir su ira testicular. A través de su red dirigida por Derek Delaware las piezas irán cayendo y la capitana Sarah Essen hará su primera acción útil en toda la temporada. Repito, la capitana Sarah Essen hará su primera acción útil en toda la temporada. 13 capítulos… y hace algo la tipa. Sí, «lamentable»… aunque valga más tarde que nunca. ¿Qué es lo suficientemente fuerte para destrozar barcos pero que aun así teme al sol? La respuesta la tienen Kate Winslet y Leonardo DiCaprio y nosotros también: esta serie es el Titanic a punto de chocar con un iceberg y hundirse definitivamente. ¿Es un drama popular tróspido? ¿Es una comedia que provoca vergüenza ajena? No, es “Gotham”.
Puede interesarnos la relación de Butch y Mooney y también el pasado que tiene ésta con Harvey Bullock. Pudiera, claro… Butch escapará para salvar a su jefa de una brutal tortura a manos de ese Bob que dicen que es uno de sus mejores hombres y después se convierte en FAIL monumental. Como todo aquí. Mooney quiere venganza y su aparición por su antiguo local, que ahora regenta El Pingüino, se salda con la visita a tiempo de Victor Zsasz y sus chicas. El auto-sacrifico un tanto estúpido de Butch y el adiós temporal de la ciudad de Mooney gracias a Bullock nos deja cierto sinsabor de boca… a resaca. La borrachera de Oswald Cobblepot y todas esas secuencias que protagoniza con su madre Gertrude y su ayudante Gabe —e incluso la visita de Gordon— son tan esperpénticas como cómicamente surreales. ¿Al tono de David Lynch sin el misterio, emoción y magnetismo de David Lynch? Gordon pedirá ayuda para tocar algo intocable pero los métodos de Gabe —bastante violentos y destructivos— van a acercar tanto al protagonista al éxito como a su propia perdición. Siempre nos quedará el alcohol…
Hemos llegado al 13 y estamos de luto. Peor imposible. No puedo pensar en el adiós repentino de Liza la Gremlin. Ella llegó a nuestra vida como una luz capaz de iluminar nuestra alma y vida. Cada vez que sus labios aparecían en la pantalla nuestro corazón palpitaba de ‘emosión’. Ella era la reina del show y los insensibles guionistas de “Gotham” han decidido aniquilar nuestras esperanzas, apagar nuestra luz… detener nuestro corazón. No sé si podré acabar sin llorar antes de que llegue el final de la presente frase. Ains. Te echamos de menos Liza. Siempre. No sé si podré seguir adelante sin ti. Mi vida en esta serie carece de sentido… Espero que desde dónde quiera que te encuentres sigas iluminándonos con esa belleza tuya tan característica y celestial… Te echamos de menos Liza, la Gremlin. Te echamos…
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