Sheldon, Penny
Leonard y compañía arrasan cada semana en los rating de audiencia en EEUU y se
expanden, cual cosmos, en todo el planeta iluminando las pantallas de millones
y millones de personas. “The Big Bang
Theory” es una institución que se ha prodigado en premios y
redes al mismo tiempo que su calidad (para muchos y antiguos seguidores) se ha
visto completamente mermada. Chuck Lorre y Bill Prady han transformado una serie de inadaptados sociales en un “Friends” con geeks
y les ha salido una de las jugadas más maestras de la televisión del Siglo XXI.
Sus datos son incomparables para cualquier serie en emisión y su popularidad es
tan contradictoria como la valoración de los capítulos de su última temporada
en Imdb a modo de termostato. Sin lugar a dudas reflejan que es la peor
temporada de todas las emitidas. Incluso peor que su quinta temporada… que, a
su vez, era peor que la cuarta… que, a su vez, era peor que la tercera. Es
momento de comprobar en “The Monster Isolation”, decimoséptimo capítulo de la sexta temporada de “The Big Bang Theory”, si la serie de Sheldon Cooper sigue cayendo en picado o intenta remontar
el vuelo.
Nos enseñan
un flashback del ligue de Raj en San Valentín en la tienda de cómics de
Stuart… y nos preguntamos, ¿somos tan tontos para no recordarlo? Puede que los
creadores, aparte de insultar la inteligencia de su audiencia, consideren a Raj
tan invisible dentro de la serie que se vean obligados a mostrar cómo consiguió
tomar un té/café con una chica. Kate Micucci interpreta a Lucy y ha llegado, inicialmente,
para quedarse… aunque se fugará por el baño del café donde se encuentra con
Raj, que acabará siendo víctima de una gran depresión. Le veremos en un estado
más patético de lo habitual (sí, es posible) y tocará fondo al encerrarse dentro
de su apartamento para no querer volver a salir nunca más. Yo estoy con Sheldon:
¡quién pudiera hacerlo! Con las cosas que tenemos que hacer las mentes
inquietas… Además, tal y como nos muestra el indio, se pueden comprar hasta
langostas vivas y filetes por internet listos para servir y con entrega en domicilio en Amazon. Bueno,
tampoco hace falta ponerse tan geek y friki porque la compra se puede
encargar a domicilio hasta en el Metadona…
En fin, que el chico está deprimido y se pone perdido de guadedias… mientras que Leonard, Howard y Bernadette tratan de animarlo… aunque se vayan a comer langosta en el proceso (y por la envidia). Mientras tanto, volvemos a uno de los pocos componentes metaficcionales e interesantes de “Big Bang”: vuelve ‘Fun With Flags’ y… ¡esta vez con Penny! La rubia podrá ser tonta pero es natural ante la cámara… Cosa que Sheldon (mérito interpretativo de Jim Parsons) debería perfeccionar. Por primera vez Sheldon encuentra un talento en algo que hace su vecina con un CI digno de uno de los simios con los que trabaja su novia Amy. De hecho, la propia Amy le anima a agradecerle su participación y en el momento salvable del capítulo la rubia se queda descompuesta (para bien) y emocionada. Es normal que Sheldon la cague cuando Penny le invita a una obra de su curso de interpretación y decline la misma con sus modales asociales. Amy, como siempre, arregla el entuerto con una guerra de heces con simios por el camino. Creo que la anterior metáfora me sirve como reflejo de esta última temporada: un simple intercambio de ¿mierda? que algunos confunden con deliciosas chocolatinas.
La obra es “Un tranvía llamado deseo” de Tennessee Williams y veremos que Sheldon tendrá un CI de 187 pero es un poco lerdo a niveles artísticos. ¡No conocía “Un tranvía llamado deseo”! Al menos debería asociarlo con una ceñida camiseta blanca en el cuerpo de Marlon Brando, tal y como dictamina la cultura popular. Sheldon acude sin consolas, cubos de rubik en el paquete y pizarra magnética en el trasero… pensando que en la obra salen… tranvías… Antes, los chicos encontraron a Lucy en la tienda de cómics de Stuart que volvió para entregar una nota de disculpa a Raj. Al final acudirá a su apartamento, tras rogar por el teléfono a su mejor amigo en plena y calle y ropa interior, y le indicará que tienen muchos problemas para socializarse. Ambos parecen tal para cual y tendrán su primera cita. Obviamente estaremos invitados. “The Monster Isolation” únicamente parece que es un capítulo de lucimiento para Kaley Cuoco y que la actriz demuestre a millones de televidentes que también es capaz de lidiar con papeles dramáticos. Hasta Sheldon reconoce sus dotes:
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