Si
tuviera que trazar y dibujar un mapa de ruta de esta quinta temporada de “The Big Bang Theory” me costaría
encontrar algo más que esa ‘friends-iazción’ de la serie de Chuck Lorre y Bill Prady. Lo que voy a contarles más que spoiler es simple
inercia de cualquier serie de amigos y relaciones de pareja. Howard Wolowitz y Bernadette Rostenkowski están prometidos, Sheldon Cooper y Amy Farrah
Fowler son novios (por contrato) y Leonard
Hofstadter y Penny han vuelto… Raj Koothrappali parece ser el eterno
solitario por su incapacidad de hablar sobrio a las chicas… Poco o nada más en líneas generales y sin
ningún episodio rompedor… salvo algunos momentos destacables y remarcables…
poco o nada más… No obstante, la audiencia ha considerado que “The Big Bang Theory” es la sitcom (y
serie) con unos niveles de popularidad superlativos. Y el camino del éxito hace
que sus méritos parezcan incuestionables… pese a haber perdido la serie el
encanto con el que se inició. Puede que “The
Friendship Contraction”, decimoquinto episodio de la quinta temporada, quiera volver a las viejas tramas de Sheldon-Leonard para que el primero siga entiendo el mundo terrenal de los
mortales y el significado de la amistad.
Las
dos tramas que componen “The Friendship
Contraction” se centran en lado más socarrón y violento de los colegas: los
motes y el aprovechamiento no mutuo. Ese interés es el que siempre ha mostrado Sheldon para sacar tajada egoístamente
de Leonard para que, por ejemplo, le
lleve al dentista. El capítulo se inicia con un simulacro de preparación de
emergencias que Sheldon realiza una vez al trimestre, para mantener un alto
nivel de alerta en caso de destrucción planetaria, ataque de tomates asesinos o
un terremoto Intempestivo.
La escasez de sueño provoca que Leonard
se de cuenta que es el chófer y sirviente de su compañero de piso y que esté
atrapado en ese contrato que firmó. Es curioso que los guionistas se hayan
olvidado de una de las tramas que se originaron la temporada pasada con esa novia
abogada (y hermana de Raj) que puso contra las cuerdas
legales la validez de esos papeles con tinta impresa.
Buscando nuevos amigos por interés |
Leonard descubre que puede adscribirse
a una cláusula que suspende esa ‘amistad’ y recorta el acuerdo de compañeros de
piso a lo esencial: alquiler, servicios y cortesía para saludarse a la entrada
de la vivienda. ¿Por qué una implacable abogada como Priya no recaló en semejante chollo? ¿Por qué? ¿Por qué? Sheldon, a partir de ese momento, se da cuenta que lo que entendía
por amistad era simple interés unilateral. Por otro lado, llegamos a una de las
tramas de la temporada: Howard Wolowitz y
su carrera espacial. Todos sus
compañeros de la NASA tienen motes (o apodos) menos él… Raj tiene claro que él es ‘Dinamita
Marrón’ pero Howard insiste en
que el apodo debe llegar de sus nuevos colegas. Raj y Howard preparan un
momento ‘Rocket Man’ para que le endosen dicho mote… pero su madre levanta la
tapa… de los ‘cereales’.
El Sable que puede que con todo |
Sheldon se da cuenta que ninguno de
sus supuestos amigos quiere cumplir con las tareas que él considera admirables
por considerarse parte de sus amistades. El único que las hacía era Leonard… y por obligación. Ni siquiera
el solitario Stuart quiere tener el honor… Sheldon tiene suerte porque hay un apagón en el edificio y puede
poner en práctica aquellos simulacros indecorosos con micción convertible en agua. Pero la luz de un sable
láser, de unas tradicionales velas, el vino y buena compañía pueden con
cualquiera. Sheldon… descubre la
soledad y la oscuridad… pero, por intervención de Penny, Leonard negocia
una vuelta con un día especial para él. La rubia y vecina, además, les informa
que el apagón se ha producido porque alguien bajó al sótano y pulsó el
interruptor principal. Parece que al Dr.
Cooper le empieza a preocupar mantener a sus amigos…
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