“American Horror Story” entra en su recta final y deja
sensaciones contrapuestas. Por un lado su acumulación de clichés provoca que
ese tránsito entre terrenos que abarcan desde “El sexto sentido” hasta “The Amityville
Horror” nos deje cierta sensación de tomadura de
pelo o provocación catódica transitoria. Pero por otra parte, existe un germen
interesante en la vida catastrófica de esos seres que se encuentran en una casa
maléfica sin salida como catarsis a sus pecados anteriores. Si en “Lost”
había una isla por medio en “American Horror Story” una casa que podría
ser el purgatorio para las almas (vivas y muertas) arrepentidas. El objetivo de Ryan Murphy parece ser dejarnos atrapados como los fantasmas que moran la
casa asesina. “Smoldering Children”, décimo episodio de la primera temporada,
llega para desvelarnos mentiras que considerábamos verdades anteriores.
1994. Constance, Larry, Addy y
Tate se encuentran reunidos como una familia feliz pero Tate no
soporta más la falsa. Desconoce que Constance asesinó a sangre fría y a
punta de pistola a su padre… aunque cree que le abandonó cuando tenía seis años.
Sabe que su madre mandó a Larry asesinar a su hermano Beau y que la mujer e hija de Larry
se quemaron vivas por culpa de su infidelidad con Constance. Con
semejante panorama y drogas por medio Tate decide explotar sus dones y
se persona, antes de cometer la matanza en su instituto, en la oficina de Larry
para prenderle fuego con gasolina. Como podemos comprobar Larry engañó
completamente a Ben cuando se conocieron aunque el desprecio de Constance
actual nos puede dar una idea de lo que ocurrió cuando Tate murió en la
casa, después de la matanza que cometió, como vimos en episodios previos. Puede
que esa mentira encubierta sea necesaria para acometer los giros que estamos
presenciado en la presente temporada aunque puede quedar cierta sensación de
burla.
¿ Estamos algunos quemados como Larry? |
El motor del episodio son los
sentimientos y relación entre Larry y Constance. Larry
desea que Constance reconozca que le amó en el pasado y el asesinato
reciente de Travis pone en la mirilla de la policía a su amante. Lo que
está claro es que Constance ha tenido una vida trágica y criminal. Mató
a sangre fría a su marido y a Moira. A la segunda la enterró en el
jardín y al primero se lo dio de comer a los perros para así fingir la
desaparición y huida de ambos. Después, tuvo la relación con Larry que
llevó a su mujer e hija a suicidarse quemándose vivas. Utilizó a Larry
para dar muerte a su hijo deforme Beau fingiendo causas naturales. Su
hijo Tate fue un asesino en serie y murió asesinado en su propia casa y,
finalmente, Addy muere en un accidente. Para colmo ahora su novio es
asesinado… y la policía no es tonta. Como principal sospechosa y con el rencor
de Larry por inculparla se ve contra las cuerdas… por primera vez por un
crimen que ni siquiera ha cometido. Larry, finalmente, es convencido por
su propia mujer fantasmal e hija al recoger la ropa de Travis del
sótano. Todo nos hace ver que la catarsis y redención de Larry debe ser
de él… y no de Constance por lo que finalmente se entrega como autor del
crimen. Constance acude a despedirse pero, como villana de la serie, no
reconoce su amor en ningún momento de su relación por él. ¿Venganza próxima con as en
la manga?
Vivien va a ser puesta en libertad en breve pero no quiere volver a esa casa
maléfica. Ben ahora sabe que no mintió y es hora de desenmascarar al
ocupante de ese traje de goma. Mientras tanto empiezan a aparecer moscas en
casa y puede que haya en una plaga. Un exterminador encuentra una
sorpresa en el sótano pero es ‘silenciado’ por Tate. Y es que “Smoldering
Children” tiene un nuevo giro repetido en esta temporada. Violet
lleva sin aparecer a clase desde hace quince días y al decimosexto entrará un
juzgado juvenil por medio. Ben intenta convencer a su hija pero Tate
quiere que tanto Violet como nosotros no descubramos algo. Al ver que Ben
se encuentra contactando con centros donde pueda estudiar Tate decide
actuar y se enfunda en el traje de goma… La pelea con Ben es
cuasi-a-muerte y Ben desenmascara a Tate aunque queda inconsciente
y con la advertencia del chico de que no le mata por su hija… Tate
ofrece a Violet tomar pastillas para morir juntos pero la hija de Vivien
decide escapar y se da cuenta que se encuentra encerrada y atrapada en la casa.
Sí, Tate enseña a Violet lo que ha descubierto el exterminador… y
no es otra cosa que su propio cuerpo muerto. El intento de suicidio de “Piggy
Piggy” de Violet llegó a buen puerto y Tate
no pudo evitarlo. La pregunta, es si nosotros podremos evitar la respuesta.
Nooooooooooooooooooooooooooooooo "Los otros" nooooooooooooooooooooooooooo
ResponderEliminarNo miente a Lost!!! Es pecado!!! (a pesar de su final) jajajaja.
Hola Namusi!
EliminarEs muy 'Lost' la serie con el purgatorio familiar. Incluso tienen perro!! Que es el único superviviente, además. ¡Igual que LOST!