The Cloverfield Paradox: Decepcionante e intrascendente… que no mediocre

“The Cloverfield Paradox”

Director: Julius Onah

EEUU

2018

Sinopsis (Página Oficial):

Un planeta al borde de la guerra. Unos científicos con la misión de impedirla, sin saber que les espera otra realidad mucho más terrorífica

Crítica Bastarda (AVISO SPOILERS):

Considero que para analizar “The Cloverfield Paradox” es necesario destripar algunos de sus secretos para entender las implicaciones que plantea en el universo que comenzó a tomar forma en “Monstruoso” (2008). El filme dirigido por Julius Onah ha supuesto una decepción generalizada tras su sorpresivo estreno en Netflix y los motivos pudieran ser las buenas sensaciones que dejó “Calle Cloverfield 10” poco tiempo atrás. Pensemos en que esta tercera parte de la franquicia no es más que un sumatorio de proposiciones previas de la ciencia ficción. Su originalidad es tan nula que sus homenajes a “Alien, el octavo pasajero”, “Horizonte final” o “Sunshine” —entre otras muchas variaciones y opciones— no dejan de remarcar su implícita intrascendencia. Únicamente el conjunto podría funcionar como un episodio para nada memorable de “Más allá del límite” e interesa más el fondo que la forma. Que Netflix y J.J. Abrams se alíen para ofrecernos sorpresas no es para nada desdeñable pero, sin embargo, la producción ha de ofrecer cierto contenido y el único mérito de “The Cloverfield Paradox” es que no aburre en demasía. Basta con echar la vista atrás para ver cómo “Coherence” articulaba su trama sobre universos alternativos —colapsando entre sí— y se convertía en un pequeño referente para el género sin apenas presupuesto o efectos visuales. Simplemente tenía muy buenas y originales ideas. El problema de la cinta de Onah para vivir de rentas de la ciencia ficción y su escasa imaginación no sabe sacar provecho tanto de su reparto internacional o incluso su capacidad para dar una vuelta de tuerca sobre el universo de ‘Cloverfield’. 

Sobrepasemos toda la maniobra comercial e incluso esa premisa en la que un problema energético global hace poner todas las esperanzas en un experimento con el que se consiga una nueva fuente de energía. ¿Podrá una estación espacial, provista de un acelerador de partículas, ser la respuesta a un conflicto internacional que augura el fin de la humanidad? Queda claro que aquello que vaticina Mark Stambler (Donal Logue), un ‘adicto’ a las teorías conspiranoicas, es el santo y seña de la propuesta: advierte al mundo de los peligros que puede suponer el uso de ese acelerador de partículas. El caos va a llegar al multiverso y al espacio/tiempo… Vayamos al material que interesa que no es otra cuestión que el cierre de la cinta para trazar ese círculo que ata los minutos 18 de “The Cloverfield Paradox” y la primera parte de la actual trilogía —y ya anunciada saga—. La idea es que “Monstruoso” quede conectada con esa otra supuesta realidad alternativa. Esa criatura no era más que un bebé y, ahora, su tamaño es tan descomunal que puede sobrepasar las nubes del planeta que va a dominar junto a los de su especie… ¿Hay algo más aquí que una simple proposición de futuro que ligue y vincule todo el universo? Podemos confirmar que el filme no es el desastre cinematográfico que muchos han proclamado aunque, no obstante, la evolución de los personajes y sus conflictos conformen esa dicotomía de encontrarse con otra dimensión y las posibilidades argumentales que tal hecho ofrece. Pese a todo, el guion resulta muy rutinario y en absoluto sorprendente. Entre lugares comunes y giros previsibles, la cinta de Onah simplemente destaca por las teorías que puede dejar dentro de las películas de la saga ‘Cloverfield’. ¿Cada cinta se desarrolla en una línea temporal diferente o estamos hablando de dimensiones distintas del multiverso? La cuestión es que parece que el experimento que se realiza con el acelerador de partículas ha provocado el caos en el espacio/tiempo y el desorden se ha desatado en diferentes Tierras. ¿Serán esos alienígenas que llegaron en “Calle Cloverfield 10” parte de esos efectos secundarios? ¿Está destinado cada universo existente a ser un filme de ciencia ficción con monstruos gigantescos o invasiones extraterrestres? Es complicado imaginar que todas las películas sucedan en la misma línea temporal y dimensión y el título de la presente cinta ya nos advierte de una paradoja. ¿Blanco, Kaiju y en botella?

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