jueves, 5 de agosto de 2010

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Series de mi infancia: El equipo A

La página de Yelmo Cines de Facebook organizaba un concurso a rebufo del estreno del filme “El equipo A”, adaptación al celuloide de la ‘mítica’ serie de los ochenta. El concurso, donde el premio eran 5 packs compuestos de camiseta, balón de fútbol y caja de herramientas, rezaba: 
“CONCURSO OFERTA DE EMPLEO PARA EL EQUIPO A”, dinos a qué personaje de ficción, real, dibujo animado, famoso, familiar... crees que debería formar parte de ‘El Equipo A’ por alguna de sus habilidades. Los 5 más originales ganarán!!!
Yo contesté rápido:
«¡Carmen de Mairena sin dudarlo! Fuma puros como Hannibal, está más fuertota que M.A, más loca y friki que Murdock y liga más y está más ‘buenorra’ que Fénix.
De hecho podía jubilar al Equipo A si subiese a un escenario a interpretar La Bella Dorita. Darían la amnistía inmediata a Hannibal y sus hombres para que dejara de cantar y enseñar lo que enseña. Eso sí, en vez de ‘Me encanta que los planes salgan bien’ aportaría un ligero cambio: ‘Me encanta que los pepinos salgan bien’. Vamos, imprescindible en todo equipo que se precie y mucho más si quiere dejar al público con cara de A».
No sé, en este tipo de concursos nunca gano… Un Guiyelmo Cinésfilo eligió a los ganadores entre comida de vocales, faltas del ortografía, mayúsculas impactantes e insultantes y auto-risas finales o insertales. La próxima vez haré un homenaje a todas ellas para ver si se nota cierta ironía. Los ganadores fueron Kiko y Coto Matamoros  con cierta tendencia al consumo de sustancias ilegales, Chuck Norris, una madre para que les haga la comida y la maleta, Torrente y Ana Obregón. Vamos, que al no regalar explosivos habituales en la serie el concurso no merecía la pena… pero es que a uno ni le dan una palmadita en el facebook. ¡Qué cutre! Tampoco me tocaron las entradas para el preestreno de “Origen” que daban por tener tarjeta de los Yelmo. Vamos, un auténtico vía crucis que hará que Cinesa y UGC Ciné Cité se conviertan en nuevos amigos. 


Pero la cuestión es que esa misma tarde acabé en el salón de mi hogar, un territorio desconocido que podría dar para varias entradas de este bastardo blog. Me encontré encendiendo la televisión y explorando lo que ofrecía el videclub gratuito de Ono. La verdad es que es un invento ver películas y series de esta manera… totalmente  gratuita y a calidad más digna que un megavideo, por ejemplo. Allí se encontraban episodios de “El equipo A”. Tampoco entiendo el porqué me tragué uno de ellos cuando quería mantener cierta distancia a aquellas series que rellenaron mi infancia.  ¿Y qué recuerdos tengo de esa serie con sintonía para el recuerdo? Precisamente tengo un ligero trauma con su sintonía.
[Lo que voy a contar ahora no tiene ninguna gracia… pero ninguna… ¡No se rían] 
En el barrio de mi infancia había un niño retrasado que vivía en mi mismo portal. A mí me daba mucha pena no por su condición sino porque llevaba los mocos siempre pegados y esparcidos por toda su cara. Es más, al día siguiente aparecía con una nueva capa de mocos encima de la anterior. Yo juraría que su madre le limpiaba pero deberían reproducirse según le soltaban y bajaba a la calle a jugar. Creo que este niño reinventó el 3D antes que James Cameron y muchas veces me pregunto qué habrá pasado con él. Seguramente ocupe un cargo político o sea empresario. 


A lo que iba. El niño retrasado corría y corría y entonaba una canción… Sí, la de la sintonía de “El equipo A”. No la tarareaba… ¡la destrozaba! Una y otra vez, una y otra vez. Yo intenté inculcarle otra sintonía como la de “El coche fantástico” pero resultó imposible. Todavía recuerdo a mis torturados tímpanos verse aterrorizados por semejante pesadilla.
Mientras tanto, mis vecinos habían visto  “El equipo A-Nal” y no me invitaron al estreno local del vídeo-comunitario. Eso sí, me la contaron y spoilearon. “El equipo A-Nal” obviamente y como podrán adivinar es la versión X de “El equipo A” y acaba con una macro-orgía final, muy habitual en ese tipo de cine y en esa época. Ahhhh, qué picardía que tiene los traductores. Yo intenté ver esa película pero es bastante difícil de encontrar y me gustaría saber si al final dicen aquello de ‘Me encanta que los planes salgan bien’… aunque lo que saldría bien sería otra cosa. Para colmo y en mi búsqueda ‘a-nal’ encontré que Ozores parodió la serie en “El Equipo Aahhgg”  y “Ekipo Ja” de Juan Muñoz alcanzó cuotas de muerte cerebral infinitas.

Al pensar ahora en esa serie sólo me vienen a la cabeza mocos y una película porno.


Viendo el episodio nunca comprendí el encanto que le dábamos a cosas que ahora vistas son puro cartón-piedra. Aunque siempre queda el anecdotario. No sé si me imagino a James Coburn como Hannibal y ver aquel que interpretó  “Desayuno con diamantes” quedó relegado al cultismo infantil-pop. Si George Peppard tenía tan mala leche y esa pelea que cuentan que tuvo con Mr. T por temas de popularidad, salario y cierto racismo. También la expulsión de Melinda Culea en esa ‘serie de machos’ y el que recuerdo como mejor episodio gayer de la historia de los ochenta: aquel en el que apareció Boy George. Leyenda, ficción y cierta nostalgia de una época que acabó... aunque siempre nos quede el revival y el videoclub gratuito de Ono.
 

Review del episodio “Como buenos vecinos”. Cuarta Temporada. Episodio nº 10.

Stevi Faith tiene una sombra de ojos horrible. Con un azul, verde y violeta no pega ese amarillo. Bueno, no pega nada… Parece una doble de la Gallina Caponata… pero como estamos en los ochenta parece valer cualquier irreverencia pop. Ella está en el estudio pero sabe ni hacer playback ni se cree su papel. ¿Existió Stevi Faith? La búsqueda en rateyoumusic no dio resultados visibles. El papel lo interpreta Valerie Stevenson y únicamente actuó en otra serie titulada “Dreams” con una única temporada… Y de ahí nada más.


Oh, ese montaje de clip de los ochenta tiene ya tan poco encanto… como sacado… ¿de otra época?  A la pobre Stevi Faith le van a salir herpes hasta en la sombra de ojos. Tiene amenazas y el dinero de recaudación de su próximo concierto quiere ir destinado al tercer mundo… pero hay alguien que no quiere que llegue a su benéfico destino. Dos afroamericanos, a punta de pistola intentan robar las cintas de la grabación.  
[No sé si hacer una cita a la SGAE, bueno mejor no].
M.A., al intentar dar caza a los delincuentes, destroza un piano con su fragoneta negra y hace un chiste: «Siempre he querido tocar el piano». Al parecer hay diferencias sobre el reparto económico de la recaudación del concierto de Stevi. Triana del Norte vs. Triana del Sur. No es que la banda de rock andaluz esté dividida en dos escisiones y se tengan declarada la guerra… ¡“El equipo A” se ha inventado un país en África! Bueno, si sólo fuese lo único...(*mierda)
[*Fe de erratas: el país es Terrania pero juraría que dicen Triana.]
El máster de grabación es sagrado y no puede salir de allí… y es que sin máster no hay nuevo disco. 


< Unos pantalones amarillos con rayas negras y una camisa morada. A Stevi le camuflan como vieja pero sin arrugas. El plan es llevarla a un lugar discreto y permanecer en paradero desconocido junto con el Equipo A hasta el concierto benéfico, alejada de sus perseguidores. La Srta. Faith está encantada de haber contratado al Equipo A… su karma le parece fuerte y se siente atraída por Fénix aunque no por su peinado y comparte todos los dichos de Murdock.
Pese a llevarla a un vecindario de lo más vulgar hay unos nuevos vecinos que intimidan con sus motos a los perros y molestan a las niñas (por supuesto rubias, no salgamos del cliché).
Otras noticias: Murdock y M.A. dormirán juntos y aparte del homenaje a Gran Hermano, por aquello de la convivencia, aparece uno a “Queer as folk”. Los vecinos, muy americanos ellos y recibiendo a los nuevos vecinos con armas en la mano, al ver a tanto macho y con tanta diversidad piensan que son gays. ¡Qué va! El Equipo A es muy machuno aunque un tanto descarriado y disperso: Hannibal no se quita esos guantes negros ni para untar las tostadas en el desayuno, Fénix era metrosexual cuando no existía lo metrosexual y Murdock y M.A. eran pareja fijo (al menos discutían como una y ya se sabe aquello que tiene el hombre negro y que uno tiene que estar loco...para...). Bueno, M.A. tenía miedo de ‘volar’ aunque siempre le tocaba recibir  (la  medicina, claro) y  Murdock era la loca del grupo. Vamos, pareja gayer al canto.



Los nuevos vecinos lucen armas y uno de los macarras (gays también y adictos al cuero y chincheta) es Robert Pastorelli. Es un actor conocido de vista… de esos cuya cara siempre suena aunque no tuvo ningún papel importante. Murió de sobredosis hace seis años y su último papel fue en “Be Cool”. Descanse en paz, aunque ya este papel profetizaba su final.
Obviamente El Equipo A no puede dejar que dos macarras del tres al cuarto vayan con sus pistolas del lejano oeste pegando tiros a perros asustadizos de niñas rubias… «Esa es la actitud que necesitábamos en este barrio». Desde luego Charlton Heston estaría feliz. Bueno, los villanos y macarras estaban ‘camuflados’ para no llamar demasiado la atención esperando un CARGAMENTO para la mafia colombiana. Uy, COCAÍNA valorada en dos millones. Pero al parecer estos chicos quieren que les descubran y que alguien llame a la policía porque a patanes no les gana nadie. Un inciso: el ex-capitán de la patrulla de vecinos del barrio puede que aspire al título. El pobre ha sido relegado a un segundo plano por la intervención de Hannibal y sus hombres. 
¿Quién será el dueño del BARRIO? ¿Juarez, el mafioso, o Hannibal, el fetichista experto en planes y fumar puros? La Faith está más loca que Murdock y estos chicos se han metido en un buen lío. Da lo mismo que se vayan a un barrio residencial porque los problemas parecen perseguirlos. Y es que este Equipo A parece una parodia de El Equipo A


El plan consiste en localizar el alijo y los barrios residenciales quedan cerca de aeropuertos utilizados por lo narcos sacados de Colombia. Murdock se siente intrigado por el polvo de Colombia y podría explicar el objeto de su locura. Decide optar por la vía terrorista y aniquila al alijo… porque recuerden que en esta serie no muere nadie, salvo los espectadores indignados. 
Los medios tienen una foto de la Faith. Sí, una única foto porque es la única que ponen. Para ser una artista de tanto éxito le falta un buen book. Los medios la pasan una y otra vez… y anuncian que ha sido secuestrada por El Equipo A, poniendo doble precio a su cabeza. El gordo-cabrón o sea ex-capitán de la patrulla de vecinos decide vengarse de El Equipo A. Está claro quién es el villano del episodio y no es otro que el productor. ¡Villano! Aunque la Faith tiene claro que ella es la imagen de una gran empresa y que dejó de ser esa paleta que cantaba en bares de carretera hasta que le descubrieron. Y aquel que le descubrió ahora quiere los intereses.  El dinero tiene que quedarse donde tiene que estar. Nada de ayudar al tercer mundo y a unos niños negros panzudos que no saben jugar a la Play Station. El karma es el karma. No falta esa secuencia de montaje con la preparación antes de la ‘gran’ batalla, con improvisadas latas de judías verdes convertidas en bazookas flamígeros impregnados en pólvora,  el cliché del coche volando, esos planos cenitales y contrapicados en cámara lenta, explosiones, puñetazos, miles de balas y nadie herido. 
Me encanta que los planes salgan bien y que esos pequeños niños desnutridos se sigan muriendo de hambre. ¿? Porque visto lo visto... si El Equipo A ni Michael Jackson no pudieron hacer nada… ¿quién podrá?

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