Juego de Tronos (5x10) Mother's Mercy: Misericordia

Con la emisión del season 5 finale es el momento de analizar qué impresión final ha dejado la temporada más controvertida y polémica de “Juego de Tronos” hasta la fecha. La llegada de “Mother's Mercy”, décimo episodio de la quinta entrega de GOT, deja un sabor de boca agridulce, empañado en lagrimas y ansiedad. Pero sobre todo aquí habita un mastodóntico ejercicio de suspense, como si David Benioff y D.B. Weiss quisieran dejar a la intemperie —y en un abismo y vacío emocional— tanto al lector de ‘Canción de Hielo y Fuego’ como al seguidor de la serie de HBO. La adaptación de ‘Festín de cuervos’ y ‘Danza de dragones’ inicialmente pudiera funcionar como una temporada bisagra para posicionar el tablero de Poniente y Essos ante futuros e inminentes acontecimientos que darán sentido al desenlace del show amparado en las novelas de George R. R. Martin. La cuestión es que finalmente nos hallamos ante un monumental anticlímax articulado sobre el suspense y el juego y cortejo del tránsito entre la vida y la muerte. Esa gran crueldad no solamente abarca a los personajes principales sino al propio espectador. Nunca “Game of Thrones” había trabajado tanto en su despedida anual en dejar a la audiencia ante un precipicio de incertidumbre. “Mother's Mercy” es precisamente esa ‘Misericordia’ que muchos pedirán hasta 2016. 

Podemos cuestionar las decisiones y cambios de David Benioff y D.B. Weiss respecto al material original pero, a la vista de los hechos, han sido impecables para encajar las tramas de cara al futuro de “Juego de Tronos”. La muerte y sacrificio de Shireen no tenía otro lugar de ser dentro de esa articulación y evolución de Stannis Baratheon hacia el destino de una gran batalla decisiva en el futuro de Poniente. ¿Se asegurará de su victoria el Señor de la Luz (R'hllor)… o es el comienzo del fin? La realidad es que el campamento se ha descongelado y el hielo se derrite para que los preparativos sigan su curso. Melisandre sonríe hasta que comienza a percibir que sus decisiones han provocado otra cadena de eventos con los que no contaba. ¿Confió todo en una idea y visión que estaba equivocada? Ya lo dijo Tyrion Lannister a Daenerys Targaryen en “Hardhome” (5x08): «Un gobernante que mata a aquellos que le son devotos no es un gobernante que inspire devoción». Stannis mató a su propia hija siendo un pecado mortal en su completo sentido, esencia y significado. La mitad de sus ‘devotos’ (la mayoría mercenarios) abandonaron ante la ausencia de devoción. Otra noticia destruye las aspiraciones que tenía en mente Melisandre: Selyse Baratheon se ha ahorcado. La sacerdotisa roja decide huir y a Stannis solamente le queda completar su destino y redimirse en el campo de batalla. ¿Es el final o la burla de la fortuna y el porvenir? Seguramente Stannis recuerde las palabras de su hija narrando ‘La Danza de Dragones’ y los paralelismos entre la disputa de Targaryen y de Stannis y Renly. Él y sólo él fue aquel que acabó con su linaje y Casa, aquel que los condenó a todos y, sobre todo, a sí mismo.

¿Y qué ocurrió en Invernalia con Sansa Stark y esa vela que finalmente decidió encender ella misma? El problema es que Brienne de Tarth pierde el campo de visión en el último suspiro al enterarse, por vía de Podrick, que el ejército de Stannis ha hecho acto de presencia. Los personajes siempre han sido bastante egoístas en el show y Brienne antepone su venganza personal al juramento que hizo a Catelyn Stark. El Baratheon que reclama el Trono de Hierro se prepara para un asedio pero los Bolton ya son dirigidos por el pérfido Ramsay y sabemos que su defensa pasa por el mejor y más despiadado ataque. Ese plano cenital y aéreo nos da un sentido de la estrategia bélica y de una batalla perdida antes de iniciarse. Stannis recurre a la épica pero ya nadie cree en él. Muchos lectores de ‘Canción de Hielo y Fuego’ piensan que HBO ha destrozado el personaje al que idolatraban y se equivocan de pleno. En cierta medida, los guionistas han desenmascarado a ese fratricida y ser codicioso —que no dudó en quemar a media Rocadragón— enloquecido con el poder de una visión de una sacerdotisa. Esa visión le ubicaba como la reencarnación de un Dios y no dudo en idear un genocidio con los salvajes si éstos no se unían a sus filas. Tras consentir el sacrificio de su hija y apartar a su Mano del Rey su destino estaba dibujado en ese maquillaje que retrataban tanto a él como a su esposa. Esa muerte en vida (y decadencia integral) hará que su ejército finalmente perezca… Si no hubiera asesinado a Shireen seguramente sus hombres no le habrían abandonado y tendría una oportunidad ante el despliegue de Ramsay Bolton, que no dudará en empalar y eviscerar a las tropas de la Casa Baratheon. Stannis sabe que es el fin pero se ciñe a la supervivencia ante sus heridas y su propio agotamiento. Es ahí donde aparece Brienne para traer el recuerdo de sus pasadas decisiones, para confirmar que la utilización de la magia de sangre ha acabado derramando la suya propia. No hay últimas palabras, simplemente el de la derrota y sabor del filo de la espada de Brienne, Guardajuramentos, para dejarnos incluso en el sonido de la incertidumbre y muerte. Stannis ha muerto aunque los guionistas hayan preferido centrarse en la venganza de Brienne, en esa previa confesión que ha dado sentido a gran parte de su viaje. 

Tras la huída fallida de Sansa, ésta se debe enfrentar a Theon y Myranda en las almenas del castillo de Invernalia. Una flecha apuntando a su corazón es la venganza de Myranda respecto a la mujer que le robó al hombre de su vida. La Stark va a conocer realmente en este punto y diálogos las intenciones de Ramsay sobre su cuerpo, apellido y futuro. Todo resulta tremendamente sádico, como si la amputación de alguno de sus miembros fuera el principio de un carrusel de los horrores. A lo largo de la temporada se ha desarrollado el personaje de Theon y sus intentos de escapar del yugo de su torturador. Sansa es una aliada y también otra presa a la que le debe gran parte de su redención personal. Myranda no es Ramsay así que Reek (Hediondo) dejará de ser tal para defenestrar a la sádica viciosa. No tienen demasiado tiempo para pensar ya que las tropas de los Bolton regresan y la única opción es saltar hacia el exterior desde las murallas. Todo queda en el aire… Ambos están juntos y esa maniobra argumental es lo que les interesa a los guionistas. La caída ya no es importante sino el acto de fuga conjunta como resolución a sus conflictos. La otra cuestión es saber ahora si el plan de Meñique seguirá su curso… 

La venganza de Arya Stark sobre Meryn Trant se sirve tan fría como un aguzado cuchillo de doble filo. Arya quiso someterse a la voluntad del Dios de Muchos Rostros pero ha gestionado su propia agenda personal, como si el destino le hubiera ofrecido una doble cara y prueba de fuego. La llegada de Meryn a Braavos no podía ser más complicada para la joven Stark. Pese a dejar apartada su ropa, su espada e incluso gran parte de ella misma, la realidad es que su lista de nombres lo es todo… No es nada sin su venganza. El miembro de la Guardia Real nos lo ha puesto fácil al pedir a pequeñas inocentes criaturas para satisfacer sus vicios en los burdeles de la ciudad. Vamos a ver que elige entre esas niñas golpeándolas pero una de las tres seleccionados permanece en silencio… Veremos que su rostro es el de Ghita, esa niña que murió en la Casa de Blanco y Negro en “Unbowed, Unbent, Unbroken” (5x06), pero finalmente esconde la cara de la represalia de Arya cuando las puñaladas se vierten sobre el cráneo de Meryn. La muerte va a ser violenta como ese ajusticiamiento en el que Arya dejará sin ojos y completamente mudo a aquel sobre el que juró venganza. Los guionistas pudieran haber aprovechado el momento para rendir cuentas a Syrio Forel y que ese maestro esgrimista de la danza del agua y Primera Espada de Braavos fuera en realidad Jaqen H'ghar. El camino es bien distinto. Jaqen H'ghar y Waif esperan a la ‘traidora’ para enfrentarse a ella y darle de su propio ‘veneno’ y medicina. Finalmente es el propio Jaqen que traga ese líquido mortal para disgusto de Arya que quedará completamente confundida al comprobar que su maestro resurge en la cara de Waif. Arya va desvelando esos rostros, uno a uno, sobre el cuerpo inerte de aquel que creía que era Jaqen para encontrarse consigo mismo muerta. Jaqen es un fantasma. Efectivamente no es nadie. ¿Qué está sucediendo? Arya comienza a perder su visión y ésta se vuelve borrosa hasta quedarse ciega. ¿De verdad? ¿No juegues con dioses como moraleja de la historia?

La trama de Dorne ha sido la más floja con diferencia de la quinta temporada de “Juego de Tronos” y me atrevería a decir que incluso de la propia serie hasta el momento. La despedida de las Serpientes de Arena y el príncipe Doran Martell nos lleva a un recuentro de un padre y una hija pero también al previsible beso fatal dado por Ellaria Sand. Sabíamos que ella tiene el antídoto pero el destino de Myrcella y Trystane no sabemos si queda más cerca de la redención soñada con su padre, de la repentina muerte de la futura novia o de esa guerra con Desembarco del Rey y los Lannisters que se avecina. 

La sala del trono de Meereen está completamente desamparada sin Daenerys Targaryen. ¿Dónde voló con su dragón la Khaleesi? Tyrion Lannister, Daario Naharis y Jorah Mormont ciertamente nos presentan el futuro de la ciudad que vive una guerra civil. Gusano Gris hace acto de presencia junto con Missandei y los planes de Tyrion, por embarcarse en una nueva trama de aventuras, son abortados por el largo discurso de Daario. No es hora de cuestionar la presencia de Jora sino la ausencia de Daenerys. Los caballeros irán al rescate de la doncella y reina mientras que Gusano Gris y Missandei serán los ‘reyes’ en funciones con Tyrion gobernando definitivamente su primera ciudad. Es cierto que Meereen tiene que ser tutelada por los Inmaculados aunque hayan demostrado su completa ineficacia como policía. Precisamente el destino de la Bahía de los Esclavos pasa por que los propios encadenados acaben conformando una especie de democracia más que unos ‘militares’ sean los mandamases y líderes de un régimen. El perfecto funcionamiento es que sean sus protectores, aunque toda esta decisión abre una decisión de futuro para Gusano Gris. Otra cosa es saber cómo va a tener descendencia, claro. A Tyrion le hace falta ayuda para vencer a los Hijos de la Arpía y allí emerge la figura de Varys, como jefe supremo del espionaje y las malas artes de la conspiración. ¿Podrán dar cierre a esa vírica rebelión? ¿Volverá Mhysa? La escapada de Daenerys ha posicionado a su personaje en punto sin retorno… Y es que el viaje de Drogon es, de momento, únicamente de ida. Todavía el dragón quiere descansar y curarse sus heridas antes de regresar a su hogar. ¿Quién puede culparlo? Dany, ante la nueva confirmación de que lidiar con personas es más sencillo que con dragones, decide ir a buscar comida cuando el suelo tiembla y avecina la llegada de un jinete Dothraki. Llega acompañado junto a una gran horda que la rodea formando una bellísima y aterradora espiral. La Targaryen ha sido una chica lista y dejó caer su anillo ante esa vorágine de hombres y caballos… Continuará. 

En Desembarco del Rey no vamos a tener absolutamente nada de Tommen Baratheon, de Meñique, de cualquiera de los Tyrell… Solamente nos importa Cersei Lannister y su redención, su vía para poder escapar de la prisión que ella misma se había construido. Con su alma completamente rota, Cersei ofrece al Gorrión Supremo la confesión que buscaba aunque únicamente admite su romance con Lancel, negando las acusaciones de incesto. Entendemos que ese juicio, que separará la verdad de la mentira, será uno de los motores de la sexta temporada de “Juego de Tronos”. La misericordia solicitada por Cersei da título a un episodio que va a alcanzar en la secuencia dirigida por David Nutter uno de esos clímax que no se suelen ver en la televisión actual. Y es que pocas veces se ha podido planificar una escena en la que la antiheroína expíe sus pecados en un aterrador paseo de la penitencia. No es solamente el desnudo (a golpe de doble y CGI) y soberbia interpretación de Lena Headey o ese corte previo de su larga cabellera. Estamos hablando del completo conjunto como parte de toda esa sórdida puesta en escena que da forma a ese paseo de la penitencia que comienza desde la escalinata del Gran Septo de Baelor. Es el conjunto de humillación pública con esa turba expectante que la tira comida, mierda e incluso la doblega con escupitajos, insultos y actos indecorosos. Es ese largo e interminable peregrinaje y sensación de distancia sobre la Fortaleza Roja. Parece que nunca avanza… Cersei llegará al lugar de su salvación cubierta de inmundicia, con sus pies en carne viva… sangrando. Veremos cómo la leona se dará cuenta de que está prácticamente sola por sus decisiones pasadas e incluso erróneas. Dar el Septón Supremo de la Fe de los Siete —y restaurar la Fe Militante para someter a esa ‘reina’ rival— fue un error que ha pagado con creces. El Gran Maestre Pycelle ni si inmuta con su llegada, como Kevan Lannister… Ciertamente es Qyburn su aliado, aquel que cubre su ‘vergüenza’ y la ofrece una salida a su futuro. Pudiéramos pensar que toda la lucha de Cersei se debe a una redención pero intuimos con la llegada de ese nuevo miembro de la Guardia Real (¿El Monstruo de Frankenstein Meets La Montaña?) es el comienzo de una planificada venganza mientras se deja crecer el pelo y se limpia el hedor a podredumbre. ¿Darán los experimentos de Qyburn una salida también a Myrcella? 

Si no teníamos suficiente nos queda los designios de Jon Nieve. El relato de los hechos sucedidos en Casa Austera a Samwell Tarly han provocado que pierda dos grandes batallas: su reputación como Lord Comandante de la Guardia de la Noche es mínima, mientras que sus esfuerzos para sumar a los salvajes en su cruzada frente a los caminantes acabó con otra derrota a manos del Rey de la Noche y su ya populoso Ejército de los Muertos. La complicidad entre Jon y Sam es evidente y les basta poco para saber que ambos perdieron su virginidad con mujeres salvajes. Precisamente Samwell Tarly ha encontrado la vía perfecta tanto para salvar a Gilly y su bebé de los peligros del Castillo Negro como tomar el relevo del difunto Maestre Aemon. Su destino es la Ciudadela en ciudad de Antigua para que así pueda ser útil tanto al Lord Comandante como a la Guardia de la Noche. Jon se ha quedado solo pero por poco tiempo. La llegada de Davos Seaworth vuelve a avivar la necesidad de ayudar a Invernalia para escapar del pérfido y malicioso yugo de los Bolton. Sus intentos durarán exactamente lo mismo que la llegada de Melisandre al Castillo Negro. Stannis ha perdido y el silencio revela a Davos que Shireen también se fue… Da la impresión de que Melisandre está abatida, como si fuera la primera vez que la viéramos ser consciente de sus actos y crímenes. Anteriormente pudiera entonar un «el fin justifica los medios» pero, ahora, ha perdido el rumbo y sentido de su visión… Debe enfrentarse a sus propios demonios. Jon Nieve va a tener que también pelear contra los ideales que defiende. “Juego de Tronos” nunca ha dado respiro a los personajes que se han encaramado al estandarte de la moralidad y rectitud… Han ido cayendo uno a uno. Jon va a ser engañado por Olly con una noticia reveladora: un salvaje dice que ha visto a su tío Benjen. Jon sale al patio rápidamente para darse cuenta de que un cartel (TRAIDOR) marca un destino similar al de Julio César. Al bastardo le faltó soltar un «¿Tú también, Bruto?»… Y es que no es tan desgarrador ver cómo ese grupo de pérfidos cuervos, encabezados por Alliser Thorne, apuñalan uno a uno el vientre de Jon Nieve. Es algo incluso previsible. El material más potente, por el contrario, está colocado al final, cuando Olly da su paso al lado oscuro en una secuencia sin consuelo tanto para el protagonista como para la propia audiencia. El coup de grâce de Olly y la muerte de Jon Nieve marcan el fin de un ciclo de la serie, de esa lucha entre la vida y la muerte que señalaba Melisandre… Que ella esté allí se entiende que no es casualidad aunque lo mismo Bran Stark estuvo juntando las bolas de dragón necesarias para la resurrección. Sam dijo que Jon siempre se las apañaba para regresar… ¿Nos fiamos de Sam? Como ocurrió en “Arrow” en el cliffhanger de su tercera temporada: nadie se cree que uno de los héroes más amados del show se despida para siempre… aunque “Juego de Tronos” ya nos ha despertado a golpe de muerte, tragedias y giros de guión de nuestra catatonia. Esta última puede que dure hasta 2016… O tal vez, como Jon Nieve, nunca despertemos. Por favor HBO, tengan piedad y compasión de esta panda de pecadores que yacen al otro lado del pantalla… POR FAVOR, un poco de misericordia.

A continuación, las reviews de la quinta temporada de “Juego de Tronos”:

♛ (5x09) The Dance of Dragons: Danza de dragones
♛ (5x08) Hardhome: La masacre de Casa Austera
♛ (5x07) The Gift: El regalo
♛ (5x06) Unbowed, Unbent, Unbroken: Nunca doblegado, nunca roto
♛ (5x05) Kill the Boy: El camino de la venganza
♛ (5x04) The Sons of the Harpy: Donde los muertos no puedan oírnos…
♛ (5x03) High Sparrow: El Norte recuerda
♛ (5x02) The House of Black and White: ¡Más veneno, es la Guerra!
♛ (5x01) The Wars to Come: Comienza la quinta temporada de ‘Juego de Tronos’



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