The Americans (2x09) Martial Eagle: Sobre el perdón y la redención

Se quiera reivindicar o no, FX está construyendo una parrilla muy interesante con series de calidad pese a ofrecer algunas de ellas algunos escasos resultados en cuanto audiencia se refiere. El hecho es que “The Americans” no funciona tan bien como otros dramas que cuentan con el apoyo del público como “Sons of Anarchy”, “Justified” y evidentemente con el actual buque insignia de la cadena de cable: “American Horror Story”. Pese a ello, el drama de espías rusos en suelo americano durante la Guerra Fría en los 80 ha tenido el voto de confianza para afianzarse una temporada más con novedades como “The Bridge” o “Fargo”. Se sea o no afín al American Film Institute o vuelva a ser olvidada en los Emmys y Globos de Oro, “The Americans” quiere ampliar su marca en nuestros televisores y “Martial Eagle”, noveno capítulo de su segunda temporada, desea mantener su calidad y márgenes inquebrantables con unos de los mejores y más completos capítulos emitidos.

Comenzamos con la acción y pasamos al drama psicológico con ese suspense de fondo que va a ir revelando las líneas de misterio de la temporada y ciertos reflejos emocionales en todos los implicados. “Martial Eagle” es, en líneas generales, uno de los más completos capítulos de la temporada porque van unificar prácticamente todo lo vivido desde el comienzo de la serie para propulsar la recta final. El arranque retoma la recta final de “New Car” (2x08) para que tanto Philip y Elizabeth accedan a la operación secreta ‘Águila Marcial’ a través del camión séptico que ‘tomaron prestado’ dejado maniatado a su conductor en el bosque. Nada va a salir bien una vez dentro y con Elizabeth oculta en el interior evitando el olfato del perro del vigilante. Mientras Philip hace fotos de los oficiales rebeldes que imparten la formación, en el pequeño edificio Elizabeth asesina a golpe de silenciador al supuesto objetivo. Philip es descubierto y tendrá que asesinar al hombre que le descubrió y a un par de soldados. Philip no quería matar y el capítulo va a profundizar en esas sensaciones sobre todo teniendo en cuenta que el conductor del camión que secuestraron también ha fallecido por forzadas ‘causas naturales’. 

“The Americans” declinó de una línea de suspense en la que Paige pudiera descubrir el ‘otro’ trabajo de papá y mamá para introducirla en la religión y así confrontarla a sus padres. Creencia contra creencia. Que Philip y Elizabeth acompañen a su hija a la iglesia por una misa especial después de sus asesinatos durante la operación secreta ‘Águila Marcial’ no deja de ser un problema para ambos. El contrapunto llega cuando se enteran de que su hija donó todos sus ahorros (600 dólares) a la congregación. El ataque entre Paige y sus padres ofrece otras emociones soterradas y Philip acaba arrancando las páginas a la biblia de su hija como si también chocara contra sus propios remordimientos. Los pecados afloran y la redención para un par de espías que deben matar, chantajear y mentir como parte de su ‘profesión’ parece imposible. Si bien el asesinato de Emmett y Leanne quedó en punto muerto entendiendo que Claudia fue la responsable indirecta del mismo, se va a unificar todo con las investigaciones de Stan tras poder acceder al programa secreto del Departamento de Defensa (Stealth). Confirmará que Baklanov no está implicado y que existe ninguna persona clave sino muchas. Después de alertar sobre los soviéticos, Stan conocerá que la reunión del proyecto fue en Alexandria (Virginia) dos meses antes, donde los representantes de Lockheed y Northrop estuvieron presentes. Todos ellos serán convocados por el FBI y evidentemente también Fred (John Carroll Lynch) recibirá la invitación provocando un encuentro de emergencia con Philip. Las intenciones del FBI (o en este caso de Stan) son alertar de que el KGB hará acto de presencia en sus vidas y les atacará por sus vertientes más vulnerables. La idea de la secuencia de montaje y el final careo de Fred y Beeman es que la traición de ambos contraste con sus sentimientos. “Martial Eagle”, de hecho, no va a utilizar a Nina ni a Oleg ya que el ‘daño’ está hecho en la conciencia del agente, que en este capítulo perderá como colofón a su esposa que le abandona para iniciar una futura aventura con otro hombre. Aquí contrasta la información previa que sirve Philip a Fred sobre los planos falsos y la muerte de más de un centenar de soviéticos. Recordemos que no está del todo claro que los planos fueran falsos por la conversación de Oleg y Arkady del pasado episodio y la manipulación de la manipulación de la todavía más manipulada manipulación puede generar una futurible caída de fichas de dominó si así lo decidieran los guionistas. Que Elizabeth utiliza una reunión de alcohólicos anónimos para contactar con una trabajadora de Northrop (interpretada por Karen Pittman) no deja de tensar esa cuerda invisible de la que estiran KGB y FBI instintivamente reaccionando el otro.

“Martial Eagle” es posiblemente uno de los capítulos más completos de esta temporada, ya sólida de por sí, porque va a lanzar muchas redes como la secuencia breve en la que Larrick se entera en Nicaragua (en EEUU se ha vinculado la misma con Oliver North al ser consultor del capítulo) de los asesinatos en la operación secreta ‘Águila Marcial’ o no sabemos si en su alma se aspira remordimientos o venganza de un sociópata. Lo veremos. Así como conoceremos dos líneas anexas de las investigaciones del FBI sobre la reunión del Proyecto Stealth en Alexandria, ya que coincidió con el asesinato de Emmett, Leanne y su hija y el olfato de Stan se activa para tratar de vincular todo… aunque, en apariencia, nada sea útil tanto por la perfecta máscara del Directorio ‘S’ como por las pruebas eliminadas por Philip. Aquí la pieza central es Fred y entendemos que el personaje cobrará más fuerza en el cierre de la temporada. Clark también contará con la ayuda de Martha para saber qué conoce el FBI del proyecto de los aviones espías, ya que finalmente utiliza la grabación manipulada de Gaad y Stgan para posicionarla en contra de ellos… aunque no sabemos si el coitus interruptus se produce como otra maniobra de manipulación o porque, como vimos en la secuencia del paseo marítimo, Philip está tocado. Tocado y hundido parece también el agente Gaad que se sienta en una cafetería frente a Arkady para lanzar sus últimas amenazas para evitar incluso la prisión (con la pertinente pérdida de trabajo) por su implicación en el asesinato de Vlad. Como medida desesperada sacará a relucir el material clasificado sobre Richard Patterson, al que vimos morir en la recta final de la primera temporada a manos de la vendetta ejecutada por Claudia. Como bien confesó Gaad a Stan, el KGB sabe borrar sus huellas cuando comete un asesinato y ellos no. Arkady está tan tranquilo que a Gaad se le queda la misma cara de un cordero a punto de entrar en el matadero cuando el hombre a cargo de La Rezidentura abandona la cafetería sacando un buen puñado de dólares. 

El capítulo, por el contrario, aparte de avanzar con muchos frentes se resume en la secuencia en la que Elizabeth y Philip hablan en su dormitorio de los asesinatos que cometieron en la operación. Es la guerra, aunque sea fría como sus almas y para ninguno es fácil llevar a cabo su trabajo. Como ambos llevan el asunto de manera completamente distinta a efectos pasionales, Paige va a ser la catarsis de ambos. El castigo de Elizabeth a su hija para que haga tareas de la casa en medio de la noche como reacción a su madurez y gastar el dinero cómo quiere, pudiera ser el ejemplo perfecto para todo padre y madre de familia. Así es el trabajo, al parecer, fregona o pistola en mano… La catarsis de Philip va a ser más terrible en la secuencia final del capítulo donde entra en la iglesia para hablar con Tim, el pastor. Philip va vestido para matar y cuando sale el asunto de los 600 dólares el propio pastor reconoce que no los habría aceptado si no llega a ser por el reconocimiento de sus padres. Tim sabe que Philip no quiere un cheque y tiene enraizada la rabia a su propia alma. Philip no necesita ni quiere ser salvado tal vez porque no exista una posible redención con sus manos manchadas de sangre. Da la impresión de que las palabras sobre el perdón para todos logran hacerse un hueco para que la fe de Tim obligue a Philip a irse del lugar y su mirada hacia atrás sugiera demasiadas cosas que nos remiten a “The Clock” (1x02) y sus creencias en Dios cuando tal vez estemos ante un torturado Diablo. ¿Acabará confesándose o matando al pastor?

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