“El vuelo (Flight)”
(2012)
EEUU
Director: Robert Zemeckis
Título
original: “The Flight”
Sinopsis (Página Oficial):
En “El
vuelo (Flight)”, Whip Whitaker (Denzel Washington) es un
experimentado piloto que consigue realizar un milagroso aterrizaje forzoso
salvando a casi todos los pasajeros.
Después del accidente, Whip se convierte
en un héroe, pero según se va desarrollando la investigación, van surgiendo
muchas preguntas sobre qué pasó exactamente durante el vuelo.
“El vuelo
(Flight)” habla mucho mejor de la
fe —dentro de los márgenes del cine comercial donde queda encuadrada— que el new
age digital que propone Ang
Lee en “La vida de Pi”. Si Dios
maniobra de maneras diferentes y se revela de modos y formas misteriosas en
ambas cintas, en el filme de
Robert Zemeckis demuestra
marcar mejor las cartas de la baraja sin necesidad de revelar una evidente manipulación.
Algunos dirán que la culpa la tienen los Rolling Stones y el vicio, aunque la
película está fragmentada sobre dos vuelos imposibles que tiene que sobrellevar
el personaje principal.
La fe sobrevuela el destino del protagonista y Zemeckis no se molesta en dejar a la vista evidentes
tormentas —meteorológicas y morales— y
deus ex machina con capacidad de quebrar la vida del (anti)héroe. “El vuelo (Flight)” puede ser vista como una original cinta sobre el alcoholismo para
lucimiento de un inconmensurable Denzel
Washington y una espectacular y notable introducción/variación a lo
piloto de “Lost”. También, como parte de la dualidad del destino y de
la fe, de Dios y los misteriosos caminos y obstáculos, a modo de pruebas, para
seguir la buena senda preestablecida alcanzando la redención. Precisamente “El vuelo (Flight)” puede ser ‘descartada’ o vaciada cual peligrosa y etílica botella en el fregadero
cinéfilo por ambas vertientes. Sabemos que tenemos una pretendida redención
sobre la mesa… pero también disponíamos de los Rolling Stones, de adicción, vivir en una mentira, de la corrupción dentro de las grandes corporaciones y esa
repetición ‘reanimadora’ del mismo plano como un elemento para conducir la
propuesta hacía un vuelo más oscuro.
Por ese motivo, el apéndice final y resolución, es simple moralina. Un descenso
previsible con una azafata sonriente por el maquillaje de la peor calaña y
calado. El filme, como su arranque, debería finalizar con un aterrizaje de
emergencia, fálico, panza arriba y rompiendo la tranquilidad de la celebración
religiosa. Y, por supuesto, con otra canción de los Rolling Stones.
Personalmente lo único que me motivó de esta cinta fue el inicio estremecedor del vuelo. El resto lo veo muy plano, con personajes poco profundizados (la familia de él no podría ser más cliché) y un uso de cámara poco atractivo. No acabo de entender la necesidad de presentarnos e introducir a una drogadicta si luego se desharán de ella sin pena ni gloria. Y lo que dices, ese final digno de las peores americanadas...
ResponderEliminarTodo muy propio del director a decir verdad. Aún así, tiene sus pros... algunos que has mencionado como la concepción del (anti)héroe, pero en líneas generales me ha parecido bastante floja.
Un saludo, Bastardo! ;)
Hola Joax!
EliminarMe acabas de recordar que tengo que hacer una versión etílica para Filmaffinity de la crítica.
Gracias por el comentario y saludos!