El hijo de Batman: Papá, soy tu hijo

“El hijo de Batman”

Título original: “Son of Batman”

Director: Ethan Spaulding

EEUU

2014

Sinopsis (Oficial):

Escondido en una fortaleza secreta de la cima de una montaña se encuentra la Liga de las Sombras y su intrépido líder, Ra s al Ghul. Junto con su hija igualmente peligrosa, Talia, supervisa un ejército de asesinos entrenados con planes de dominación mundial. Pero un levantamiento dentro de la Liga amenaza con desplazar el equilibrio de las fuerzas y obliga a Talia y a su joven hijo, Damian, a huir a la ciudad de Gotham. Con los asesinos siguiendo su rastro, Talia busca la protección en Batman, quien sin saberlo, es el padre del niño. A cargo de su hijo, Batman lucha contra el villano Deathstroke y la Liga de las Sombras, todo mientras enseña al testarudo de su hijo que uno no puede combatir el crimen convirtiéndose en criminal. Con la ayuda de los mejores de Gotham, incluyendo al Comisario Gordon y Nightwing, Batman descubrirá que su hijo y el aliado en quien más puede confiar son la misma persona.

Crítica Bastarda:

Del tan icónico como trillado (e inexacto) «Luke, yo soy tu padre» hemos pasado a «Batman, yo soy tu hijo» para adaptar el cómic de Andy Kubert y Grant Morrison. El caballero oscuro tiene descendencia y con ese nombre a lo anticristo (Damian) uno espera lo peor. No es que nos encontremos ante una reformulación de la muy superior “Batman: Capucha Roja” pero sí ante un choque de dos titanes y un maestro que recibirá a un pupilo un tanto peculiar. Damian Wayne es el nieto de maestro Ra's al Ghul y veremos cómo el templo de la Liga de los Asesinos es atacado por Slade Wilson y sus hombres para acabar presentando a Deathstroke como villano de la función. Ra's al Ghul perecerá a manos de su antiguo heredero sin poder llegar a tiempo al Pozo de Lázaro revelando también el entrenamiento de Damian cegando de un ojo al asesino de su abuelo. Talia decide dejar a su hijo con la única persona que puede protegerle: Batman. ¿Habemus película?

Damian está capacitado para ser también el heredero de Bruce Wayne pero necesita otro tipo de entrenamiento y adaptarse a la moralidad del héroe de Gotham City. “El hijo de Batman” se centra en todo ese material enlazando el misterio de la trama troncal con el propiciado por Deathstroke, pero el conjunto pudiera simplificarse en esa pelea entre Nightwing y Damian relegada a formar parte de los créditos finales sin que nos importe demasiado todo aquello que nos revela. Damos por hecho las cosas, incluida la integración de esta película en un ambiente muy hostil. La cuestión es que el hijo de Batman se refleje sobre el uniforme de Robin y que éste vaya tomando conciencia de su condición. No es que largometraje de animación eluda los lugares comunes y destierre el acto final hacia lo previsible para dar sentido al destino de los personajes y clarifique la relación de padre e hijo. Tampoco tiene tiempo de dramatismo y dilemas morales Ethan Spaulding más allá de los pequeños espacios que le permite el avance de la acción. 

Digamos que “El hijo de Batman” se deja ver y establece esa línea dramática del doble ‘legado’ de Damian, eligiendo por el destino ser Robin a liderar La Liga de los Asesinos. Batman es más listo aunque poco tolerante con que los menores de edad conduzcan coches reiterando la broma. Razón no le falta… y tampoco a aquellos haters que criticaron esos niños capaces de nadar decenas de kilómetros o esas espadas capaces de desviar las balas de rifles asaltos. Del suero para convertir a personas en murciélagos gigantes mutantes asesinos mejor no hablamos… Es ciencia ficción y una película para fans que agradecerán los cameos de Joker, Killer Croc y esos Man-Bats. El resto bastante plano, desigual y bastante descarriada si la comparamos con las mejores aportaciones animadas del universo de DC Comics. “El hijo de Batman” tiene, desde luego, muchos padres pero nuca estuvo a la altura de ninguno de ellos. 

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