Agents of S.H.I.E.L.D. (2x09) Ye Who Enter Here: En busca del templo maldito

Olvídese de “Arrow”, “The Flash”, “Gotham”, “Constantine”… porque la ‘nueva y brillante’ “Agents of S.H.I.E.L.D.” es el mayor entretenimiento basado en el mundo del cómic que actualmente se emite en televisión. Con “Ye Who Enter Here”, noveno episodio de la segunda temporada de la serie de ABC, llegamos al comienzo de su segundo acto y paso previo a su despedida en 2014 antes del aterrizaje de “Agent Carter”. No obstante, siguen existiendo objeciones en cuanto a la desigual dirección, fotografía y montaje, calificados como mediocres y/o irregulares por los más haters y recalcando el hecho de sacar poco rendimiento al jugoso material que propone el guión. Puede que todavía no estemos ante la mejor versión de “Agentes de SHIELD” pero sí ha quedado por activa y por pasiva que nos encontramos ante un show cada vez más sólido, en el que todos los capítulos de esta entrega no han dado un respiro al espectador y, sobre todo, en el que han ido desmigajando muchas de las grandes incógnitas para dar sentido al Universo Marvel venidero encajado desde la apuesta televisiva de Joss Whedon. Es hora de centrarse en ese templo maldito que nos presenta “Ye Who Enter Here”. 

El punto de partida es tan original como manido: una secuencia que sintetiza una pesadilla de Skye para desvelar sus conflictos y temores, su pasado reflejado en esos nuevos padres que forman May y Coulson. Raina, por el contrario, suelta la ya masticada bomba:

Sé honesta, Skye. ¿No te has sentido nunca perdida o tenido la sensación de que eras parte de algo más grande? ¿Como si fueras especial? Somos humanos, Skye. Simplemente tenemos el potencial de ir más allá. Mi abuela descendía de una larga saga de gente especial que creían en una historia sobre ángeles azules que cayeron de los cielos. Los antiguos les llamaban los Kree. (¿Y qué quieren los Kree?) Cambiar. Por eso dejaron el Adivinador, como una guía hacia el templo, para que los merecedores pudieran heredar la Tierra. Solo a los dignos se les permitirá entrar a presenciar su verdadero poder…

Los destinos de Raina y Skye van a quedar ligados en este episodio que resulta fundamental para entender el planteamiento argumental de ese ‘templo maldito’ que, en realidad, tiene una leyenda un tanto macabra con extrañas desapariciones en San Juan (Puerto Rico). El templo se encuentra en ‘La Garita del Diablo’, dentro de una fortaleza construida en el siglo XVIII y que ayudó a contener a algunos británicos cuando intentaron invadir la isla. El particular puesto de guardia fue construido en 1634 y es muy conocido por estar encantado… Allí van a dirigirse uno de los equipos de SHIELD compuesto por Coulson, Boobi, Fitz, Simmons y Mac. ¿Serán dignos o están condenados? 

Obviamente “Ye Who Enter Here” juega con esos elegidos en los que Raina y Skye están condenadas a entenderse, completarse y cambiar… HYDRA busca a la chica del traje de flores y vamos a tener toneladas de humor gracia a Patton Oswalt y un nuevo gemelo. Puede que sean chistes fáciles (aunque todo el mundo compre su paraguas-camuflaje) pero esa Agente 33 con la cara de May parcialmente mutilada juega a esos reversos oscuros que ofrecen los personajes, puliendo excelentes secuencias como un enfrentamiento físico con Skye. En realidad, vemos que la pupila está casi al nivel de su maestra y si a May le costó horrores vencer a su ‘evil clon’, Skye recibirá la ayuda final de Lance Hunter para desequilibrar la balanza. También existen otro reflejo entre Coulson y Fury, entre aquello que el actual director de SHIELD tiene en mente para esa peligrosa ciudad y aquello que hubiera realizado su antecesor. Con bastantes cosas que resolver entre Fitz y Simmons, el libreto del capítulo se esfuerza en afinar los encuentros y diálogos, en respaldarse en ese circuito de personajes que brindan momentos inspirados de humor un tanto ácido, como si leyeran la mente del espectador antes de soltar su frase inspiradora/afilada. El gran mérito de la actual serie es que sabe tomarse en serio (o no) sin que el conjunto se vea descompensado.

Olvídense de la Atlántida y vayamos a Attilan (sin confirmar oficialmente) para ir introduciendo a los ‘Los Inhumanos’ y ese largometraje que Marvel prepara para 2018. “Agents of S.H.I.E.L.D.” es una plataforma perfecta y gracias al lead-in del nuevo especial navideño de “Toy Story” (“Toy Story that Time Forgot”) consiguió repuntar siendo la líder de su franja horaria en lo que demográficos se refiere… aunque se enfrentara a una repetición de “NCIS: New Orleans” que la duplicara en audiencia. En fin, tiempos difíciles para una serie que se ha amoldado perfectamente a su nueva sintonía y molde pero se ha visto castigada muy duramente por su pasado. Volvamos al episodio, a esos sueños inquietantes de Skye que son, en realidad, premonitorios. Toda la información que desvela Raina nos revela, en montaje paralelo, que Coulson y los suyos están en muy graves apuros. Mac es el aventurero que baja a ese templo donde los juguetes de Leo Fitz se quedaron ‘sin pilas’… y palpará la terrible realidad: no es uno de los elegidos. No esperen que se transforme en piedra porque ese templo ‘cambia’ aunque sus efectos en los seres humanos comunes sea transformarlos en maquinas asesinas y violentas de matar. ¿No recuerda al Mirakuru de “Arrow” un poco? Mac se despachará a gusto con Coulson y Bobbi y finalmente entre todos, con el dilema de Fitz de asesinar con una pistola de balas reales a su amigo, pueden lanzarlo de nuevo a ese pozo que deberán precintar de nuevo lo antes posible… Descanse en paz. Sí, era un hombre de color y ha muerto. Again. No es racismo sino coherencia. ¿¡Hubieran matado a otro personaje de esa sala!? Lo dicho: D.E.P. ¿Qué secreto esconderá Bobbi a Hunter y que Mac se llevó a la tumba? Por si fuera poco, el rastreador de Raina es utilizado por HYDRA (con la ayuda de Ward) para localizar la nave de SHIELD y que el chico malo haga acto de presencia. Again. Le llaman de todo menos bonito. A May le faltó soltar un mata-hermanos. Raina se va con él o todos morirán… y queda una promesa por cumplir: Skye tiene (y debe) conocer a su padre… despidiéndose de esa ‘mamá’ llamada Melinda May. Raina recuerda a Skye que debe llevarse su ‘tablet’ con el mapa de la ciudad escondida y el varapalo y punto de giro es de nuevo notable en el show. Como epílogo llegan los fuegos artificiales: a Whitehall no le convence que Ward no destruyera la nave de SHIELD e indica a la Agente 33 dar la orden para que sus naves pongan fin a May y compañía. Recen por los ¿13? gemelos Koenig y recuerden que un sombrero es el presente perfecto para Coulson… porque recuperar y reparar su Lola sin Mac ya es un acto de ciencia ficción. Yo me quedo con el paraguas ‘Anonymous’ como perfecto regalo navideño. Ideal para colarse en cines y conciertos. ¡Y salir sin pagar del centro comercial! ¡Y otras cien millones de utilidades! Todas malas, incluido salvar a Raina. Que la pongan su traje de flores que ha vuelto uno de nuestros personajes favoritos del show y quiere cumplir la profecía de su abuela: heredarás la Tierra. No, no es una de Michelle Pfeiffer y Jessica Lange. Es una de Marvel.

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