“The Big Bang Theory” nació de la necesidad de dotar al mundo nerd de un universo globalizado y social. En extrapolar los mil y un lugares comunes de un género desvitalizado a golpe de referencias, personajes sin encanto y puesta en escena enclaustrada en el olvido. Aunque sea una mera y rutinaria aplicación de los mil y un conflictos, tramas y debates, generados en anteriores y muchas veces fallidas ocasiones, quedaba un poso que hacía que la serie de Chuck Lorre tuviera un lugar en un universo escasamente poblado. Por fin, el cosmos nerd tenía un espacio para gritar al mundo que su existencia tenía sentido, significado y humor a raudales. No nos vamos a reír de ellos, como dictaminaba el patrón anteriormente conocido, sino que sus aprietos podrían ser incluso mejores. El principal y el que daba sentido inicialmente a la serie se llamaba Penny. Ahora, en “The Desperation Emanation”, se retoma ese mismo patrón. ¡Quién no tenga novia el último!
Los dos grandes aciertos de “The Desperation Emanation”, quinto episodio de la cuarta temporada de “The Big Bang Theory”, son que Penny es apartada del camino de la soledad de Leonard y que Amy Farrah Fowler se convierte en ‘objeto adjunto’ de esa gran masa con irresistible poder gravitacional llamada Sheldon Cooper. Leonard se da cuenta que todos sus amigos tienen novia menos él. Es más, hasta Stuart, el dueño de la tienda de cómics que frecuentan los protagonistas, tiene una. La conoció en el Comic-Con, aquel lugar donde decir ‘Tengo una tienda de cómics’ es una forma de ligar. Hasta Raj se ha echado una novia sorda con tal de emparejarse. Poco importa si la compañía no es un 89% imperfecta, lo importante es ponerse esa ‘etiqueta social’ y cambiar el estado de facebook.
‘Leonard, eres mi mejor amigo, te conozco desde hace siete años y apenas puedo tolerar estar sentado en el mismo sofá contigo.’
Sheldon Cooper
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| Amistad incondicional... |
Ahora Sheldon recibe del destino y de su girlfriend llamada Amy un duro varapalo: tiene que conocer a su ‘suegra’. Si lo hace ya no podrá tachar el girl al girlfriend… siendo girlfriend. Semejante trauma es resuelto con una genial bajada de escaleras y conviene recordar que es el mejor filón de la serie. Sheldon está tan traumatizado como Leonard. Mientras uno quiero el otro no. Y es que eso de ‘estar adjuntado a otro objeto en un plano inclinado envuelto helicoidalmente alrededor de un eje’ puede ser la mayor jodienda del vil destino.
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| Camuflaje |
Situación desesperada: Leonard convoca el pacto de novias a Wolowitz. Cita sorpresa doble con una bestia rubia (igualita a Penny, vamos) experta en destrozar los testículos masculinos de cien maneras diferentes. Grosera-vaca-burra que puede dar juego sexual si está lo suficientemente borracha y que pretende que Leonard sea su acompañante a una boda que tiene la semana que viene… como y con barra libre. Leonard no quiere compartir su existencia con alguien al que apenas puede soportar… pero las reglas sociales muchas veces son impuestas. A situación desesperada, medidas desesperadas, ¿no?
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| Deshojando flores y capullos |
Sheldon hace todo lo posible para evitar a su ‘situación desesperada’ pero Amy forma parte de ese grupo de ‘muy cabronas nunca se rinden’ y encuentra, pese a su maquillaje y canción-estelar, al físico. Se descubre el pastel rápido: Amy tan sólo quiere que su madre crea que la relación con Sheldon siga los patrones sociales asiduos y residuales denominados por un común denominador ético. Novios a la vista de la suegra, amigos como siempre en realidad. No se modificará el estatus de chico/amigo/chica/amiga. De momento...
‘Encuentro la noción de amor romántico como una construcción cultural innecesaria que no agrega ningún valor a las relaciones humanas.’
Amy Farrah Fowler
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| Ha llegado el momento de hacer el amor a la vagina de su hija |
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