martes, 14 de agosto de 2012

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The Newsroom (1x08) The Blackout, Part 1. Tragedy Porn: Sensacionalismo, principios y otras catástrofes

Aaron Sorkin podría recordar al personaje principal que ha creado para “The Newsroom”. Al igual que Will McAvoy sufre, al parecer, una conspiración y campaña de desprestigio para que su labor no parezca tan buena, incluso mediocre. Han dado muchos palos a su serie e incluso han lanzado bulos como el despido de sus guionistas para la segunda temporada (salvando a su ex, claro). Han tildado la serie de sermón catódico, con personajes mal definidos y totalmente desaprovechada. La HBO parece que se arma y quiere a los mejores: ya suena Charlie Kaufman que tal vez cubra la decepción debida a la mala suerte que supuso la cancelación de “Luck” (Michael Mann). La controversia que ha generado la serie de Sorkin engrosa su atracción y capacidad de sorprender. Las noticias del 2011 serán expuestas en esta temporada para enlazar con nuestro presente y ver el impacto del momento y carga sobre el tiempo. Cuentan que la serie se iba a titular “More as This Story Develops” pero la HBO decidió que fuera “The Newsroom”. No se puede ser perfecto y la recta final de la primera temporada llega con su octavo capítulo: “The Blackout, Part 1: Tragedy Porn”.

‘News Night 2.0’ sigue teniendo problemas de supervivencia y Will, Charlie y MacKenzie tendrán que hacer sacrificios cediendo al sensacionalismo para que sus planes sobre un debate republicano se hagan realidad. Las piezas que componen la primera temporada de “The Newsroom” se unen para que veamos la lucha de ese equipo, que confeccionan y realizan un programa de noticias, frente a los intereses y trabas que impone la cadena.

Will tiene una entrevista con un periodista (Brian Brenner) del que quiere que cuente el desarrollado del programa. Tendrá acceso a todos los empleados sin restricciones pero, de momento, estará a prueba y todo será extraoficial. Obviamente Will quiere que cuente lo que ‘debe’ contar y, tal vez, uno de los motivos sea que Brenner es el ex-novio con el que MacKenzie le engañó. Tampoco Brenner es tonto y sabe que Leona va a por Will. Ese despido podría resultar sencillo ya que han perdido la mitad de la audiencia que tenían por no cubrir el caso de Casey Anthony. Reese informa a Charlie, MacKenzie y Will en su oficina. Al darse cuenta que el programa está en grave peligro, Charlie decide que cederán al sensacionalismo pese a la oposición de Mac. Deben tragar con un juicio que reunió a cientos de periodistas y reporteros a la puerta del juzgado y gente que viajó incluso a Orlando para poder acceder al tribunal y vivirlo en directo. Casey Anthony fue una joven madre acusada de asesinar a su hija de apenas 2 años de edad, Caylee Marie. El caso convulsionó en EEUU y todavía, pasado más de un año, sigue dando coletazos.


El equipo está preocupado con la simulación del debate pero las noticias importantes e informativas van a caer, ya que la mitad del informativo se lo va a llevar el sensacionalista juicio. Sloan no podría hablar de que será la primera vez en la historia que la Casa Blanca permita a EEUU impagar su deuda… y todo queda más reducido cuando el congresista Anthony Weiner cuelga fotos eróticas en su cuenta de twitter. Charlie contacta en la biblioteca pública de Nueva York con su ‘garganta profunda’. Se trata de Salomón Hancock, un ex empleado de la NSA, que le informa del proyecto Global Clarity. Sería como la máquina de The Dark Knight” e intercepta 1.700 millones de llamadas telefónicas, emails, y mensajes cada día. TMI está pirateando teléfonos y ordenadores y Salomón le indica que no subestime a Reese Lansing: es como James Murdoch. El motivo de esa revelación es que Salomón se ha dado cuenta que desde el 11-S el gobierno americano ha puesto en funcionamiento un sistema contra el que luchó contra los comunistas, saltándose la cuarta enmienda y realizando escuchas ilegales a sus ciudadanos sin orden judicial. Salomón necesita que Charlie hable de ese proyecto y le ayudará a protegerse de Leona Lansing.


MacKenzie en la sala de reuniones debe descartar prácticamente todas las historias interesantes para dar cobertura a las historias de Casey Anthony y Anthony Weiner. Don les ‘asesora’ sobre el caso y así “The Newsroom” aprovecha para meterse con Nancy Grace. Neal pide autorización a MacKenzie para realizar una historia sobre el trolleo de internet pero debe ‘infiltrarse’ y para ello tendrá que decir algo negativo de alguien del equipo. Con Sloan, desde luego, no funciona. Charlie comunica a Will y Mac el asunto de Salomón Hancock y de Global Clarity. También las maniobras de LeonaJim será el encargado de la investigación.

Volvemos a la sesión del Dr. Habib pero esta vez Will no tiene cita y se cuela. Finalmente le ve durante un minuto y le confirma que sigue tomando decisiones para hacer daño a MacKenzie. Lonny escucha todo y no aprueba esa actitud aunque Will la matiza. Su terapeuta es claro: debe perdonarla. Charlie, a la salida del edificio, habla con Leona y muestran sus cartas sobre la mesa, aunque hábilmente esconce aquello revelador que sabe. El tema de Tea Party y los hermanos Koch ha costado dinero a la empresa y nada podrá impedir lo puesto en marcha…


Maggie atiende a Sandee, una joven que desea desenmascarar con sus mensajes al congresista porque desconocía (pese a saber que estaba casado) que la ‘engañaba’ con otras. Va ir a todas las cadenas y Dylan Kagin va a ser su agente… Antes ya nos habían desvelado quién era con el caso de Casey Anthony: «va buscando a tientas por el parque de caravanas de la jurisprudencia lo que él llama historias ‘Oh Dios mío’. Entonces se deja caer por donde las víctimas, el acusado, jurados, policías, quienquiera que pueda vender a la prensa, las cadenas y los estudios».

Sloan sigue luchando para que su historia sobre la importancia del techo de la deuda y los efectos que están teniendo actualmente sobre la economía salga a la luz. Mac, lamentablemente y en contra de sus convicciones, debe rodar la entrevista de Will a Sandee… Pero para que algo salga a la luz debe haber oscuridad. Un apagón, como respuesta a la plegaria desesperada de Mac, hace que nos quedemos a oscuras a la espera de “The Blackout, Part 2: Mock Debate”. El final de la primera temporada de “The Newsroom” está por llegar…

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