La noticia a alguno se le ha metido como un pepino por la entrepierna: una bacteria intestinal, ‘escherichia coli’, ha puesto en jaque el otro lado de la entrepierna a un país entero. Alemania ha sido azotada por un puñado de pepinos asesinos posiblemente adiestrados por Al Qaeda. ¿No estaba Bin Laden muerto? Ni cortos ni perezosos han buscado un culpable con su sucio y grasiento dedo acusador salchichero: Spanisch! Spanisch! Spanisch! Spanisch gefickt! Y lo repiten todos los alemanes soltando escupitajos cerveciles: Spanisch! Spanisch! Spanisch! Spanisch gefickt! Con las redes sociales por testigo y cámara en mano en las calles se dice que los pepinos españoles son los peores y más tóxicos: son los que llevan más pesticidas. ¿De la marca alemana Bayer tal vez? Los españoles merecen la muere. ¡A por ellos! Acusaciones formuladas con el pretexto racista más vil visto en los últimos meses. Se acabaron todos los protocolos de la UE porque ahora se acusa como en un plató de Sálvame por la tertuliana que dice ser periodista. ¿Es su venganza personal por no votar el tema de Lena en Eurovisión con la máxima puntuación? ¿Todo viene de las semifinales del Mundial de Fútbol donde se les ganó con justicia? ¿Simplemente nos odian a la muerte pepina y desean expulsarnos de Europa?
Pero hay un dato demoledor hasta el momento:
— Hay 400 afectados por este brote infeccioso, de los que 60 están calificados de graves, y once muertes en Alemania, Suecia, Dinamarca o Países Bajos. Ningún caso en España. Ningún caso. Y sin embargo, culpables. Porque no sé si es que soy muy tonto. Si los pepinos asesinos tienen nacionalidad española (y entrenados por por Al Qaeda), ¿por qué nadie en nuestro país ha caído enfermo?
Al parecer ahora se juzga sin juicio y sin pruebas contundentes. Efectivamente los pepinos asesinos pueden ser españoles (made in Almería) pero fueron infectados al caer en el suelo de Hamburgo (según wikipedia: Hamburg en alemán, pronunciación alemana: [ˈham.bʊʁk], pronunciación local: [ˈham.bʊɪç]; Hamborg en bajo alemán, pronunciado: [ˈham.bɔːx ]) es una ciudad situada al norte de Alemania). Salvo que Alemania haya ampliado sus fronteras hasta los Pirineos regresando a su etapa hitleriana Spain sigue siendo Spain y Hamburgo is not Spain. Prueba que se ha constatado por los mayoristas que al ver su mercancía desparramada por el suelo hamburguense revendida a precios de saldo por dicho motivo. Pero una vez hecho el daño (similar a leyendas urbanas como la de La Oreja de Van Gogh, Alejandro Sanz o Ricky Martin) poco importan las futuras disculpas. Eso quiere decir que el famoso virus ‘escherichia coli’ es de origen alemán y la víctima y el falsificado verdugo español. ¿A alguien no le queda claro que estos señores son unos racistas y que pretenden meter a nuestros pepinos en campos de exterminio de hortalizas.
D.E.P. (Descanse en Pepino) |
John De Bello ya ha anunciado que va a volver a rodar una nueva saga que retomará títulos como “El ataque de los tomates asesinos”, “El retorno de los tomates asesinos”, “Los tomates asesinos atacan de nuevo” y “Los tomates asesinos se comen Francia” pero esta vez con pepinos para no repetirse. Lo triste es que las películas sólo hablarán de las víctimas físicas de los pepinos, nunca de las otras del dedo acusador.
Locke fue asesinado por Pepinos: Ben dixit |
La Noche de Los Pepinos Españoles Vivientes |
Buscando una imagen para ilustrar un futuro post al respecto en mi humilde blog, me he topado con la banderita del ppio... Por favor, por favor, por favor, puedo tomarla prestada? me viene que ni al pelo... :)
ResponderEliminarHola Mamá Española en Alemania.
ResponderEliminar¡Puede y debe! Si no recibe un pepinazo alemán, claro.
Saludos bastardos,