The Strain (2x13) Night Train: Confirmado, Zach es lo peor (de lo peor)

Podríamos definir esta segunda temporada de “The Strain” como Zachpocalipsis debido al nacimiento del que es —por descontado— el peor personaje que ha parido y surgido de la ficción televisiva en la presente década. Nada (confirmo, NADA) salva al niño más tróspido que actualmente podemos sufrir en nuestras pantallas. ¡NADA! Zach, ha quedado confirmado, es lo peor… de lo peor… Pero lo peor de lo peor de lo peor y de lo peor. ¡LO PEOR! “Night Train”, decimotercer episodio y season 2 finale del show de FX, pone el punto final a nuestro sufrimiento en 2015 por soportar a semejante elemento y asesino-criminal. Si ya no pudimos recuperarnos después de la erradicación de nuestra amada rata muerta sobre la cabeza y calvorota de Corey Stoll, lo de Zach nos ha rematado. Del todo… No obstante, el capítulo quiere sentar las bases tanto de la guerra por hacerse con el poder del Occido Lumen y dejar claro que el plan de El Maestro pasa por convertir en la raza humana en su dispensador de sangre con mataderos a modo de nueva franquicia a lo largo y ancho de EEUU. ¿Strigoi Fried Human a la vista? Poco nos importa el futuro —y ese plan de cinco temporadas que tienen en mente tanto Guillermo del Toro como Carlton Cuse— sino ceñirnos al presente de una serie irregular pero infaliblemente cómica. Repasemos “Night Train”. 

El season finale despliega dos tramas diferenciadas. La primera consiste en que Eph y Nora saquen de la ciudad al personaje más odiado de todo el planeta televisivo. En este punto, pudiéramos sentir la falta de empatía de Abraham Setrakian por despedir a ese niño tróspido… pero, rápidamente, la hacemos parte de nuestro odio por Zach. ¡Abe es de los nuestros! Eph trata de inmortalizar positivamente el momento con una fotografía pero la sonrisa del viejo chocho es tan esquiva como la nuestra respecto a ese infecto personaje, cuya idiotez en “Night Train” va a causar la muerte de un personaje principal. ¡TODOS TE ODIAMOS ZACH! ¡ERES LO PEOR DE LO PEOR DE LO PEOR! ¡LO PEOR! Otra posibilidad, como contrapunto ante la lluvia de haters que se va a ganar el hijo de Eph, es que la maldición del Occido Lumen va a dejar sus primeras víctimas aquí y esa fotografía sintetinza aquello que sufren los poseedores del libro capaz de desentrañar el secreto para acabar con El Maestro. 

Ese viaje en tren es precisamente el último que saldrá de Nueva York y que da título al capítulo. La Guardia Nacional está ‘recogiendo’ todos los trenes que salen de la ciudad y da la impresión de EEUU va a dejar a su suerte el destino de los habitantes que ya luchan del lado de Justine Feraldo para acabar con la plaga vampírica. Precisamente en ese tren también se encuentra Rudyard Fonescu. O lo que es lo mismo, un gran conjuro de gafe y mala suerte para invocar al mismísimo Cthulhu. Recopilemos, tenemos el mal fario del nuevo propietario del Occido Lumen y el abrazo y beso de la muerte (Abe), al antiguo poseedor completamente hipnotizado contando billetes (y que nadie entiende cómo consiguió mantener en su poder tanto tiempo el libro) y, por supuesto, al monguer de Zach y su madre vampira posesa que acecha en las sombras. Zachpocalipsis en 3, 2, 1… No obstante, la pregunta es simple: ¿¡cómo memoles pueden quedar niños ratas trospid-of-the-night si matan una media de 465 en cada episodio!? ¿¡Es imposible que quepan tantos en un autobús!? ¡ES IMPOSIBLE! Pese a todo, ese el menor de los múltiples agujeros argumentales de una trama más complicada de explicar que “Inland Empire”.

Vayamos a la parte positiva. Mr. Quinlan, tras mostrarnos su velocidad y fuerza, da un discurso a lo “Braveheart” utilizando símiles entre la horchata y el ‘bloody mary’. Tampoco hay mucho nivel neuronal entre los ex convictos así que el primero que apareciera por allí y dijera dos frases épicas —y ofreciera disparar a todo bicho viviente (o que hubiera estado vivo hace poco)— se gana su confianza en diez segundos. ¡Más dummies, que es la guerra! La subasta organizada por el fanmade de “The Wire” se salda con el triunfo de los nazis… Tienen más oro (que cagó el moro) que Los Antiguos… Se ve que a Eldritch Palmer le pagaron muy bien por las performances de “Cadena Perpetua” y sus bukkakes como estrella-traga-leche para marcar la diferencia con unos vampiros milenarios de mierda que llevan cientos y cientos de años recopilando oro (del que no cagó el moro). El problema para Thomas Eichorst es que el Sr. Palmer, por interacción de Coco, quiere trollear a todo el personal y finalmente el viejo chocho y su pupilo caza-ratas —y adicto a rollos de horno de las bollerías de Nueva York— se hacen con el Occido Lumen. Obviamente les atacan en la primera esquina… y son asaltados por decenas de Strigoi hasta que aparecen Quinlan y los suyos para equilibrar el asunto y repartir ‘bakalo’ del güeno:

Ya todo se hace pa lo mismo 

¡esa sí es una verdá! 

idiotizar a las gentes del lugar 

¡borreguismo sin igual! 

y para ganar mucho dinero 

¡calentito sin currar! 

sin esfuerzo y sin mirar. 

¡BAKALAO! 

musica de ensueño 

¡BAKALAO! 

¡BAKALAO! 

mundo de diseño 

¡BAKALAO! 

¡puagh!

Después de la presentación y danzas étnicas de cortejo entre balas de plata y Strigoi, llega esa contradicción habitual en “The Strain”, ese quiero y no puedo. La pelea entre Quinlan y Eichorst se resume en lo de siempre. El Maestro dice que no teme a nada ni a nadie… pero el nazi corre a los cinco segundos más rápido que Usain Bolt perseguido por un leopardo. Angel Guzman Hurtado también se pone su traje para homenajear a El Santo pero el bakalao ya estaba repartido… y el pescado, evidentemente, vendido. Fet preparó un plan explosivo de fuga y sabemos que no van a sacrificar a Gus por lo que, al cierre, todos acaban juntos para resolver los misterios del Occido Lumen después de amenazarse de muerto diez segundos antes. ¿¡Es ESTO un plató de Telecinco o qué!? Pos’ muy bien… Ah, y el viejo suelta el rollo final en su voz en off… que la verdad poco o nada importa… salvo que uno sea fan de la sobre-explicación, claro.

¡Que te calles, hostia, niñato-de-mielda-y-asesino!

Vayamos al DRAMA o al relato de la  Zachpocalipsis. El Maestro tiene un plan para que el tren donde viajan los protas (y el monguer-gafe de Zach) no salga de Nueva York. Pasa por hacer descarrilar el convoy con cientos de Strigoi haciendo un homenaje a los Lemmings. La idea argumental es que Nora y Zach tengan que salir de allí zumbando los primeros y Eph llegue tarde… como siempre. Y es que la rata muerta sobre la calva de Corey Stoll le confería grandes poderes que poco o nada tenían que envidiar a los de The Flash. Sin el roedor sobre su cabeza es más lento que el cerebro de Rafa Mora resolviendo una ecuación de segundo grado. Confirmado. Eph también es retrasado por un par de niños-rata-trospid-of-the-night pero necesitó (medido con un cronómetro) quince segundos… así que no es excusa. No lo es. Kelly emerge como la autora material del atentado y Nora la patea el culo dejándola a merced de su machete de plata. ¿Y qué ocurre? Pues lo que debía ocurrir si haces casos a niño-estúpido-monguer que merece todo el odio y condena de la humanidad. Nora se detiene por Zach pero su madre Kelly no lo hace para meterle los gusanos por el orto a su ya ex chacha mexicana y cornuda del show. Zach sabe que esa ‘cosa’ que tiene delante no es su mamá pero como es un niño-estúpido-monguer que quiere ganarse haters a espuertas… pues nos vamos con mi ex madre vampiresa y que se joda la otra pedorra moribunda. Lo extraño es que Eph se encuentra a su amante descompuesta y únicamente le importa qué ocurrió con su hijo. ¡PERO SI NADIE EN EL MUNDO LO QUIERE MENOS TÚ! ¡QUE SE LO QUEDE SU EX MADRE! ¡QUE SE LO QUEDE QUE NO QUEREMOS QUE VUELVA NUNCA MÁS! ¡POR ASESINO! Nora, al ver el panorama, se sacrifica rápidamente para salir de la serie utilizando ese tercer raíl que te electrifica el coño (y todos los gusanos que estén por allí pululando). Fue una salida digna de esa serie de mala muerte. Todos hubiéremos hecho lo mismo sin dudar. 

¡A TOMAR POR CULO!

¡ME LARGO DE ESTA SERIE DE 'MIELDA'!

NOOOOOOOOOOOOOOOOO (Que hoy es la hora feliz en el bar de enfrente)

¿Y el resto? 

¿Nos importa qué pasó con Dutch? 

¿Dónde se llevó Kelly a Zach? ¿Nos importa?

¿Nos importan si torturan a Zach y El Maestro lo hace todo tipo de putadas y se lo regala a uno curas salidos? 

¿Nos importa qué hizo con el ‘corasón’ de Coco el viejo traga-leche de Eldritch Palmer tras confirmar el Maestro que los términos de su acuerdo no han cambiado y trollearle malamente?

¿Quién mató al alcalde? ¿Nos importa? 

¿Y, sobre todo, nos importa qué pasará en la próxima temporada? 

Al final —tras esos lapsus del show donde mete unos nuevos créditos y los cambio de nuevo por los de siempre— la cara de Eph resume aquello que nos ha parecido a muchos la segunda temporada de “The Strain”. Eso sí, a comedia tróspida no la gana nadie… salvo la inalcanzable “Gotham” de FOX. 

A continuación, las reviews de esta comedia tróspida que ha sido la segunda temporada de “The Strain”:

♥ (2x12) Fallen Light: ¡Vuelve la rata muerta sobre la calva de Corey Stoll!
♥ (2x11) Dead End: Champú, piña y otros (desastrosos) olores
♥ (2x10) The Assassin: Nunca te fíes de un borracho

♥ (2x09) The Battle for Red Hook: Stop these bastards!
♥ (2x08) Intruders: Y Kelly Goodweather comenzó a participar en ‘Tu cara me suena’…
♥ (2x07) The Born: Bienvenido Mr. Quinlan… PERO #StopDramasPorFavor

♥ (2x06) Identity:The Master Rises… sin peluca (o rata muerta) que valga
♥ (2x05) Quick and Painless: Adiós rata muerta, adiós

♥ (2x04) The Silver Angel: Y, entonces, llegó El Santo que se hizo ‘Angel’
♥ (2x03) Fort Defiance:…pero Zach sigue enfurruñado y muy, muy y muy cabreado…
♥ (2x02) By Any Means: Nunca te fíes de alguien que lleva una rata muerta

♥ (2x01) BK, N.Y.: Comienza la segunda temporada de ‘The Strain’

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