Arrow (5x19) Dangerous Liaisons: Amistades peligrosas

Tras ese prolongado descanso, que han marcado las series de The CW dedicadas a la superheróica, la llegada de “Arrow” debería servir para confirmar las buenas sensaciones de una sólida temporada. “Dangerous Liaisons”, decimonoveno episodio de la quinta entrega del espectáculo dedicado a Fecha Verde, retoma la idea de ver a Oliver Queen desligado de Green Arrow, como si la serie pudiera ser ‘algo más’ que ese habitual y recurrente juego fetichista de disfraces y máscaras. Ese nuevo cuestionamiento de la propuesta viene determinado por el conflicto de nuestro antihéroe: su cruzada no era épica sino una coartada para poder paliar su sed de sangre desde que descubrió (?) en Lian Yu el placer (?) que sentía al matar. Ese tejido oscuro y grotesco ha sido la tenebrosidad atada al alma de Oliver Queen y entendemos que siendo el alcalde de Star City ha obtenido las respuestas que esperaba. El problema es que todos nos encontramos aferrados al pasado y Oliver Queen no ha sido una excepción. Prometheus ha llegado para cerrar ese ciclo existencial y vital del protagonista y al personaje psicópata con una calculada agenda se han sumado enemigos como Talia al Ghul o Konstantin Kovar. No obstante, todo da la impresión de ser un hábil macguffin de los escritores en lo que no es necesaria la presencia física de los villanos sino el interés es explorar los conflictos latentes en los protagonistas. ¿Las buenas acciones pueden surgir en gente que ha sido mala? ¿Los malos actos aparecen también en las buenas personas? Repasemos el capítulo

Es obvio que en “Dangerous Liaisons” vamos presenciar hasta dónde pueden llegar los personajes para resolver ese problema personificado en la figura de Adrian Chase / Prometheus. Felicity siempre ha sido objeto de una lenta transformación desde que atravesó un límite en una imposible decisión respecto a Monument Point. Mucho se rumoreaba de cómo tal acto transformaría a Felicity y la llegada de Rory Regan acentuó esos conflictos y mecánicas. Helix ha sido esa piedra angular alrededor de la hacker y en el episodio vamos a tener a viejos conocidos como A.R.G.U.S. y la presencia de  Lyla Michaels. La idea es que tanto Oliver como Diggle tengan que hacer frente a las dudosas decisiones de las mujeres que aman… o han amado. Chase sigue desparecido y “Arrow” se burla de las típicas tramas de retorcidos asesinos en serie tendiendo trampas a sus captores. El precio a pagar es destruir lo vintage y lo clásico al golpe de GAME OVER y el espectáculo de The CW se siente en su (nueva) salsa haciendo crecer a los nuevos integrantes del Team Arrow. En primer lugar Curtis pone las citas y el maquillaje (junto a sus nuevos gadgets) mientras que Rene Ramirez, en segundo plano, se amolda a esa capa melodramática con la ayuda de Quentin Lance y el reencuentro con su hija. Pese a todo, la cuestión es que tengamos cierta sorna política como ha marcado la tradición de esta temporada dentro de los muros del ayuntamiento de Star City mientras que, al mismo tiempo, Kojo Sledgehammer (¿Alena?) se enmarca como la villana episódica. Helix está dispuesta a todo para llegar a un objetivo que conoceremos en la recta final de “Dangerous Liaisons” y Felicity, además, se entrega a la causa debido a que la recompensa será disponer de la tecnología que dé con el paradero de Chase. ¿Dónde hay que firmar para ponerse ropa oscura y afilada y gótica sombra de ojos? Lo hemos visto ya en esta temporada pero esta trama trata de ser el clímax antes de la crónica de una asimilación anunciada por parte de Felicity. ¿O se pensaban que Oliver iba a ser el único en enfrentarse a sus demonios del pasado? 

Kojo Sledgehammer desea hacerse con el acceso a la red de A.R.G.U.S. y está dispuesta a asesinar impunemente para conseguir su meta. En realidad, se puede decir que los agentes de la organización secreta que lidera Lyla Michaels y precisamente la cuestión es que sus estrategias y accesiones no difieran demasiado de las llevadas a cabo por la pérfida y maquiavélica Amanda Waller. Seguramente DC Comics fulminó su personaje en pos del lanzamiento del bodrio de “Escuadrón Suicida” aunque no se puede descartar que alguien muerte en el arrowverse regrese al mundo de los vivos. Ya sea en el multiverso, Pozo de Lázaro, guionista en apuros para lanzar un cliffhanger invernal o no… La situación es que Alena desea liberar a Cayden James, el mayor pirata informático del mundo… del que el mundo no ha oído hablar por lo bueno que era. A.R.G.U.S. lo tiene preso y Kojo Sledgehammer, más que fan, parece una amante despechada enfurecida que hará todo aquello que esté en su mano para recuperar al amor de su vida. Felicity va a hacer un pacto con el demonio aka Helix y, sobre todo ese material, tenemos un enfrentamiento de nuestro Team Arrow (sin Green Arrow y con Oliver Queen con esa aséptica máscara negra) con ese grupo de hackers que ahora tiene en plantilla a un nutrido número de mercenarios. Todos los secretos van a ser expuestos y la idea es que veamos que las acciones de Lyla y Felicity no difieren demasiado. Tal cuestión provocará un conflicto que no se quedará en este episodio porque en “Underneath” (5x20) seguiremos informando de tal batalla moral. Helix se hará con Cayden James y no sabemos si nos están presentando al villano de la sexta temporada de “Arrow” o no es más que uno de los muchos macguffins utilizados. Dicen que Cayden James es tan peligroso como arma nuclear en libertad y, al parecer, a Felicity le encanta desplegar misiles radioactivos a lo largo y ancho del planeta… Vayamos a la conclusión. Helix volará en solitario y abandonará a Felicity (por motivos de seguridad debido a su implicación emocional con el Team Arrow) mientras que regalarán a su miembro honorífico aquello que ansiaba. Lo prometido es deuda… e irónicamente “Dangerous Liaisons” finaliza con uno de los recurrentes cliffhangers de la serie a modo de golpe de efecto y constatación de ese juego de espejos y macguffins. Oliver y Felicity no tenían que salir muy lejos de la Arrowcueva porque Chase está con ellos… aunque sigamos sin ver su presencia sino el explosivo que les dejó en el panel de control donde gestionaban esta tecnología revolucionaria y biométrica que poco o nada importa y que costó la aparición de un conflicto sin resolver por parte de ese par de mujeres. Todo explota… y no en el sentido literal. ¿O se pensaban que una serie que está manoseando la madurez no iba a amarrar sus dos arcos argumentales con un explosivo golpe de efecto?

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