Isabel: Un parto alargado y de un bebé… virtualmente muerto

Serie de TV

“Isabel”

España

2012

Sinopsis (Página Oficial):

Isabel y su hermano Alfonso viven felices en Arévalo con su madre Isabel de Portugal, viuda del rey Juan II de Castilla. Junto a ellos, su tutor, y casi padre, don Gonzalo Chacón y su dama de compañía, y mejor amiga durante toda su vida, Beatriz de Bobadilla. Sin embargo, un mal día son llevados por la fuerza a la corte de Segovia por orden de su hermano, el rey Enrique IV, con motivo del embarazo de su esposa, doña Juana de Avis. Un embarazo especialmente anhelado tras años sin conseguir descendencia, lo que han avivado los rumores sobre la impotencia del rey. Al llegar a Segovia, Isabel y Alfonso quedan bajo el cuidado de la reina, que los desprecia y teme a la vez porque constituyen una amenaza para el futuro de la hija que está esperando. El entorno hostil de la corte, la vida disoluta de los cortesanos y las continuas intrigas políticas les hacen madurar rápidamente. Isabel no tarda en comprender que se han convertido en simples peones para los intereses de los poderosos, y en esta partida tanto su hermano como ella corren peligro…

Crítica Bastarda:

La moda del retraso, la eterna e interminable crisis y la reciente volatilidad de TVE han provocado el parto septembrino de “Isabel”. Después del fiasco de “Toledo, cruce de destinos” y la reconversión de “Hispania, la leyenda” en “Imperium”, la lucha interior de los telespectadores entre expectativas y sombrío (y cutre y reciente) pasado de nuestra ficción histórica llegaba a una tregua: era momento de confirmar en el primer capítulo nuestros temores, posibilidades y esperanzas. El parto ha sido alargado y doloroso y tal vez el bebé que algunos observan alegres esté muerto. La primera temporada de 13 capítulos estaba filmada y se quedó en la nevera por los recortes presupuestarios del ente público. La serie tenía previsto contar la vida de Isabel la Católica en 52 capítulos repartidos en 4 temporadas y, dependiendo del interés del mercado internacional, ampliar la ficción hasta seis entregas. Ahora mismo se encuentra virtualmente cancelada… a la espera de sus audiencias, aunque hace meses la noticia fue que los decorados estaban desmontados… En el primer capítulo una frase resume todo lo anterior: «El pasado es como la leche derramada: ya no se puede recoger». Y ahora mismo “Isabel” es leche a punto de estrellarse en el suelo. Pero como España es un país de gatos es el instante oportuno de relamer el primer sorbo de esos trece chupitos.

Los buenos datos de audiencia y opiniones positivas de medios y público han catapultado el primer capítulo de la serie, producida por Diagonal TV, sobre la juventud de Isabel la Católica al ‘candelabro’ del prime-time. La cadena pública emitió la primera entrevista televisiva al presidente de Gobierno Mariano Rajoy para pasar al primer capítulo de “Isabel”. La serie busca cierto equilibrio entre “Los Tudor”, las intrigas palaciegas de “Juego de Tronos” (y cuervo por águila) y su tono sex-spanish pero con olor a superproducción televisiva. Aunque a Isabel la Católica se le asocia un fragmento histórico relegado al descubrimiento de América (y sus malos olores corporales para no incurrir en el antiguo pecado de ‘lavarse’), lo que interesa aquí es su juventud, narrada en flashback, hasta su coronación como Reina. En esta primera entrega el periodo retratado oscila entre 1461 y 1464, aunque los prolegómenos iniciales y los cambios de edad y no corporales de Michelle Jenner pueden confundir a algún despistado. Eso sí, si alguien esperaba un “Los Tudor” o “Juego de Tronos” spanish-version le aconsejaría un buen siquiátrico o la vuelta a las matemáticas de primaria: no son los mismo ocho que ochenta. Otra cuestión son las interpretaciones. La mejor ficción televisiva británica o estadounidense nos ha confirmado que los grandes nombres no esconden muchas veces a grandes actores. La mayoría de los repartos que nos encandilan están compuestos por secundarios ninguneados por Hollywood y por rostros desconocidos. No obstante, las interpretaciones de Pablo Derqui y William Miller para sus roles de Enrique IV y Beltrán de la Cueva, correspondientemente, incurren en la comedia involuntaria.

Hay que recodar(nos) que “Isabel” es una serie de ficción basada en un fondo y telón de hechos reales e históricos. Desde la inseminación artificial a lo “Pink Flamingos” versión medieval, niñas ‘beltranejas’ y bastardas, rumores sibilinos y pérdidas de chaveta maternales, entiendo que el soporte y asesoramiento histórico se equilibra. Javier Olivares, guionista de la serie, es además historiador… aunque puso firma a libretos de “Los Serrano” o “Los hombres de Paco”… que también marcaron la historia de la ficción televisiva nacional. Tal vez la fotografía y la banda sonora no estén a la altura del proyecto. Los decorados dan cierta sensación de cutrez y la épica y esplendor que requerían ciertos momentos del capítulo se evaporan entre los deseos de muchos telespectadores. Tenemos la televisión que nos merecemos y, seguramente, “Isabel” sea lo máximo a lo que podemos aspirar… de momento.

«¿Una mujer reina de Castilla? ¡Qué barbaridad! Las mujeres no están hechas para gobernar Reinos sino para casarse y tener hijos». Con la anterior frase se nos muestra que el interés dramático del proyecto estaba en la figura histórica de Isabel y no de Fernando de Aragón. Una vez dispuesto el punto de vista y el pago en carnes («Nunca un ‘puto’ fue pagado tan generosamente»), el guión busca la acción en la conspiración y la lucha de poderes frente a cualquier atisbo romántico-bobalicón. Puede que muchos vean la fragilidad corporal de Michelle Jenner como perfecta para interpretar a esa Isabel cada vez más Reina y sabia-y-sibilina (por supervivencia y venganza bíblica)… pero por los retratos que tenemos de Isabel la Católica el papel era para Eva Hache ‘de cabeza’.

Linces, bigotes, bromances ‘reales’, sexo impúdico y lascivia de pasillo entre intrigas, corrupción, venganzas, odio irracional, rumores, infamias y una Castilla dividida… debido a una inestabilidad monárquica encumbrada en delitos y ‘escopetazos’. Los tiempos no cambian… Después de ver el primer capítulo de “Isabel” se puede afirmar que la espera de la serie definitiva española… tampoco. 

En Imdb no ha gustado nada la serie a sus 5 primeros votantes...