Ni está relacionada con la película de animación de la DreamWorks, “Monstruos contra Alienígenas”, ni con la competencia, “Monstruos, S.A.”, y mucho menos se trata de una nueva película porno de Rocco Siffredi y Nacho Vidal. “Monsters” es una película difícil: controvertida, de fondo y borde político, con nuevas vías de escape para el género fantástico.
Con brillo y faltas, irregular pero valiente. Se podría resumir y definir como cinta de festival. De esas que suelen ser aplaudidas o abucheadas y es ahí tal vez el contrapunto y virtud que no encuentra el filme de Gareth Edwards. Parece que la pasta se la han dejado en carteles (infinidad de ellos) y en construir una puesta en escena apocalíptica bajo resortes políticos y sociales. Se habla de inmigración y dinero en el subtexto… de una amenaza que nunca debe cruzar la frontera, del miedo a la diferencia y la toxicidad que ello representa. Tal vez toda la cinta se vea insuflada de cierta predisposición autoral pero Edwards no es autor o no quiere dar el paso pertinente para hacerlo. ¿Le faltó valentía? Seguramente Lisandro Alonso hiciera una película de culto bajo la premisa y material y Gus Van Sant haría su filme más político siguiendo pautas pasadas.
Con brillo y faltas, irregular pero valiente. Se podría resumir y definir como cinta de festival. De esas que suelen ser aplaudidas o abucheadas y es ahí tal vez el contrapunto y virtud que no encuentra el filme de Gareth Edwards. Parece que la pasta se la han dejado en carteles (infinidad de ellos) y en construir una puesta en escena apocalíptica bajo resortes políticos y sociales. Se habla de inmigración y dinero en el subtexto… de una amenaza que nunca debe cruzar la frontera, del miedo a la diferencia y la toxicidad que ello representa. Tal vez toda la cinta se vea insuflada de cierta predisposición autoral pero Edwards no es autor o no quiere dar el paso pertinente para hacerlo. ¿Le faltó valentía? Seguramente Lisandro Alonso hiciera una película de culto bajo la premisa y material y Gus Van Sant haría su filme más político siguiendo pautas pasadas.
Una amenaza invisible que tapan selvas, oscuridad y muros en un viaje lleno de peligros que no son visibles… Esa visibilidad inicial que abrumadoramente silenciada por un viaje errático repleto de dificultades y tiempos muertos. Es ahí precisamente donde se encontraba la película que nos enseña en parte el director… pero se ve a sí mismo amenazado con la clandestinidad y la pérdida de pasaporte cinematográfico.
NUEVA CULTURA |
Precisamente la batalla se pierde en todas las concesiones de su recta final, donde esos monstruos quedan al destape para intentar dotar a la cinta de un componente dramático, y ciertos resortes de acción que animen la palestra. M. Night Shyamalan jugó mejor sus cartas en ese aspecto en “Señales” y es ahí donde falla y peca por conceder la entrada a un país de cultismo la prostitución mercantil habitual del género. Ese vómito de acción, terror enlatado y dosis de poco raciocinio empapan la propuesta de aire comercial pero desinflan las esperanzas por incoherencia y cierta hipocresía cinematográfica. Hay memoria e inteligencia política en esa diferenciación de vallas entre países ricos y pobres, entre aquellos que cierran fronteras en inexpugnables muros y otros donde son sacudidos por los mismos temblores pero perecen a cientos.
LA COMUNICACIÓN NO FALLA |
Efectivamente, son detalles dentro una desequilibrada y tremendamente desigual propuesta que toma aire después de “District 9”, se destapan sus carencias en alienígenas animados entre un cruce de Ray Harryhausen y una Atari tuneada, su honroso presupuesto de medio millón de dólares con malas actuaciones de sus improvisados actores secundarios y una controvertida recta final donde se atreve con un refrito de momentos spielbergianos de “La guerra de los mundos” y “Parque Jurásico” y arremete uniendo al Antonioni de “El eclipse” con la Sofia Coppola de “Lost in Translation”. Corte final en las antípodas que dejará al espectador noqueado con la sensación de que la propia película ejerce de un monstruo tan bello y luminoso como peligroso y aberrante.
Es verdad, "Corte final en las antípodas que dejará al espectador noqueado con la sensación de que la propia película ejerce de un monstruo tan bello y luminoso como peligroso y aberrante." aunque creo que eso no es del todo malo, la película está un poco descompensada entre esa primera parte en la que pasa poco y nada, (con tanto insinuamiento de los monstruos pero sin mostrar nada ya casi esperaba un giro al final en el que dijeran que los extraterrestres no existen, son solo un invento de EEUU para hacer un muro que los separe de Mexico) pero ese final tan tajante, ese golpe que me dejo pensando, me pegó tanto que me dije "es una buena película" y hasta le perdoné los carteles, rótulos y grafittis en español mal escrito... Fue extraño
ResponderEliminarHola Anónimo!
ResponderEliminarEs una película demasiado extraña para restarla méritos y hundirla como hizo bastante público y parte de la crítica. Es cierto que debería jugar más con el fuera de campo y la psicología... con un enemigo invisible. Pero desde la primera secuencia vemos a los alienígenas y pierde cierto misterio.
El final es demasiado alegórico y después de un viaje interior de los personajes para llegar a ese punto me parece un arma interesante de doble filo.
Habrá que volver a ver esta película pasados unos años.
Saludos bastardos y gracias por el comentario!