Atrapados. Así se podría resumir aquella terrible enfermedad que aqueja a los millones de adictos de “True Blood” alrededor de todo el mundo. Esta temporada la serie de Alan Ball confirma las debilidades de la anterior y las multiplica al no poseer un villano guasón como Russell Edgington pero su audiencia sigue imparable. ¿Por qué? No es para nada por esa vengativa y malvada bruja de Logroño llamada Antonia Gavilán sino porque ya sea unas que quieren ver su razón de carnaza con hombres lobos machunos, vampiros nórdicos o estadounidenses o sexo interracial (en su amplitud de razas humanas, vampíricas o del inframundo espiritual), interanimal o interninfal la cuestión es simple: polvos mágicos garantizados en cada capítulo. Mucho torso, mucho culo y mucho sexo con bastante sangre y violencia. Así nació “True Blood”, parida por obra y gracia de la HBO, y así quedó el universo entero atrapado sin importar lo que suceda alrededor, sea bueno o malo. A la audiencia le importa poco, al parecer, el cómo sino lo que se come con los ojos. “Let's Get Out of Here”, que inicialmente se iba a titular “Run”, se queda como noveno episodio de la cuarta temporada y dejándonos tres episodios para rematar la historia de brujos, brujas, médiums, vampiros y hombres lobo del averno. ¿Saldremos de aquí? ¿Vivos o muertos? ¿Calientes o muy calientes?
Parece que la serie de Alan Ball quiere acabar con el clímax por todo lo ‘alto’ para dejarnos con ansias de ver qué ocurre en el siguiente episodio. Da lo mismo que hubiera cuatrocientos disparos, ochocientos vampiros, brujas con plata y sobredosis de acción que aquí nadie sale herido… y si sale, como en caso de Sookie, sangre de vampiro (mejor de Rey) para salir del paso. Con todo lo anterior Beverleen es la única baja de las brujas que están hasta el *oño de la bruja de Logroño. Roy, como es brujito, se apunta con Antonia. Su plan es atentar en el Festival de la Tolerancia con un arma milenaria llamada Eric. La que quiera calle hará la calle como poco, porque a las de Logroño nadie las toca la pepita del *oño.
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¡Abajo la Tolerancia! |
Sam, Luna y Emma forman una familia maravillosa de cambiaformas… Bueno, la pequeña Emma no sabe si saldrá mujer-loba o cambiaformas como su madre y ello la tiene aterrada. Lo que quiere es ser conejo, simple y claro. Pero su padre Marcus no quiere que Sam figure entre sus planes y se pasa por Merlotte’s para quedar con el chico por la noche y meterle pelo por la boca… Allí no está él sino su hermano que quería despedirse y aprovecha la invitación para cambiar de piel y pellejo y dar una lección al hombre lobo con el peor plan que ha ideado nunca-jamás este chico redneck. Alcide, después del desplante de Sookie, demuestra que es un auténtico alfa (se quedará al final de la temporada de líder de la manada seguramente), y al ver la paliza que le dan a Tommy decide pararles los pies: él no se alistó para eso sino para enseñar el palmito y poner cachondas a sus millones de fans al otro lado de la pantalla. En fin, tenemos culebrón venezolano cambiaformas con un Sam y Luna que por fin lo hacen… aunque ya lo hicieron pero él no era él sino su hermano. ¡Qué lío! ¡Que cambien a los cambiaformas para la próxima temporada que lían mucho la serie!
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Músculos que valen su peso en millones de audiencia. ¡Cacho-perras (o lobas)! |
“True Blood” siempre se ha caracterizado por sus arrebatos paródicos del género y gracias a un Lafayette poseído por Mavis, una fantasma que perdió a su hijo, alcanza momentos de ridículo estremecedor. Si pretende ser una parodia de “Entre fantasmas” (versión gay) lo admito y lo aplaudo pero si quería ser el milagro que ven Arlene, Terry, Andy, Jason, Hoyt y el pequeño Mickey es para mandar a todos al más allá. Jesus realiza un exorcismo mediante una catarsis espiritual (y cuatro frases mal pronunciadas en español mejicano) donde Mavis se da cuenta que está muerta por el mismo hombre que era el padre de su hijo y que lo asesinó. Tras la exhumación habemus luz. ¿Le dará la palmadita Jesus también a Antonia de Logroño y la mandará al *oño? Esperemos… porque si no… ¡qué los ejecuten por brujos!
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Entre Fantasmas (versión gay) |
Con todas las tramas unificadas falta que Jason y Hoyt hablen de Jessica pero el joven Stackhouse no confiesa a su mejor amigo que está colado por ella y le ha dado largas. Pero, ¿cómo hacer que lo hagan Jason y Jessica? Por cierto, vaya nombres de chonis para una pareja tan choni. ¿Jason por Jessica o Jessica por Jason? Hoyt está muy dolido y mete en una caja todos los objetos de ese ‘monstruo’ que le ha roto el corazón. Es la primera vez que vemos una referencia a la competencia… aunque sea para llamarla basura y/o monstruosidad. En la caja hay una copia de “Crepúsculo (Twilight)” de Stephenie Meyer y sombra de ojos… también el álbum en CD ‘Speak Now’ de Taylor Swift. Jo, comparten los mismos gustos y ella le gusta a él y él le gusta a ella. Al devolverle Jason la caja a Jessica garabateando las obscenidades que le había pintando su ex… llega el no y el flechazo. Típico y Tópico. Polvo en el camión como quería ella… ¿Tendrán también un bebé vampiro?
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Product Placement |
Si la cosa es de tres Sookie se replantea formar un trío y amar por igual a su Bill y a su Eric. Nada mejor que un picardías rojo-putón para que den los colmillos adelante. Debbie, pese a caer de nuevo en el V, ayuda a Sookie a entrar en Moongoddess Emporium entreteniendo a la bruja Antonia. Allí descubre el plan de utilizar a Eric para matar a su Bill, o sea el Rey en el Festival de la Tolerancia. Con la ayuda de una Tara Tara-da se escapa pero las brujas van en escoba y los vampiros milenarios vikingos vuelan. La chica, como siempre, llega tarde… y a Antonia le ha dado tiempo a llegar, tomarse cinco daiquiris, poseer a los tres sheriffs que le quedaban al Rey, preparar un atentado terro-brujista, firmar cuatro autógrafos porque Marnie no está para lanzar cohetes y esperar a que llegue el hada camarera para le grite a su Rey Bill eso de ‘Run!’. Todo queda muy emociónate (para el que le quede emoción, claro) en el próximo episodio e inicio de cuenta-atrás final: “Burning Down the House”.
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Tolerancia sin Vampiros |
Los mejores momentos:
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Anuncio de Lencería para Vampiros |
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Mirada que hipnotiza |
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Homenaje a la monstruosidad |
Mira que me he aburrido, es que ha sido un episodio de chiste. "Entre fantasmas(gay)", Trios porque me aburro, lobos que no saben dónde están y a enseñar todo el mundo cuerpo...
ResponderEliminarMenos mal que quedan tres!! Y anuncian para el último episodio a Scott Folley el de Felicity...sin comentarios.
Hola No tome duermidina, vea true blood!
ResponderEliminarQueda poco y no quedan muchos más comentarios que decir. No sé cómo acabará pero es que no sabemos si es que ha empezado algo.
Saludos bastardos y gracias por el comentario,