“El hombre de
acero”
EEUU
Director: Zack
Snyder
2013
Título
original: “Man of Steel”
Sinopsis (Página
Oficial):
Un niño descubre que posee poderes
extraordinarios y que no pertenece a este planeta. En su juventud, viaja para
descubrir sus orígenes y las razones por las cuales ha sido enviado a la
Tierra. Pero el héroe que lleva dentro tiene que emerger para que pueda salvar
al mundo de la aniquilación y convertirse en el símbolo de esperanza para la
humanidad.
A la espera
de ver cómo funciona el invento de Paramount y sus ‘Mega Tickets’ para no perder ni un solo dólar invertido en “Guerra Mundial Z”, “El hombre de acero” desea postularse
como el estreno mainstream del verano
con sus 125 millones recaudados en EEUU en su primera semana. Precriticar es de
sabios y analizar (con spoilers) el impacto de la cinta dirigida por Zack Snyder nos puede acercar a aquello
que veremos (evitando sorpresas) en nuestras carteleras el próximo 21 de junio.
¿Estamos preparados para levantar el puño y surcar los cielos armados con
nuestras gafas en 3D?
1.- ¿Se nota o no se nota el
sello ‘Nolan’? El apadrinamiento
de Christopher Nolan —sacralizado
por Warner después de trilogía de Batman—
y el libreto de David S. Goyer, en
teoría, deberían traernos la película más oscura (y épica) de Superman hasta la
fecha. Conseguirlo podría ser tan sencillo como simple: cinematográficamente
hablando, el personaje de DC Comics nunca ha tenido una entidad y construcción ‘oscura’.
La idea de potenciar los errores del pasado de Clark Kent y un héroe en busca de
sus orígenes, para canalizar un propósito desde una precuela, desea contrastar
con el fallido reboot de Bryan Singer
en 2006 bajo la consolidación de un regreso (y secuela). Obviamente para ello
los cambios sobre el material original y previo puede ser bastante criticados:
¿Por qué trazar oscuridad en superhéroe que no es oscuro? ¿Por qué dar una
patada a universos como “Smallville”?
¿Odian Snyder y Nolan a Tom Welling?
¿Por qué voltear la historia haciendo que Lois Lane ‘descubra’ a Superman dejando
su faceta periodística para próximas historias en Metropolis? Está claro que “El hombre de acero” es un punto de
partida y el nuevo intento de sacar tajada del personaje en su 75 cumpleaños. Por
más que se note o se deje de notar, tanto épica como en grandilocuencia (amén
de la banda sonora de Hans Zimmer),
la mano de Nolan lo importante es
que Henry Cavill pueda hacer olvidar
la imposición y huella mental de Christopher
Reeve y la capacidad de la película por establecer una franquicia duradera
con guiños a otras series y personajes de DC para pensar en La Liga de la
Justicia. El mainstream debe ser mainstream, cueste lo que cueste.
2.- ¿Por qué no ha convencido a la crítica?
Más que no convencer, se puede afirmar que ha dividido a la crítica
estadounidense. Por ejemplo, la nota media en metracritic es de 55 pero
ha sido originada por 47 críticas (20 positivas, 24 mixtas y 3 negativas)
mientras que en rottentomatoes su 56% ha sido obtenido del contraste de 121 reseñas
positivas frente a 95 negativas. Algunos critican la falta de humor y la
desaparición del personaje que conocieron, otros que todo es demasiado
exagerado y grandilocuente y, por generalizar, se ataca a su rimbombante
exhibición de set-pieces épicas sin posibilidad de dar hondura a los
personajes. Tal y como señala Rene Rodriguez del Miami Herald, ¿se
ha cambiado al Terrence Malick visto
de los primeros teasers finalmente por el efectismo de Michael Bay? Con los universos previos de Los Vengadores, “El caballero oscuro”, Iron Man y “Spider-Man”, “El hombre de acero” no
aporta absolutamente nada nuevo y el espectáculo hueco está servido junto al agotamiento
del subgénero.
3.- ¿Por qué se está postulando como el taquillazo del verano? El boxoffice necesita héroes y prueba de ello podrían ser las tres
películas que mejor han funcionado en su primer fin de semana en 2013: 174 millones de dólares para “Iron Man 3”, 113 para “Man of Steel” y, para cerrar el podio,
97 generados por “Fast & Furious 6”.
Si se suman a esos 113 millones los 12 conseguidos en el jueves, el reboot de Superman ha comenzado bien su vuelo con 71
millones más recogidos a lo largo y ancho del mundo —si bien no se ha estrenado
en gran parte de Europa—. Las sensaciones del público, además, contrastan con
las de la crítica: un 8,3 en Imdb la convierte en la película más
querida del Hombre de Acero hasta la
fecha y los usuarios de dicha página destacan como méritos las imperfecciones
señaladas por la prensa especializada. De hecho, muchos apuntan que hasta los
seguidores de Marvel aplaudirán la propuesta gestada por Zack Snyder. ¿Nos podría recordar a la división entre público y
crítica también vista en “Watchmen”,
dirigida por el mismo director? Está claro que “El hombre de acero” se postula claramente como el gran taquillazo
del verano a la espera del rendimiento de “Guerra
mundial Z”, “Monstruos University”, “El llanero solitario”, “Pacific Rim”, “Elysium”,
“Kick-Ass 2” o “Lobezno inmortal”.
4.-
¿¡Y qué hay de la película!? Podríamos
hablar, para empezar, del diálogo que establece con la fallida “Superman Returns”. La cinta de Bryan
Singer fue ampliamente criticada, aparte de su aburrimiento, por ser una
versión protagonizada por el boyscout de los calzoncillos por fuera de La
Pasión de Cristo (y Kryton). Aquí, el vuelo que inicia Zack Snyder deja claras sus intenciones: los calzones van por
dentro y el traje se acerca al negro, que conjunta más con el rojo de la capa…
La historia, eso sí, de ese Salvador de la Humanidad de 33 años llamado Kal-El
queda enterrada en el subtexto entre kilotones de efectos especiales y
set-pieces. «No es una ‘S’, en mi mundo significa ‘Esperanza’», creo que es la
frase que resume la proposición que trata de desmitificar cualquier símbolo que
bordee lo cursi. El director de “Sucker
Punch” ha decidido no sorprender mediante sus imágenes ni argumento —el
arranque podría ser un mix de “Avatar”,
“Star Wars”, “Caballeros del zodiaco” con zooms a lo “Battlestar Galactica” y una sospechosa batucada resonante en los
ecos de Zimmer sobre los previos de Bear McCreary. Snyder, para no descarriarse ni arriesgar, se ha dedicado a dar el
pan que ansiaba la plebe: entretenimiento existencial en estado puro sin
respiro para recreación de los personajes y dejando el trabajo de evolución en
flashbacks sobre la ¿dramática? infancia de Clark Kent. De perroflauta, necesitado
de unas docenas de sesiones de psiquiatría, a Dios con capa y salvador del
Planeta para alcanzar la prosopopeya y épica de un encuentro entre “Superman” (1978) y “Superman II” (1980). Algunos esperaban
un nuevo “El caballero oscuro” pero
todavía estamos por una revisión de “Batman Begins” con más atino que riesgo. ¿¡Quién en su sano juicio espera lugar
para el riesgo en un mastodóntica producción de corte-y-confección de 225 millones
de dólares!? Otra cuestión es que el acero quede en simple (a)plomo. Para aquellos que no estén seguros de si el traje de Superman debe ser más
oscuro que celeste les recomiendo el documental “La increíble historia de Superman: ¡Mira al cielo!”. Lo que no consigo entender es por qué en tiempos en los que todo el mundo luce y enseña calzón, a Superman le han negado tal derecho. ¿Superman sin calzón por fuera sigue siendo Superman? ¡Imperdonable! Confirmado, ‘S’ NO significa ESPERANZA sino SIN CALZÓN.
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ResponderEliminarCOMENTARIO SIN SPAM: A mi no me parecio tan mala película, tal vez porque solo vi superman retun y de esa a la de Zack Snyder, pues mil veces el hombre de acero.
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