Especial Halloween: Programa Doble de Terror, Felipe y Letizia / La casa de cera

● Una comedia real y… ¿real?

‡ Declaración Oficial:

«No quisimos que 'Felipe y Letizia' fuera una parodia.»

Joaquín Oristrell

‡ Declaración No Oficial:

«Hace cien años e incluso menos todo responsable de  'Felipe y Letizia' estaría ante un pelotón de fusilamiento.»

Anónimo (y Monárquico)

Crónica Monárquica

‡ Versión alternativa si estuviéramos en-el ‘el-pasado’:

“¡Cómo está el Servicio! Y la Monarquía…”

Gracita Morales en el papel de Letizia Ortiz, José Luis López Vázquez interpretando a Felipe de Bourbon (digo de Borbón), Alfredo Landa y un chándal del Quemor diez tallas más grande en el papel de Felipe de Borbón, Andrés Pajares interpretando a Sofía de Grecia y con la aparición estrella y estelar de Fernando Esteso en el papel de Elena de Borbón.

Escribe y dirige Mariano Ozores

Comentario bastardo: causó menos risas, friquismo y polémica que “Felipe y Letizia” de Joaquín Oristrell.

Clavadita

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‡ Impresiones:

‘¿Vas a decir CCOO así, sólo las siglas?’ Le dice Leti a Urdaci. Y es que con tanta autocensura y no llamar a las cosas como son, rellenar huecos con pastel de boda en vez de cemento armado y querer hacer la versión monárquica de “Los padres de él” a Oristrell y Telecinco les ha salido un churro con corona real. Irreal como la vida misma, como meter a un Príncipe en una piscina con camiseta.

No me había reído tanto en tanto tiempo. Entre la música, las miradas, la foto que tira la Reina sin photoshop, el nuevo uniforme de la sirvienta y los golpes de kárate “Felipe y Letizia” empieza hardcore total. ‘Tu piso entero cabría en mi dormitorio’. Mis risas seguramente no. Nada podría retenerlas.

El Sr. Cuesta de asesor de la Reina, La Reina que es la mala de la serie y quiere fusilar a la ‘Lucinda’ pero finalmente es el hada de la ‘egre’. Los  bailes de salsa, los instantes músico-fantasiosos románticos, el fichero de The Queen, los títulos kitsch del tipo ‘Cena de amigos de Letizia; Diciembre 2002’ o  completan una fábula sobre una plebeya y divorciada donde triunfa el amor y el zumo de tomate.

Llegan los sueños y la música de cuento de hadas. Ella quiere tirarse con paracaídas y más de uno lanzaría con uno defectuoso a los responsables de semejante infamia cómica. El príncipe va con chándal de Adidas y polos Lacoste y el Rey viste un chándal de indigente del Decathlon y lee el ABC (¿sus anuncios de…?).

Yo he llorado mogollón. Pero mucho-mucho… de la risa, claro. Cuando dicen eso de ‘Nunca habíamos tenido una princesa en Valdebernardo’ me puse a llorar… de la risa.

Ese momento ‘coronita’ final en una secuencia de montaje con cámara lenta es el momento más divertido de la televisión española de este año. Yo he llorado como una ‘ma(g)dalena del Metadona’ enterita y toa’ porque me parece tan emocionante ver que “Felipe y Letizia” es lo que ansiamos y no llegaba. La comedia real sobre gente ¿real?

¿Comedia romántica...?

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†  Grandes frases:

‘Hay que pulsar siempre la tecla Siguiente, como en Windows’

 ‘Tengo curiosidad para ver cómo te mueves en ochenta metros cuadrados’

‘Esto va ser peor que Bagdad’.

‘Mucho peor, pero no te preocupes que yo llevo los mandos’. (¿Los de la Play Station?)

‘Esto es España, no Mónaco’

 ‘Tu madre es una blanda. Se le meten goles enseguida’

 ‘Yo no tocaría Internet’

Pues eso, que espero que no me ‘toquen’ ni me la ‘toquen’.

● ¡Me han ‘encerado’ hasta el chichi!

Jaume Collet-Serra tiene pulso para construir un artefacto de cera cuyos estímulos son una recta final competente y meramente visual. Detalles sobre detalles que se funden en una apoteosis que intenta buscar un hueco en un género finiquitado hace tiempo. Eleva la cámara mediante grúas, busca encuadres trabajados e intenta esculpir algo que sabe que está muerto. Un nulo, pésimo y disfuncional guión caracterizado por clichés y ropa pasada de moda destrozan la propuesta hasta niveles insospechados. Un slasher pasado por cera y Paris Hilton.

Heroínas y Women Secret

La historia de una franquicia pueblerina de Corporación Dermoestética y sus nuevos métodos de depilación brasileña podrían ser el reverso redneck de “A dos metros bajo tierra”. Tiene familia disfuncional, gritos enlatados, Marilyn Manson con máscara de cera y pepino, adolescentes chungos que beben cerveza con el dedo acusador, sustos que no asustan y el tedio como máximo común denominador. Mención especial para Paris Hilton que aparece en cinco secuencias para hacer una felación, ser objeto de una grabación amateur de índole sexual, enseñar la nueva colección de Women Secret y, al final después de tanto calentar, se la clavan.

Encerado y Depilador

Hace veinte años hubiera sido más inteligente y el molde para generaciones venideras. Su secuencia en el cine sería ejemplo de clímax del género, su personaje coparía portadas de Fangoria y su heroína protagonizaría secuelas. Vista ahora “La casa de cera” queda como lo que Jaume Collet-Serra quiso modelar y acabó con las manos llenas de un líquido blanco y viscoso que pensaba que era cera (y cera le dieron) y finalmente salió del estómago y tragaderas de Paris Hilton.