Heroes Reborn: ¿Renacimiento creativo o reboot netamente comercial?

Miniserie de TV

“Heroes Reborn”

EEUU

2015

Sinopsis (Página Oficial):

Un año después de un brutal ataque terrorista en Odessa, se responsabiliza a aquellos poseedores de poderes extraordinarios. Por eso, ahora son perseguidos y tratan de esconderse en los lugares más remotos del planeta.

Crítica Bastarda:

No hay que rasgarse las vestiduras. “Heroes” fue una serie de una única temporada, de una introductoria y primera gran entrega; incluso pionera en ese concepto fandom en la Comic-Con y cultura de la ‘descarga’ televisiva en versión original que seguiría cimentando “Lost”. Tras revelar sus cartas de presentación y buena factura a todos los niveles, pasamos por la huelga de guionistas que fragmentó su irregular continuación, por esa falta de ideas constatada en sus temporadas finales y, sobre todo, a líneas argumentales víctimas del delirio (o el consumo de estupefacientes) plagiadas de “Santa Barbara” —que “Melrose Place” es sagrada—. El esperpento se completó con decadencia, caída libre en cuanto ratings de audiencia se refería y toneladas de desaguisados narrativos, con cambios constantes de bandos que ni el más preciso experto escritor podía solucionar (o explicar). Pero muerto el perro, no se acabó la rabia. En televisión nunca es posible erradicar la enfermedad… y en tiempos desesperados se toman medidas desesperadas. NBC necesita un golpe de efecto para su desastrosa noche de los jueves y “Heroes Reborn” obedece tanto a una maniobra de marketing como a un evento (supuestamente limitado) para saciar a los fans de la originaria creación de Tim Kring. Como nadie (ni nada) podía retomar “Chapter Eighteen ‘Brave New World’” (4x19) —ni mucho menos hacerse seguramente de nuevo con los servicios de Ali Larter, Hayden Panettiere, Zachary Quinto o Milo Ventimiglia más allá del mero cameo o referencia— la actitud es claramente de renacer mediante un reboot con Noah Bennet (Jack Coleman) como constante y claro hilo conductor de esa sociedad que se enfrenta a la irrupción de los evo (humanos evolucionados). 

Cuatro años después de que Claire revelara al mundo la existencia de personas con poderes, un ataque terrorista en Odessa (Texas), en la sede central de Primatech, detona los mecanismos para desplegar un escenario similar al expuesto en el universo de X-Men un año después de esos hechos. La lucha entre los seres humanos y aquellos que tienen poderes es inminente y la caza de brujas nos presenta a villanos por necesidades de la venganza como Luke (Zachary Levi) y Joanne (Judith Shekoni). Noah también ha decidido hacer borrón y cuenta nueva tras la ‘muerte’ de Claire y rehacer su vida… pero rápidamente se va a ver atrapado en una gran conspiración donde los ‘evo’ pueden salvar al mundo de una gran (y profetizada) amenaza que se cierne sobre el planeta. “Heroes Reborn” sirve de carta de presentación para todos los nuevos personajes como un adolescente llamado Tommy (Robbie Kay) con la habilidad de teletransportar objetos y personas o esa joven japonesa, Miko (Kiki Sukezane), que quiere encontrar a su desaparecido padre y que, con sus poderes, nos traslada a un videojuego que se entrelaza con la vida real. Evidentemente la redención está a la orden del día y Carlos (Ryan Gozman) representa esa vertiente de un ex militar al tomar el relevo de El vengador, esa reminiscencia a El Santo. Esas múltiples historias diseminadas en todo el globo terráqueo tratan de evitar la tremenda decepción que dejó el poso final de “Heroes” mediante un show sólido con complementos friki-geek como Katana Girl para contentar al más escéptico espectador. 

“Heroes Reborn” trata de volver al espíritu y frescura de la primera temporada de “Heroes”, aunque otra cuestión es saber cómo va a encajar en los moldes de la actual televisión y reverso cinematográfico plagado ya de grandes producciones comiqueras dedicadas a personajes con antifaz y/o superpoderes. Si bien algunos flashforwards iniciales del show Tim Kring planteaban un escenario similar al que propone “Powers” de Playstation, la idea de la serie limitada de NBC es desmigajar una gran conspiración junto a una amenaza global —con forma de eclipse como guiño al pasado— a través de esos trece capítulos que pretenden rentabilizar aquella coletilla seriéfila: «Salva a la animadora, salva el mundo». Son tiempos de “Agents of SHIELD”, “The Flash”, “Arrow” y todo ese arsenal de calidad monumental que está perpetrando Marvel en Netflix. Por no hablar de la jugada sobre la ciencia ficción de los Wachowski en “Sense8” para entrelazar diversos personajes a lo largo y ancho del planeta… “Heroes Reborn” aterriza en estos tiempos en los que ya todo está inventado (más y mejor) con el entretenimiento meta-referencial como la mejor de sus armas. Más jugosa para el público que para la crítica, estamos ante una añadidura del cosmos original con el suspense propicio para mantener a viejos y nuevos espectadores de la serie de Tim Kring, lanzando guiños como una misteriosa mariposa o ese orondo personaje que ‘compra’ tus recuerdos con un penique. Se avecinan curvas y también anunciados cameos como los de Matt Parkman y sobre todo Hiro Nakamura. No obstante, tal vez mi trospidez interior me haya convertido en una víctima de los resortes del marketing. Y no me refiero a que la ‘mala’ se llame Joan(ne) Collins y aparezca allí una mulata de metro ochenta o que un cura se convierta en niebla cual Drácula para abusar presumiblemente de menores o ayudar a ‘evos’ a salvar el culo con destino Canadá (país de gente extraña y presumiblemente alienígena). No, personalmente y en mi opinión: universo ‘reborn’ solamente hay uno, el dedicado al inmortal capítulo de ‘Conexión Samanta’ dedicado bebés reborn. Esos muñecos de silicona —y sus sufridas madres— sí que son nuestros héroes, nuestro renacido completo sustituto de un original de carne y hueso. Tal vez deberíamos plantearnos que nuestro retoño se nos fue allá en mayo de 2007 y aquello que tenemos delante es mera silicona inerte, con una conexión mimética respecto a una entidad viva y orgánica. Aunque ya sabemos que hay mucha gente que disfruta con los reemplazos plastificados para contrarrestar sus anhelos y fantasías orgiásticas no superadas. Y todos sabemos que no son con forma de bebé…

Historias Bastardas Extraordinarias by Maldito Bastardo is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional License.