Arrow (4x13) Sins of the Father: El final (de los DJs) de la Liga de los Asesinos

Todo comenzó cuando Robert Queen apretó el gatillo delante de su hijo como parte de un sacrificio final. Si algo nos reveló Tierra-2 en “The Flash” es que la leyenda de Green Arrow estaba condenada a ese momento tras el naufragio que servía de prólogo. Si Oliver Queen no hubiera sobrevivido, su padre habría tomado la senda de la redención y la justicia para honorarlo. Por el contrario, fue Robert aquel que decidió ofrendar su propia vida para garantizar el futuro de su hijo, como si el acto formara parte de una ceremonia y ritual con la mismísima muerte. Y ahí el hijo, Oliver, trató de llevar a cabo la última voluntad de su padre aunque purgar Star(ling) City le transformó y le condujo hacia una senda más luminosa. Esa lista negra acabó siendo el inició de otra causa mayor. El justiciero terminó siendo un héroe protector. “Arrow” ha tratado siempre sobre el bien y el mal y la posibilidad de cambiar y moldear la voluntad dictada respecto a los progenitores. El germen dramático de la serie siempre ha sido la familia y “Sins of the Father”, decimotercer episodio de la cuarta temporada del show de The CW, utiliza todo ese discurso para resolver los conflictos paternales existentes en todo el reparto. Previamente, Laurel y Quentin resolvieron sus diferencias e incluso pudiéramos decir que Thea halló un equilibrio para lidiar con un padre como Malcolm Merlyn. Pero, ¿hasta dónde está dispuesto a llegar éste por salvar la vida de su hija? Nyssa al Ghul tiene en su posesión el Loto, un elixir capaz de salvar la vida de Thea y concluir con su sed de sangre. Pero todo tiene un precio… Repasemos “Sins of the Father”. 

El dilema llega a Star(ling) City y los protagonistas van a ser sometidos un duro dilema para evitar un baño de sangre en la ciudad que protegen. Malcolm Merlyn va a revelar que sabe todo sobre Oliver Queen, incluyendo la existencia de su hijo secreto. La cuestión sería saber qué elegiría Green Arrow si Damien Darhk diera a elegir al héroe entre la vida de su hijo y completar el plan para ‘reiniciar’ la ciudad que salvaguarda. Aunque el discurso de Al Sa-Her es certero la duda sería conocer las auténticas intenciones de Nyssa al Ghul si recupera el poder de La Liga de los Asesinos. ¿Seguiría los pasos de su padre? ¿Se convertiría en ese Ra's al Ghul que ella misma rechazaba? Merlyn tampoco ha sido un ejemplo para Thea, utilizándola para su beneficio personal dentro de una partida de ajedrez planificada por un sociópata. Amén de su colaboración con Vandal Savage. Además, ¿transformó la organización liderada por la Cabeza del Demonio en una ONG para salvar al mundo de la guerra y el hambre… o qué? En realidad, todo consiste en la fe de que las personas puedan cambiar o categóricamente declinar tal posibilidad. Los casos de Felicity u Oliver pueden ser la excepción a la regla y precisamente ambos van a tener que lidiar entre la diplomacia, las pruebas de fe y las más terribles decisiones para seguir en la luz y separarse definitivamente de las tinieblas. La aparición del padre de Felicity, asimismo, amplía el conflicto del personaje y no hay nada como un consejo materno para que Overwatch decida medir los supuestos nuevos pasos de su padre criminal milimétricamente, como si fuera un bebé aprendiendo a caminar… ¿Tiene Calculator una doble agenda para contactar con su hija al ser ésta la CEO de Directora ejecutiva de Palmer Technologies? ¿Podrá fiarse Felicity de él? No hay nada que una prueba para conocer al detalle esas intenciones y Felicity descubrirá que su padre trataba de robar la tecnología que estaba desarrollando su empresa. Finalmente, la hacker ratificará su sendero luminoso y evolución entregando a su padre criminal a la justicia. Sabemos que continuará.

“Sins of the Father” nos va a mostrar a un Oliver dividido entre las acciones de Malcolm Merlyn y Nyssa al Ghul, que amenazan con matar a inocentes en su guerra en las calles de Star(ling) City. ¿Servirá la diplomacia? ¿Tendrá que matar de nuevo Oliver para frenar a su ‘esposa’ y al padre biológico de su hermana? ¿Les dará tiempo a salvar la vida de Thea en ese complicado proceso? ¿No parecen Laurel y Diggle un ángel y un demonio hablando al oído de Oliver? Para responder a esas preguntas basta con dirigirse al pasado oculto de Oliver Queen y aquello que sucedió en Lian Yu. Siempre hay opciones, no todo tiene que ser blanco y negro… aunque en el caso de la muerte del hermano de Taiana desconocemos hasta qué punto tenía otra salida Oliver. La tensión entre ambos es evidente y Oliver quiere utilizar esa piedra ‘mágica’ para negociar la salida de ambos de la prisión en la que les tiene encerrados Baron Reiter. Taiana decide operar por su cuenta y su jugada le sale mal, topándose con el poder de Reiter para hacerse con aquello que considera suyo y equiparando su destino al de aquel que asesinó a su hermano. Por su parte, Baron Reiter confirma que era la pieza que le faltaba a su mapa para hallar aquello que está buscando en Lian Yu. Y sabemos que Oliver Queen es la pieza central de ese misticismo que está oculto en las profundidades de la isla. Es evidente que Oliver ha aprendido de sus errores del pasado aunque Nyssa al Ghul y Malcolm Merlyn no le van a poner nada fácil salvar a la vida de su hermana. La diplomacia y una resolución pacífica acaban en un derramamiento de sangre engendrando un problema mayor a ese conflicto. Oliver tendrá que ‘encerrar’ de nuevo a Nyssa y seducir a Malcolm para que rete a un duelo a muerte a la hija de Ra's al Ghul y, así, hacerse con el elixir y Loto. Oliver revelará su jugada utilizando su ‘matrimonio’ con Nyssa para librar su batalla, siendo coherente a su nueva filosofía vital y existencial no matando a Merlyn sino cortando la mano donde tiene ese anillo del que no se quería separar…

“Sins of the Father” es un capítulo muy sólido que se ve favorecido por la mecánica dramática de la serie y que tampoco desentona en equilibrar la acción con el desarrollo argumental de los personajes. Tras la nueva resurrección de Thea, las dudas pueden ser otras respecto al futuro del show, dejando claro que los productores y escritores desean utilizar la presente temporada para todo un Señor Borrón y Cuenta Nueva. Después de liquidar al Escuadrón Suicida, a Amanda Waller y finiquitar A.R.G.U.S., (los DJ de) la Liga de los Asesinos llegan a su fin con la liberación completa de Nyssa al Ghul y la disolución de esa organización y prisión donde fue encerrada hasta este mismo momento. Ver ese anillo derretirse, que representa todo lo malo que engendraba su padre, es la perfecta expiación de su personaje y la revelación de que Merlyn era un hipócrita que estaba bajo el mismo hechizo que todo aquel que lo poseyó. ¡Ni que fuera el Anillo Único! Posiblemente los escritores quieran lanzar un guiño de que el poder corrompe y por qué Nyssa declina la opción de transformar la Liga de los Asesinos en algo útil para combatir a otras organizaciones peligrosas como H.I.V.E. o Shadowspire. El mero hecho de poseer ese anillo hubiera oscurecido sus luminosas intenciones y en la reacción de Merlyn vemos el precio de estar bajo el yugo de tal maldición. ¿Están en peligro los seres queridos de Oliver? ¿Está William en peligro? En este punto no sabemos cuáles son los pensamientos de (re)utilizar a los personajes que interpretan John Barrowman y Katrina Law. En el caso de Merlyn una colaboración con Damien Darhk pudiera dar sentido al arco argumental del final de temporada… Pero en el caso de Nyssa puede que sea el fin. Entendemos que recuperar a Sara Lance será una de sus prioridades —apareciendo y siendo reciclada en “Legends of Tomorrow”— o, por el contrario, acabará en el tintero como vimos con personajes como Helena Bertinelli o Sin. O tal vez, como en los anteriores y citados casos, el final de su arco argumental haya sido escrito aquí más allá de la futura mención y/o recuerdo. La pregunta, no obstante, pudiera ser otra: ¿y ahora qué? 

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