El regreso de “Dexter” tras una fallida e
irregular temporada anterior avecinaba la decadencia final de la serie que
protagoniza Dexter Morgan. Nos esperábamos un desenlace frío y surgido desde la
notable audiencia que proporciona a Showtime. Pero
un giro final y un nuevo orden han llegado a la ficción para goce y disfrute de
sus seguidores. Es momento de repasar el sexto capítulo de la séptima temporada
titulado “Do the Wrong Thing”. Hacer
lo correcto puede ser lo más difícil cuando lo fácil es tomar el camino
equivocado. Mientras que muchos siguen comentando la incursión del primer
personaje gay en la ficción y otros sobre la nueva novia de Michael C. Hall…
los seriéfilos nos ceñimos al contenido y no a la forma. Aquí, las sensaciones
que proporciona “Do the Wrong Thing”.
Rellenar
huecos anímicos se convierte en la misión de todos los personajes principales
del capítulo. Tal vez Angel Batista sea el protagonista más desconectado al
resto en la presente campaña y para colmo piensa en el retiro para ser feliz… comprando
un restaurante. Su hermana se preocupa por su decisión ya que la compra del
Trans-Am en la pasada temporada casi le arruina y parece que no levanta cabeza
desde sus fallidos matrimonios. Yo soy de los que pertenece al grupo de
seguidores de “Dexter” que piensa que un personaje principal veterano va
a caer en la recta final de la presente temporada. Y Angel, por lo que está
diciendo y mostrando, puede tener muchas papeletas. Los pervertidos como Masuka
siempre sobreviven y LaGuerta es la que está sacando el pasado a relucir y convirtiéndose
en una antagonista en las sombras… haciendo que Debra deba tomar decisiones peligrosas
para ayudar a su hermano. Regresamos a la quinta temporada con las chicas del
barril. La teoría de que el Carnicero de la Bahía de Harbor actuase con una de
las victimas cobra forma… Jordan Chase, así como los responsables, están
desaparecidos y todo encaja. Debra se sorprende al descubrir la historia por su
propio hermano y conocer su vinculación y relación sexual con Lumen. Dexter
sigue sin estar preocupado por el asunto…
Los numerosos abogados de Isaak quieren alegar
defensa propia para el asesinato de los colombianos. El propio Isaak, una de
las cabezas y armas de la Hermandad Koshka de Ucrania, quiere salir de la
cárcel ya que teme que pueda asesinar a alguien dentro dejándole entre rejas un
largo periodo de tiempo. Presiona a George Novikov que, a su vez, presiona a
Quinn. Inicialmente y por intervención de Nadia devuelve el dinero pero la
segunda cita implica a la propia stripper como moneda de cambio. Quinn acepta
el dinero y se lleva la evidencia de la prueba de sangre que incrimina a Isaak…
Dexter
ha marcado como objetivo a Hannah y va a conocer nuevas y presuntas víctimas
del pasado de la fémina. Por ejemplo: su marido que murió a los 40 de un ataque
al corazón estando en perfecto estado de salud. Realmente sabe que Hannah
asesinó junto con Randall al matrimonio cuyos restos encontraron… pero decide
tapar su implicación en el informe y le entrega una copia como declaración de
amistosas intenciones. Dexter quiere llegar a su fallecido marido pero expone
la muerte de Rita. También descubre que la socia de su anterior negocio,
Beverly, murió un año atrás. Al investigar el testamento de Beverly se
sorprende al averiguar que Hannah era la heredera de todo… Para avanzar en la investigación
entra en escena Sal Price, que escribió un libro sobre Randall, y desea actualizar el mismo con los nuevos descubrimientos.
Dexter habla con él para que le firme el libro y detecta que el escritor está
muy interesado en su hermana. También tiene una teoría sobre Hannah y ‘envenenamientos’
colindantes. El acónito entra en escena
y Dexter investiga los archivos de Price… mientras que su hermana en una cita
con el escritor también averigua que su hermano está ‘cubriendo’ a Hannah.
El intercambio de plantas hace que Dexter tome
decisiones que no tenía planteadas inicialmente y una de las mismas es pedir
una cita a Hannah. Tenemos femme fatale y atracción irresistible entre ambos,
pese a que Dexter quiera liquidar a la compañera de crímenes de Randall… La
cita se desarrolla en un parque de atracciones cerrado al estar fuera de
temporada. En una tienda de campaña entra en juego la nieve artificial y la
magia de la nostalgia… Una escena que Hannah había esperado toda su vida y que
formaba parte de una de las promesas de su antiguo y criminal amante… La
distracción pasa factura y Dexter introduce la aguja de su jeringuilla en el cuello
frágil de su víctima. En la mesa yace la bella durmiente que despierta y ve a
Dexter en plena escenificación de su crimen. Sabemos que la rubia va a dar juego
y la frase que suelta a su supuesto asesino y verdugo cuando le quita la
mordaza es contundente: «Haz lo que tengas que hacer». Y Dexter Morgan así lo
hace: alza su cuchillo para cortar los laterales plásticos y liberar y poseer a
su nueva princesa despojados de sus ropas… En definitiva y para confirmar lo ofrecido
en pasados capítulos: “Dexter” se
pone cebollona… y sin Viagra que valga.
Ha estado bastante bien este capítulo y yo estaba pensando exactamente lo mismo respecto a Batista: Tiene toda la pinta de morir.
ResponderEliminarHola Andrés!
EliminarPues se jubila... y muere su ex...
Saludos bastardos y gracias por el comentario!