“Everything Is Broken” llega como un trampolín que va a lanzar la tercera temporada de “True Blood” hacía un desenlace ¿atronador? Alan Ball confirma su condición para emancipar al género gracias a un absoluto poder de tramas y personajes aparentemente secundarios. Sookie y Bill han quedado como simples caricaturas del típico y noño romance de vampiro y adolescente para dar paso a aventuras sobrenaturales mayores. Como decían en “A dos metros bajo tierra”, con una de las mejores creaciones de Rico: «Es una pena que la entierren» y ahora mismo es una pena que tenga que lanzar tierra sobre personajes que se están comiendo a bocados a los protagonistas y estandartes de la serie.
Lafayette Reynolds y Jesus Velásquez (que no Vázquez) son pareja y tienen el visto bueno de su madre. El maquillaje le delata. ¡Dios también quiere a los mariquitas! Lafayette le besa el tigre a Jesus con amor y éste le pide el menú vegetariano con bacon. Cosas del amor. Como las de Jessica Hamby y Hoyt Fortenberry. Summer se va a acabar como el verano y esas horripilantes muñecas. Jessica conoce a Hoyt y viceversa. Ella no puede dejar de sacar sus colmillos y él de pensar en ella… así que ha decidido acabar en un infierno para olvidar todo. Culebrón imposible.
Romance y menú vegetariano con carne de postre... |
Lo de Jason Stackhouse y Crystal Norris no tiene nombre. ¡Vaya culebrón de verano! Malos tratos, prometido desde la infancia, familia, escopetas, puñetazos, secuestros, extorsiones, venganzas, mentiras, fuga, drogas y abandono. ¿Acabará en boda como marca la tradición? No se si sera lobezna o felina pero es obvio que oculta identidad sobrenatural ella o su familia.
Tara Thornton está hecha un lío y lo mejor en esos casos, en los que los amigos (y jefes) tienen cosas mejores que hacer, es ir a terapia de grupo como manda la tradición del manual del buen guionista. La rubia Holly Cleary es chica nueva y va a dar juego y brico-consejos.
Pero es momento de que haga acto de presencia viejas glorias de su pasado. Franklin Mott es la respuesta del destino para que Tara supere sus traumas. El Sr. Mott piensa que todavía Tara le ama pero ella piensa que es un psicópata violador entre otos improperios mayores. Tara vuelve a la carga con sus pesadillas existencialistas y se enfrenta a sus terrores. Es momento también para Jason de hacer frente a sus disparos en la cabeza y devolver el favor a Tara. ¿Le contará la verdad? Desde luego su paso por la Hermandad del Sol le ha hecho un chico-listo y con balas… de madera. ¡Adiós, definitivamente, Sr. Mott!
¡Bienvenido a EEUU vampiro! |
Eric Northman salve volar… de una escena del crimen… para meterse en otra. El chico rubiales milenario ha clavado una estada en el ‘amante bandido’ del mismísimo Russell Edgington y obviamente habrá consecuencias. Una rubia vampira televisiva, Nan Flanagan, escoltada por extras de una versión alternativa de “La guerra de las galaxias” y “Robocop”. Vamos, van de SWAT… para que nos entendamos. Pero parece que la Flanagan es la reina del Imperio. La American Vampire League, la AVL, ha tomado cartas en el asunto y, de momento, le van a dar plata de ha buena. ¡Gritemos! Sí, gritemos aunque no pase nada. Es parte del cliché.
Mi nominado es Russell Edgington |
Russell Edgington confirma que lo poco que amaba en esta vida, aparte de robar antigüedades y dar chupitos de su sangre a hombres lobo, era su Talbot, su empalado y amoroso Talbot. La autoridad exige explicaciones por webcam y Eric puede dárselas. El chico les revela todo su milenio y sus acusaciones de traición en contra del Rey de Mississippi. Versión reducida of course. Obviamente hay deliberación frente a la declaración porque en America es tradición. Russell Edgington ha hecho una notable donación para borrar huellas. Para colmo el veredicto es que nada ha pasado pero sí ha pasado. Vamos, que la AVL deja en bragas vikingas al rubiales y encima le exige los colmillos del maléfico vampiro.
Russell Edgington ha encontrado el recipiente para mantener a salvo las ‘cenizas’ de su amado Talbot. El momento es delirante ya que ha metido sus entrañas en una urna acristalada… aunque no encontró sus ojos para que pudiera ver y descojonarnos hasta el amanecer. Después del momentazo freak el Rey de Mississippi se confirma como villano condenado a erigirse como la freakada de la serie.
Russell Edgington ha encontrado el recipiente para mantener a salvo las ‘cenizas’ de su amado Talbot. El momento es delirante ya que ha metido sus entrañas en una urna acristalada… aunque no encontró sus ojos para que pudiera ver y descojonarnos hasta el amanecer. Después del momentazo freak el Rey de Mississippi se confirma como villano condenado a erigirse como la freakada de la serie.
El final es un auténtico despiece y despiporre de un auténtico y maléfico villano. El Rey aparece delante de América para presentar su candidatura a despreciable tri-milenario. Contarles algún detalle de su aparición televisiva sería hacerles un flaco favor y robarles su sangre. Así que véanlo... antes de que llegue la chica del tiempo y los títulos de crédito.
Jajaja. Creo que sí Rajoy o ZP hicieran esa presentación en el telediario de la noche, el de máxima audiencia, tendrían los votos asegurados de toda la población.
ResponderEliminarLes faltarían presentadores candidatos...
ResponderEliminarPero como me gusta esta serie. En cuanto a los secundarios completamente dea cuerdo, en especial Lafayet. eso sí Sooki al menos vale como personaje vehicular, porque el vampiro es el capitán soso!
ResponderEliminarNo por Dios, creyendo que esto iba a mejorar según avanzara la temporada. ¡Qué ilusa! Los malos empiezan a ñoñear, los buenos se les sale el azúcar por los poros, y las escenitas subidas de tono, tienen tonalidad rosa.
ResponderEliminarDe este capítulo salvo a la madre de Lafayette, el resto nominados.
y los mundo de Yupi donde se supone que salió o que procede Sookie, ...., sin comentarios.
Aún le daré un margen de confianza, el malo malísimo King espero que anime un poco esta temporada.
B. STACKHOUSE
Sra. Stackhouse, esperaba su comentario y aportación como sangre de mayo.
ResponderEliminarLa serie está optando por ser una parodia de sí misma. Ahora toca romance por doquier, con momentos de camisas blancas y ninfas resplandecientes, de besos cada diez minutos y de tragedia freak. El King por fin muestra cartas pero realmente es el villano que se descojona de todo lo que rodea.
No te preocupes que todo va a acabar seguramente fatal y de tonalidades oscuras a juego con las bragas de Lafayette.
Efectivamente BE Sookie y sus poderes dan una vuelta de tuerca pero a la pobre le falta galán a juego... porque Bill es un vampiro nostálgico y existencialista con rollo emo en plan Louis de Pointe du Lac. ¡Queremos un Lestat ya!
En los libros Sookie, por lo visto, es más zorrona y se acuesta con todos.
Zorrona. Bonita palabra. Rima con chupasangres.
ResponderEliminarZorrona, como palabra honorífica de "Melrose Place" y renegada de la RAE, rima con todo.
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