El camino de vuelta: Sobre el regreso

“El camino de vuelta”

Título original: “The Way, Way Back”

Directores: Nat Faxon, Jim Rash

EEUU

2013

Sinopsis (Oficial):

Adéntrate en esta ‘comedia imaginativa e inteligente’ que cuenta con un reparto estelar incluyendo a Steve Carell, Maya Rudolph, Toni Collette, Allison Janney, Sam Rockwell y Amanda Peet. Cuando Duncan, un adolescente de 14 años es obligado a pasar las vacaciones con su madre (Collette) y el dominante novio de ésta (Carell), conoce inesperadamente a un nuevo amigo, el extrovertido director de un parque acuático. Los dos establecerán un fuerte vínculo que ayudará a Duncan a encontrar su lugar en el mundo a través de los retos que nos brinda la vida, el amor, la familia y la amistad, convirtiendo esas vacaciones en un verano que nunca olvidará.

Crítica Bastarda:

El camino de ida y vuelta yace delante de nosotros y se pliega en su arranque y desenlace. Nos conocemos esta película e incluso el libreto de Nat Faxon y Jim Rash —ganadores del Oscar por su guión junto a Alexander Payne de “Los descendientes”— no esconde la propia resolución del conflicto del protagonista. Todo trata sobre el camino de vuelta, el plano final, la secuencia que sentencia la catarsis y el crecimiento emocional de una madre y un hijo. De su ida… y regreso. En esta ocasión no hay una base ni una novela sobre la que respaldarse y tanto Faxon como Rash han decidido tomar las riendas a todos los niveles. Son los directores de sus propios designios y letras e incluso se atreven a someterse a la piel de algunos carismáticos secundarios, aunque su propio libreto fuera anterior y previo que el oscarizado por el film de Payne. 

“El camino de vuelta” es un viaje conocido, al terreno de la iniciación, de un verano que haga que el protagonista deba enfrentarse al indigno novio de su madre (Steve Carell) y evolucionar para también despertar a su propia madre. No es que sea una nueva “Adventureland” de Greg Mottola pero sí trata de servirse de la mecánica que el propio espectador explore sus emociones. Podemos rechazarla porque realmente la cinta se articula sobre un gran acto y parada que ya conocemos, pero me gusta pensar más en la emoción del ‘camino de vuelta’, a esas vacaciones de verano que al caluroso infierno familiar que ya hemos vivido en el pasado y dejado atrás. Nada nos puede parecer nuevo, ni esa nostálgica banda sonora que abra un pasaje a la libertad. Puede que con la cinta de Faxon y Rash nos haga exponer los recuerdos de “Pequeña Miss Sunshine” y que no hemos tenido unas vacaciones cinematográficas más divertidas y gratificantes. La presencia de Steve Carell o Toni Collette sella esa réplica, ese nuevo camino de vuelta de los propios espectadores.

En medio del camino nos topamos con un parque acuático como microcosmos donde se decide la pérdida de la inocencia y se intuyen los desafíos de la madurez permite relacionar esta película con la ya mencionada cinta de Mottola. Pero “El camino de vuelta” sale perdiendo con la comparación: a Faxon y Rash les motiva más articular un ejercicio de carisma filo-indie que ahondar en la esencia de su materia. La dramedia se basa en la conjunción de risas y lágrimas, se suma el sabor a verano y los tópicos y realmente la sensación es de descender en un tobogán lleno de momentos y personajes entrañables. Todo es gratuito, objeto de un producto premeditado, un concepto artificial… como ese tubo de plástico de poliéster reforzado en fibra de vidrio. Todo es una falsa, en definitiva y resumen de esa carta final. Si uno, por el contrario, quiere disfrutar debe dar la vuelta a ese papel ya escrito en anteriores ocasiones, dejarse llevar hasta caer en esta refrescante piscina cinematográfica y refrescante y premonitoria. Posiblemente ese instinto de aprovecharse y valerse del drama independiente condimente una película con demasiados temas universales para que los espectadores sientan en su propia piel y se identifiquen con ese ‘camino de vuelta’. Con ese reflexivo regreso que acumula y resuelve el conflicto: no recorras la vuelta solo sino bien acompañado.

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