Vayamos al undécimo episodio de la tercera temporada de “The Flash” para ver cómo el equipo alrededor de Barry Allen trabaja, a golpe de reconstrucciones con Legos, para cambiar ese futuro que todavía no está asentado y que marcará la vida de todos ellos en mayo. Con los sueños de grandeza (y literarios) de H.R. Wells para escribir su novela (o posts) en Tierra-19 no situamos en ese nueva realidad en la que todo el Team The Flash ya está asentado y en el que el arresto de criminales, por parte de Kid Flash, acaba en selfies y fotos para las redes sociales. ¿Todo ese felicidad o parte de un caramelo envenenado? Todo ese material no deja de esconder un drama en la muerte de Iris y en su relación con Barry, como si los escritores hubieran hallado el arco argumental más satisfactorio para potenciar su relación bajo una sombra trágica en el futuro. Sabíamos que Gypsy estaba de visita en Tierra-1 para buscar a Wells y vamos a descubrir que en Tierra-19 están terminante prohibidos los viajes interdimensionales… bajo pena de muerte. ¿Qué provocó que H.R. decidera arriesgar su propia vida para tratar de encajar en ese nuevo mundo? La cuestión es que Wells sabía perfectamente que era un fraude y deseaba reescribir su historia en Tierra-1, convertirse en ese héroe que el cuento había ya determinando que no era… ni nunca lo sería. Es obvio que “Dead or Alive” gira sobre ese sentimiento en el que todos los personajes de “The Flash” pueden convertirse en (super)héroes y el viaje de Gypsy desde Tierra-19 va a determinar también ese tono que tan bien sienta a la serie de The CW: encontrar la comedia y el entretenimiento mientras se habla de muerte y una tragedia venidera. El episodio sigue insistiendo en ese imposible que supone la salvación de Iris, de su funesto asesinato por parte de Savitar, al no llegar a la velocidad que exigiría que Barry pudiera llegar a ese punto fatídico. Las matemáticas son así. Ese material también sirve para profundizar en los sentimientos de Iris y su miedo en ese futuro en el que el propio personaje pudiera trasladar las emociones de la audiencia a otra clase de lectura: ¿ha dejado una marca reseñable Iris o, por el contrario, su preocupación encaje en el desaprovechamiento de la protagonista salvo cuando su doppelgänger hizo acto de presencia? En cierto modo, el propio capítulo es consciente de que viene precedido de una temporada irregular y que tiene que asentar todo el conjunto para una proyección satisfactoria. Repasemos “Dead or Alive”.
Posiblemente “Dead or Alive” ofrezca la mejor cara de “The Flash” en esta temporada aunque tal vez no sea valorado apropiadamente al no disponer de un villano prototípico (Gypsy es una leyenda y superheroína de Tierra-19) mientras que el conjunto aporta un aire de episodio de transición. Gypsy es un ‘colector’ o cazarrecompensas que más que ejercer como su rol y personaje de DC revela los dones y poderes de Cisco (Vibe) elevados a la máxima potencia. Ya el propio protagonista vio en Tierra-2 sus posibilidades y la llegada de Gypsy aporta los viajes interdimensionales a la ecuación. La pregunta pudiera ser otra: ¿si están prohibidos con pena de muerte en Tierra-19 por qué Gypsy puede hacerlos? Digamos que ella es la excepción a la regla y descubriremos que tal prohibición fue aplicada cuando una Tierra rival trató de destruir el planeta azul de esa dimensión a la que pertenece H.R. Wells. “Dead or Alive” descubre rápidamente la capacidad de Gypsy para dar con el paradero de su objetivo y revelar en el proceso esa atracción inmediata por Cisco Ramon. El periodo de gracia que concede Gypsy, capaz de frenar con sus poderes a velocistas o transportarse mediante portales a otros puntos (algo que podría salvar a Iris, todo sea dicho), cae como un jarro de agua fría en el grupo, en el que veremos que el conflicto de H.R. se amolda al de Iris en el episodio. ¿Podrán ambos reescribir su historia y cambiar el rol impuesto? La trama criminal de Iris y su hermano Wally, por lo tanto, sirve a los guionistas para mostrar a un personaje que no teme a la muerte y con la capacidad de disponer de un hándicap para revelar una actitud ciertamente suicida al conocer al dedillo cómo está escrita su propia historia. Iris descubrirá, por parte de Barry, que ya marcó una diferencia y seguramente su nombre en ese artículo que abría el periódico del futuro en la sala del tiempo de Eobard Thawne sirva para puntear los tiempos emocionales de un personaje que necesita una reinvención más allá de un ámbito periodístico. Al fin y al cabo, la trama actual de la serie es un renovarse… o morir.
Apropiándose de tal concepto y de los guiños metareferenciales, Cisco encuentra en un juicio por combate (a lo “Juego de Tronos”) una vía para ganar tiempo y, al mismo tiempo, revelar dos conceptos: está dispuesto a dar su propia vida por salvar al que ya es su amigo y, además, necesita ponerse al día con sus poderes para ofrecer su mejor versión. Es obvio que Vibe todavía no es Vibe y tal preocupación manifiesta una crisis de confianza dentro de ese equipo en el que Julian Albert es el ser más negativo de la historia de la humanidad. Explorando el drama y el humor de las situaciones, ni siquiera un intento de intervención por parte de The Flash y H.R. consigue arreglar las cosas sino generar más conflictos. Considero que “Dead or Alive” es un episodio en el que tanto Cisco Ramón como Kid Flash son los héroes de la historia y, tal acto, sirve para quitar presión a Barry. La batalla entre Vibe y Gypsy sirve, como añadido, para lanzar algún guiño a “Supergirl” y destapar cierta originalidad y posibilidades dentro del espectáculo. Gracias a un consejo de Julian (este equipo depende exclusivamente de sus ‘asesores’ y ‘coaches’) Cisco derrotará a Gypsy y éste se ganará su corazón al evidentemente no matar a la cazarrecompensas. Tal acto también nos descubre que Gypsy retornará a Tierra-19 con una bolsa repleta de café (ya no existe en la dimensión) y con una mentira que obligará a Wells a no poder regresar nunca jamás a su universo. Amén de esos posts que concluirán con su supuesta y fingida defunción. Con todo el equipo más unido que nunca y un Joe West viviendo en la gatuna ignorancia, Barry verá en el potencial y progresión de Kid Flash la vía de poder detener a Savitar. ¿Podrá conseguirlo? ¿Regresará Gypsy o la prohibición de Tierra-19 es un mecanismo argumental para no traer nada de ese mundo de regreso? La cuestión pudiera ser que Cisco siempre ha estado rodeado de un halo trágico en sus relaciones románticas, condenadas todas ellas a la separación… Ni siquiera los escritores conceden un beso a ese nuevo superhéroe que va a proteger junto a Kid Flash y The Flash Central City. Con el trabajo bien hecho ahora llega el momento de seguir mejorando y progresando, como si el show de The CW hubiera encontrado en la construcción de sus nuevos héroes una vía para también crecer como espectáculo y serie.
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