The Walking Dead (6x07) Heads Up: Revelaciones, confianza y otras inminentes catástrofes

A punto de llegar a aquel capítulo que marcará el desenlace de la primera parte de la sexta temporada de “The Walking Dead”, “Start to Finish” (6x08), es hora de hacer un balance de lo ofrecido hasta el momento por una entrega articulada sobre unos potentes elementos funcionales para dar el pistoletazo de salida y, sobre todo, demasiada transición pausada para dar el golpe de efecto en esta recta final. La muerte-no-muerte de Glenn, por ejemplo, ha conmocionado a la audiencia y a las redes sociales como pocas veces lo había realizado la serie de AMC. Se sabía el truco y la polémica no se va a ir tan fácilmente como han pretendido los guionistas explicar el asunto… “Heads Up”, séptimo episodio, aterriza para afianzar tanto el discurso de la temporada como para golpear con un cliffhanger final a Alexandria y dotar de sentido el mid-season finale. Con una gran horda atrapada en una presa cercana al refugio, los planes de Rick para alejar tal peligro supusieron un foco de acción sobre el que se han modulado todas las tramas en distintos frentes. El ataque de The Wolves puso la guinda a un pastel en el que sabemos que faltan ingredientes como la introducción de Los Salvadores y Negan (Jeffrey Dean Morgan) salvo algunos easter eggs que pudiera contener “Always Accountable” (6x06). En esta entrega, no obstante, han existido ciertos paralelismos con la estructura de la anterior temporada. “No Sanctuary” (5x01), “Strangers” (5x02) y “Four Walls and a Roof” (5x03) marcaron un sólido y poderoso comienzo que empezó a verse mermado en intensidad por su continuación. “Slabtown” (5x04) fue un espejo respecto a la organización actual del drama postapocalíptico de AMC, utilizando un flashback como en “Here's Not Here” (6x04) para narrar lo sucedido con un personaje principal. Y, de nuevo, la separación del grupo de personajes provocó capítulos dedicados a cada uno de sus respectivos avances, reagrupando a todos en su despedida e hiato hasta el año siguiente. “Heads Up”, por lo tanto, llega para unificar todos los puntos y focos esenciales que ha vivido Alexandria tras su primera gran crisis desde su existencia. ¿Conseguirán los ‘alexandrinos’ despertarse y renacer para hacer frente a cualquier amenaza externa que ponga de nuevo en peligro a su comunidad? ¿Acabarán convertidos en monstruos como los habitantes de Terminus? ¿O, por el contrario, la misericordia de personajes como Morgan o Gabriel dotará de equilibrio la moralidad de esa zona segura?

Tal y como dibujó una niña de tres años y colgó su obra de arte en internet, Glenn se escondió debajo del contenedor de basura mientras Nicholas era devorado como el primer plato de aperitivos en la cena de Navidad. No busquen explicaciones en un dibujo de una niña de tres años de edad… Se lo digo por su bien… cerebral. Y es que “Heads Up” va a revelar el destino de dos personajes que desaparecieron en los primeros episodios de esta temporada, confirmando que Steven Yeun sigue teniendo trabajo y que vuelve a confirmar que jugar con su vida siempre ha sido un elemento recurrente por parte de los guionistas de la serie… que, al parecer, buscan su inspiración en bocetos robados de la guardería más cercana. Glenn apuñaló a los caminantes que le asediaron, bloqueando éstos las posibles entradas de ese improvisado refugio y, repito, no busquen explicaciones. Fue cuestión de tiempo que los muertos vivientes se distrajeran y abandonasen, al completo, el callejón… Repito, no busquen explicaciones tampoco aquí. Pasaron los días y Glenn a duras penas consiguió salir al exterior para buscar agua. Y, allí, aparece Enid en una azotea cercana para que los escritores no pierdan el tiempo en lo que unificar a personajes se refiere. Enid, aparte de salvar la vida de Glenn, expone al asiático que Alexandria fue atacada sin dar más explicaciones… porque, repetimos, no busquen explicaciones aquí salvo que vayan de injuriosos críticos de arte (?) infantil. Del «¿está Glenn bien?» hemos pasado al «¿está Maggie bien?» pero Enid está en modo «NO SPOILERS» y deja tirado al superviviente y veterano protagonista. Poco vamos a saber de Abraham, Daryl y Sasha y la llamada de socorro que cerró “Always Accountable” (6x06), interesando mucho más el camino que generó esa nueva amenaza sobre la comunidad que a duras penas trata de levantar de nuevo cabeza. En Alexandria hay muchos asuntos pendientes como revelar que esa sangre que vimos sobre el muro del refugio será detectada por Rick para indicar que se tratan de un simple goteo del otro lado… ¿Significa todo esto que ese muro que delimita el perímetro del pueblo está a punto de ceder o fue otro truco barato de los guionistas para llamar la atención? En resumen y definitiva: NO BUSQUEN EXPLICACIONES… O LAS EXPLICACIONES LES BUSCARÁN A USTEDES HASTA REVENTAR SU CABEZA. 

La vida sigue… y Judith en cierto modo remarca tanto el paso del tiempo como el propio pasado de la serie. Que nos digan que se parece a Lori no deja de recalcar la ausencia de respuestas sobre su paternidad. ¿Hubo alguna vez alguna pregunta que siguiera existiendo después de la muerte de Lori? ¿Fue la obra de Shane o simplemente ya no nos importa en absoluto? A Rick le preocupa poco o nada que el Padre Gabriel quiere convocar un círculo de oración sino trazar un plan para alejar a la horda y facilitar el regreso y acceso de otros supervivientes del grupo. La cuestión es saber con quién puede contar, dejando claro que “Heads Up” es un episodio para que la confianza en el grupo crezca a todos los niveles… pero también surjan otras líneas de suspense y amenazas internas. La principal y más preocupante es aquella que engendra Ron, que recibe sus primeras lecciones para manejar un arma de fuego pero quiere buscar munición para el arma descargada que le facilita Rick. No sólo la conseguirá sino que el joven ratifica que es el nuevo Nicholas de “The Walking Dead” y que su objetivo es… ¡Carl! Aquel que sí va a tener que aclarar las cosas, por ejemplo, es Morgan Jones, expuesto por la chivata y nuestra querida e indispensable ‘terminator’ de Carol al no querer matar a esos cinco ‘wolves’ que dejó escapar en la masacre. ¿De verdad que la gente cambia? Rick probó en sus propias carnes el acto de redención personal de Morgan y trata de encajar junto a Michonne el discurso de «toda vida es valiosa». Las cosas claras, y el Aikido espeso. «Las cosas no son tan simples como cuatro palabras. Creo que nunca fue así». «¿De verdad crees que puedes hacerlo (sobrevivir ahora) sin ensuciarte de sangre las manos?». Las frases lapidarias de Michonne y Rick son contrarrestadas por la propia evolución y crecimiento personal de Morgan. Rick no mató a ese perdido salvador que fue el motor de la propia serie y, con el tiempo, éste también narra la cronología de los hechos respecto a Daryl y Aaron. Se le olvida decir que si hubiera acabado con esos ‘wolves’ en su momento habría evitado todo… Y es que aquí aparece un debate sobre las implicaciones morales de dejar suelta a una peligrosa amenaza que puede acabar con seres cercanos y queridos. Morgan sabe de antemano que ese ‘lobo’ que retiene en una celda no puede ser liberado, revelando cierta hipocresía en su propio código. También sabe que si lo deja morir será responsable e iniciará sus contactos con Denise para buscar antibióticos. Carol tiene puesto un par de ojos en el nuevo habitante de Alexandria y dejará a Judith en la casa de Jessie para que también surja esa dicotomía —por parte de ese pequeño Sam que se niega a acceder a la planta baja de su casa— con la que tienen que lidiar los supervivientes del apocalipsis zombie: si matas a gente te acabas convirtiendo en un monstruo. Para Carol la única forma de evitar convertirse en un monstruo es matando… En definitiva, sobrevivir a toda cosa y bajo cualquier precio. Carol accederá a la casa donde Morgan retiene al ‘lobo’ pero será detenida por éste. Carol es consciente de que tiene a alguien en su interior… pero algo va a provocar que tengan que dejar de nuevo apartadas sus diferencias…

“Heads Up” es un capítulo en el que Rick pretende seguir sin contar con los ‘alexandrinos’, siendo Michonne aquella figura que se erige como un baluarte moral. Al fin y al cabo, todos están juntos en ello y Deanna tiene planes de futuro para la comunidad, expandiendo la misma en el momento en el que la tormenta que habita en el exterior de esos muros consiga ser calmada. Rosita ya se ha puesto, por ejemplo, manos a la obra dando lecciones de manejo de machete a un grupo de ‘alexandrinos’ en el que Eugene revela uno de los temores de los supervivientes más débiles: el terror a morir. En realidad, el discurso de la serie como bien expone Rosita, es la aprensión a sobrevivir, dejar a amigos perecer por estar asustado para salvarlos. No son tiempos para dudar y precisamente una acción un tanto suicida de Spencer, para llegar de nuevo a la torre de vigilancia a través de una cuerda amarrada a un gancho, activa todas las alarmas. La cuerda se suelta y Spencer queda expuesto a parte de la horda, siendo salvado tanto por Rick como Morgan y Tobin, remarcando de este modo ese material de colaboración de todos los habitantes del lugar. Tara también pone su vida en peligro para disparar a todos los caminantes que querían devorar al hijo de Deanna Monroe, siendo reprendida por Rick. Spencer, en realidad, quería hacer aquello que planeaba Rick por su cuenta al saber que nunca éste aprobaría cualquier acción por parte de los ‘alexandrinos’, descritos como seres débiles y carnaza habitualmente por el antiguo policía de pueblo. Rick se dará cuenta que tendrá que contar con los habitantes de Alexandria para reforzar la valla y, a través de Tobin, comprobará de nuevo que toda iba despacio en ese refugio hasta que ellos irrumpieron y también el propio eje de acción de la serie. Tobin no desea que Rick pierda la fe en ellos porque, ciertamente, deben evolucionar como aquellos que estaban fuera del muro lo hicieron. Rick todavía sigue anteponiendo sus propios intereses, revelando a Deanna que el único motivo por el que salvó a Spencer fue porque era su hijo. Rick sigue todavía, en definitiva, tratando de hallar un equilibrio entre la confianza a la humanidad y el precio de sobrevivir en un contexto como un apocalipsis. Eso sí, si ponen a proteger su arsenal a la misma ‘tipa’ (Olivia) que no supo velar por la comida… van apañados. 

Volvemos a “Thank You” (6x03), a la carta de Betsy y a David, ya convertido y con Glenn acabando con el caminante. Todos esos ecos sobre el pasado de esta temporada sirven también para incentivar la dicotomía de ese capítulo en el que la no-muerte de Glenn conmocionó a la audiencia: abandonar a los alexandrinos o no. Glenn regresará a salvar a Enid, que también recuerda su «JSS» (Just Survive Somehow) en el restaurante donde se refugia. Enid no desea regresar a Alexandria y ambos van a tener problemas de confianza, incluso utilizando la joven una pistola para aislarse de nuevo del mundo… y devorar a todas las tortugas en el proceso. «¿Me apuntas con un arma y el capullo soy yo?». De mala gana, Enid tendrá que acompañar a Glenn en su regreso al refugio que es el actual hogar de ambos y “Heads Up” desea explorar a un personaje que no suele exteriorizar sus sentimientos y temores. Y es que Enid todavía no enfoca correctamente el sentido de sus tragedias y los motivos por los que seguir adelante, tratando de huir o actuar de manera precipitada desde su habitual pesimismo y catastrófica visión de la vida a su alrededor. No son líneas novedosas en el show, siendo Glenn una especie de ángel de la guarda para los supervivientes que ha ido salvando en su camino. Unos globos verdes que quedaron abandonados en la misión de Rick para librarse de la horda, con su correspondiente tanque de helio, servirán a ambos para mandar la señal pertinente a esa Alexandria asediada por cientos de caminantes. Aunque la esperanza se apodera de Maggie y el resto de habitantes, la dura realidad estalla gracias a la torre de vigilancia. Ya en el episodio nos revelaron constantes planos del deterioro del edificio y su caída para derribar parte del muro que protege el refugio. Rick no supo ver el peligro que tenía delante, haciendo hincapié en las vallas, la sangre que allí se filtraba y no en aquel peligro que acechaba enfrente. ¿Si Spencer hubiera llegado allí se habrían adelantado los acontecimientos? ¿Cómo reaccionarán el resto de supervivientes? ¿Llegarán Abraham, Daryl y Sasha a tiempo? Aunque la verdadera pregunta es otra: ¿resolverán todo los guionistas inspirándose en un dibujo de una niña de tres años? 

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