The Walking Dead (1x06) TS-19: Morir (o no)

“The Walking Dead” llega a su primer y poco ansiado desenlace… ¿¡Seis episodios para una temporada de una de las series más esperadas le parece a alguien cuerdo algo normal!? Salvo si un está enfermo por el terrible virus y su cerebro va desapareciendo de la faz del mundo real… Seguramente la AMC no daba ni un duro por su infección masiva y se ha convertido en una de las más letales que han asolado a los televidentes en mucho tiempo. La decepción de “Lost” queda cerca y es momento de atajar el remedio a tiempo. ¿Mecerá la pena ver los próximos episodios de la temporada que viene? ¿Habrá que cortar la cabeza antes de que el el cuerpo nos alcance y nos muerda? “TS-19”, sexto episodio y último de la primera temporada, parece no tener del todo respuestas pero sí dar pistas… aunque queda tanto tiempo para que “The Walking Dead” vuelva a infectarnos…

Tiempo como el que les falta a sus protagonistas. Con la ‘escotilla’ abierta su particular Desmond les da la bienvenida al Centro de Control y Prevención de Enfermedades. Pero, antes, un flashback… Parece que “TS-19” tiene la función de unir en inicio con el desenlace y nos muestran lo que ocurrió para que Rick Grimes sobreviviese en el hospital.

Comenzaban los oscuros tiempos y la muerte inundaba los pasillos. Los infectados tomaban el hospital y éste se venía abajo. Los militares comenzaron a masacrar a médicos seguramente infectados y el estado de sitio era parte de los designios de la instaurada y vírica Apocalipsis. Un impacto de un misil, bomba u objeto volador (y explosivo) no identificado hace que la luz del hospital se venga abajo y las máquinas, a las que estaba atado (en vida y coma) Rick, se apaguen. Shane estaba en todo momento con él y no sabía qué hacer y cómo salir de allí sin abandonar a su amigo y compañero de trabajo. No había tiempo para más ni saber si al desconectarle de las máquinas podría matarle. Con el apagón el propio Shane coloca su oído en el pecho de Rick. ¿Sin latidos tal vez haya paraíso? Hallado queda. Shane, pensando que su compañero ha muerto, decide irse de allí pero coloca una camilla y cierra la puerta para que los ‘caminantes’ no accedan con facilidad a devorar el cuerpo de su compañero…

¿Coma y punto final?

Recapitulemos: Edwin Jenner es el doctor que está a cargo del Centro de Control y Prevención de Enfermedades porque sólo queda él con vida… Le vimos hablando en su vídeo-diario en actitud victimísta y a punto de suicidarse… pero una luz en forma de visita inesperada le ha dado un motivo para continuar. Recordemos, que las apariencias engañan en esta serie y nada es lo que parece. De momento, el precio de la entrada es un análisis de sangre… y un aviso: ‘Una vez se cierre la puerta, se queda cerrada’.

Como hemos visto en algún episodio emitido una trama principal con todos sus personajes principales reunidos no funcionaba del todo si no había carne en la boca de un zombi hambriento. Menos charla y más acción… parece ser uno de los lemas de la serie. También otro de sus clichés es una aparente tranquilidad y seguridad para comenzar a dar zarpazos asesinos. El abandono de Jim queda lejos ya pero ha marcado a algún personaje como a Jacqui. Ahora tocan himnos de alegría: estar bajo tierra tiene una gran ventaja. Ningún peligro del exterior puede acceder al interior por ser inaccesible siempre y cuando… el interior sea seguro. ¿Lo es? Hay agua cliente, ¡ducha!, ¡escena pre-sexual en la ducha!, ¡huevos! (de comer, guarros…) y, por supuesto, ¡vino! Amor y buena compañía, desde luego. También tenemos a un vi. No es que Edwin Jenner, aparte de doctor, sea bisexual y pretenda violar a Rick y compañía sino que Vi es el ordenador central y parlante del Centro de Investigación. Tenemos otro enlace con la saga “Resident Evil” y no será el único. La Zona 5 es como se llama esa parte del complejo o el complejo en sí. No me queda claro, como que suceda la secuencia más ‘strong’ del episodio. Desde su inicio nos acometen a taparnos los ojos por la brutalidad de sangre y casquería que vamos a presencias pero aquí se han pasado tres pueblos: ¡UN NIÑO (Carl Grimes) BEBE UN SORBO DE VINO! ¡Qué fuerte! ¡Imperdonable! ¿¡Dónde está el defensor del menor!?

Chears... or Dead

Shane quiere respuestas y le parece extraño que sólo quede el Dr. Jenner en el centro. Lo explica alto pero no lo suficientemente claro: muchos se marcharon con sus familias y otros, al ver la cosa peor, se suicidaron. ¿Por qué no lo hizo Edwin Jenner? Queda poco para las respuestas pero el momento ahora es de nuevas dudas. Los vómitos de Andrea nos descolocan porque podría estar infectada aunque sabemos que no es así. Parece que la muerte de Amy está todavía demasiado reciente como los efluvios y efectos del alcohol en los mortales. Shane acosa doblemente a Lori: con sobre-explicaciones y metedura (y metida) de mano. Toca poner el arañazo como defensa ante el ‘amor’ que le profesa Shane y que seguramente traiga consecuencias. Las dudas existenciales de Rick al Dr. Jenner le hacen ser más humano que súperhéroe y pueden que tengan recompensa futura.

Dr. Muerte

Después de la reseca, tocan respuestas y la presentación de TS-19, que da nombre al episodio. Consiste en la proyección en la sala principal de un cerebro de una vista interna mejorada que nos muestran, en plan ecografía icnográfica, la evolución de un sujeto (el nº 19) y su cerebro (uno extraordinario) que se mostró a ser objeto de análisis tras ser mordido e infectado. Vemos las sinapsis, impulsos eléctricos en el cerebro, que dotaban de vida y personalidad al cerebro… El virus los aniquila, a modo de meningitis, eliminando toda muestra de lo que era conocido como ser humano. ‘Las glándulas adrenales sufren una hemorragia, el cerebro se apaga y luego el resto de órganos. Toda esa secuencia nos deja en el concepto romeriano del muerto viviente y el apocalipsis. Nadie sabe por qué ha sucedido pero está sucediendo. ‘Podría ser microbiano, vírico, parasitario, fúngico’ e incluso ‘la Ira de Dios’ como contrapone Jacqui. Vemos el virus (rojo maléfico), en el ‘segundo evento’ (la vuelta a la vida bajo las Hordas de los Muertos) acometer sólo al tronco del encéfalo- Llega la muerte y horas después la vuelta a la vida bajo los instintos básicos y mecánicos. No hay vida en el cerebro, tan sólo lo mínimo que lo mantenga con ‘vida’ y hambre eterna. Ahora únicamente entendemos su único punto débil pero desconocemos el motivo y la salvación en forma de cura.

Survivors?

Como he citado antes el complejo, la voz de Vi, no es el único parecido con la saga de videojuegos “Resident Evil”: ¡hay cuenta atrás para la destrucción del complejo! ¡30 minutos! El Centro de Control y Prevención de Enfermedades está preparado para que cuando se acabe la energía se proceda a una descontaminación en toda la instalación. Ley de seguridad básica. El aire será fuego y todo quedará exterminado como medida de prevención. Posiblemente eso mismo ocurriese en otros complejos de investigación de todo el planeta. Sin energía no hay salvación… o manera de investigarla. Lo que era un refugio se ha convertido en una ratonera precintada y sin escapatoria. Edwin Jenner, además, encierra a los personajes y les insta a perecer de la manera menos dolorosa. A finalizar una lucha que no tiene significado ni final feliz. TS-19 era la mujer del Dr. Jenner y un cerebrito en potencia que podía haber dado con la cura… pero ella fue infectada y él no. Incapaz de llegar a nada esta es su despedida y motivo de aguantar hasta el final por una promesa que hizo a su esposa. Toco convencer al doctor que les libere… Shane es la ira y Rick la palabrería. La fuerza no conseguirá nada y Rick reduce a Shane en ese duelo de liderato y testosterona. Todo lo que quieren Rick y su gente es una elección, una oportunidad. Intentar continuar hasta donde puedan llegar… Además, que se acabaría la serie, shit! Finalmente el doctor les libera pero les informa que la salida exterior está sella. Cierto es, pero surge una terrible duda: ¿Qué le cuchichea el Dr. Muerte a Rick? 

¡Me leído todos los cómics y pasa esto...!

¡Menos de cinco minutos! Jacqui y Andrea se quedan. El resto huyen menos… Dale, que intenta convencer como sea al motivo de su lucha por seguir viviendo: Andrea. Como les había avisado Edwin Jenner el exterior y sus cristales están sellados y no hay escapatoria. Ni los cartuchos lanzados a cientos de metros por segundo de una escopeta parecen hacerles ni un solo rasguño. Carol tiene la solución: cuando Rick llegó al campamento por primera vez y lavó su uniforme encontró la granada que tenía el militar zombi del tanque es sus bolsillos. ¡Ladrona! ¡Ladrona! No importa porque es lo que salva el culo a todos. Incluso a Andrea y Dale. ¡No hay nada que funcione mejor que la verborrea senil para salvar a personajes secundarios y rubias con hermanas muertas! Ahora toca explosión monumental y cierre de temporada con nuevas oportunidades y elecciones. ¿Habrán hecho lo correcto? Lo veremos en el 2011.

Corre, Corre, Corre, Rick, Corre

Listado de supervivientes de la primera temporada con su probabilidad de vida (sin haber leído los cómics):

• Rick Grimes, Lori Grimes y Carl Grimes: Posibilidad de salvación MUY ALTA. ¡Son los protas coño!
• Shane Walsh: Posibilidad de salvación BAJA. Es fuerte y un sobreviviente nato pero… los celos son malos consejeros.
• Glenn: Posibilidad de salvación ALTA. Cae bien y es coreano. Si muere dejan de ver la serie los friquis.
• Andrea: Posibilidad de salvación MEDIA. Es necesaria una rubia en toda serie americana que se precie.
• Dale: Posibilidad de salvación ALTA. Un viejo sólo puede morir de viejo.
• Carol y Sophia: Posibilidad de salvación MUY ALTA. La imitación de Sinéad O'Connor y una niña para dar pena. Además ladrona de armamento pesado para sobrevivir.
• T-Dog: Posibilidad de salvación MEDIA. Con Jacqui muerta dudo que quiera liquidar a otro afroamericano…
• Daryl Dixon: Posibilidad de salvación MEDIA-BAJA. Un redneck siempre es útil pero éste no cae precisamente bien.

En Paradero desconocido:

• Morales, Miranda, Sophia y Louis: Familia latina que no veremos seguramente.
• Merle Dixon: El manco se llevo la ‘fragoneta’ y no quiere saber nada del mundo.
• Morgan Jones y Duane Jones: Familia afroamericana perdida en el limbo.