Título Original: “Total Recall”
Director: Paul Verhoeven
Director: Paul Verhoeven
EEUU
1990
Sinopsis (Oficial):
Estamos
en el año 2084 y Douglas Quaid (Arnold Schwanzenegger) sufre el acoso de
un sueño repetido acerca de un viaje a Marte. Una visita a un salón de
vacaciones hace que Quaid recupere recuerdos que habían sido borrados de su
mente. Quaid descubre que es, en realidad, un importante agente de la
inteligencia de Marte, que ahora se encuentra sometido al tiránico gobierno del
traidor Vilas Cohaagen. La memoria de Quaid ha sido borrada para que
desaparezca todo vestigio de su conocimiento de los planes de Cohaagen. Quaid
burla a la Policía Secreta y regresa a Marte donde se reúne con su antigua
amante, Melina. Entre los dos tienen que detener el diabólico plan de Cohaagen
y desvelar los misterios que oculta el corazón del planeta.
[ADVERTENCIA:
Esta crítica puede tener spoilers de mi vida y la película]
“Desafío
total” provocó uno de los
grandes traumas de mi infancia. Todo empezó en el momento de su estreno en
cartelera cuando después de hacer cola, durante el tiempo que se tarda en
llegar a Marte (en esta película 30 segundos), me quedé sin entrada… Estaba muy
ansioso debido a que inicialmente fue
calificada en EEUU como X, aunque realmente era la única película que había en
la cartelera en ese momento. Tiempo
más tarde, pude verla… pero comencé a tener un sueño recurrente donde era
víctima de una descomprensión y siempre salía volando a menos que me aferrara a
algo. Aunque sabía (y repetía) que era un sueño fue extremadamente traumático,
sobre todo en sueños húmedos con toda clase de flujos formando remolinos pegajosos
y asesinos. Para colmo, la televisión hizo que odiara esta película del todo en
mi subconsciente. No podía ver noticias vinculadas con la política porque cada
vez que aparecía Pujol me recordaba a Kuato y tampoco el fútbol ya que la
banda sonora de película era utilizada como sintonía Canal+.
Después de reconocer mis problemas en público en un club de rol formado por
tres personas, incluyendo un maniquí para actos fetichistas, me interné
voluntariamente en un psiquiátrico donde me dieron de alta en el mismo día con
un consejo para solucionar mi problema: solamente un trauma mucho mayor podría
solventar el presente.
No
se equivocaron. Gracias al gran sufrimiento traumático que me ha provocado su
remake, perpetrado por Len Wiseman, estoy completamente recuperado. ¡Por
fin destrozar buenas películas de décadas pasadas sirve para algo! Al volver a
ver la original “Desafío total” he podido comprobar que mis heridas mentales
pasadas han quedado selladas y he disfrutado de la cinta de Paul Verhoeven. La
película, una de las cumbres del género gracias a su inteligente utilización de
los efectos visuales, humor y violencia, incluso puede ser vista como un
homenaje sci-fi a “Laura” de Preminger al poder ser tres tercios
de película un sueño implantado en la mente del protagonista por Memory Call. Bob
McClane le revela el argumento de todo lo que va a ocurrir…
Es usted un importante agente secreto de una gran potencia camuflado
bajo una falsa identidad. Agentes enemigos intentan matarle a diestro y
siniestro y entonces es cuando conoce a una misteriosa mujer. […] No me
gustaría estropeárselo… pero puedo asegurarle que al final logra su objetivo:
consigue a la chica, mata a los malos y salva a todo el planeta.
Para
colmo el programa que le implantan se llama ‘Cielo azul en Marte’ y vemos a Melina
en uno de los monitores. La gota de sudor que marca un punto de giro podía ser parte de la coherencia de la propia aventura implantada. Incluso el propio protagonista duda al final de la
película si todo es un sueño. ¿Realmente importa? Está claro que películas como
“Desafío total” quedaron incrustadas en nuestras mentes como sueños. Sueños que otros han querido hacer realidad en la actualidad y han
sido incapaces de traspasar la profundidad de lo etéreo para quedarse en la
carcasa reluciente y superficial. Tal vez nadie pueda imitar los sueños a menos que el espectador sea capaz de creer en ellos. Algo que, desde luego-y-de-Lugo-a-Marte, consiguió “Desafío total” de Paul Verhoeven.
¡¡¡OBRA MAESTRA!!! Yo la vi de estreno en una sesión matinal en los cines de La Vaguada con 12 años... ¡¡¡y flipé!!! Marte, hostias, Chuarche, extraterrestres... ¡¡¡Sharon Stone!!!! 12 añitos que tenía y por primera vez encontré una "musa" del cine... ¡¡¡una diosa!!! En la secuencia de la pelea con Arnold, sudando... uy!!! Aún hoy en día, 22 años después "sufro" solo con pensar en Sharon Stone en Desafío Total.
ResponderEliminarPor cierto, eres un cabronazo de primera... ¡¡¡yo también sufrí el trauma de la sintonía del fútbol de Canal +!!! jajajaja!
Un saludo!!!!!
Oui, Je suis a bastard!
EliminarA mí me sigue gustando Sharon Stone hasta en "Instinto Básico 2", donde otorgaron un Razzie a la peor pareja del año por sus tetas asimétricas.
Saludos!
Sharon Stone es la cincuentona que ha envejecido mejor
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