viernes, 27 de febrero de 2015

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Arrow (3x15) Nanda Parba: ¿La venganza es justicia?

“The Flash” se despidió con Fallout” (1x14) hasta el 17 de marzo y “Arrow” ha hecho lo propio con “Nanda Parba”, decimoquinto capítulo de su tercera temporada. No tendremos una solución inmediata a las preguntas que plantea el episodio hasta “The Offer” (3x16). Aterrizará en nuestras pantallas un día después de que Barry Allen, Caitlin Snow y Cisco Ramon tomen conciencia de la verdadera identidad y planes del Dr. Harrison Wells. Antes de hablar del futuro, hablemos del presente. Nos encontramos ante un potente golpe de efecto similar al efectuado en The Climb” (3x09) —posiblemente el mejor episodio emitido jamás en la serie— y el show está sabiendo gestionar sus tiempos y arcos argumentales. Es curioso que en “Nanda Parba” los guionistas hayan sabido articular una evolución de los personajes y hacerles traspasar sus conflictos con nuevos enigmas a su destino. “Arrow” ha conseguido equilibrar el drama con la acción y pocas series pueden apuntarse ese tanto en la actualidad. Propongamos el nuevo cliffhanger como un elemento de suspense más afín a los interiores de Oliver Queen que a ese exterior abominado y etiqueta de capa, capucha y antifaz impuesta por la propia audiencia en el pasado del show. Hablemos del presente y repasemos “Nanda Parba”.

Analicemos los giros locos de esta temporada. Matar al protagonista y hacerlo regresar de entre los muertos no es que fuera un punto giro original como tal, pero el mérito de “Arrow” fue integrar el concepto como clímax a una sucesión de eventos desembocados tras la muerte de Sara Lance. Un giro de guión lleva a otro. Precisamente el asesinato de uno de los personajes principales de la serie de The CW ha sido el precursor de prácticamente todas las motivaciones de los protagonistas. El plan de Malcolm Merlyn, la utilización de Thea y la sombra de Ra's al Ghul han traído un completo cataclismo al Team Arrow. Planteemos, pues, el invento como un ejercicio dramático por encima de un simple giro efectista y superficial para llamar la atención. El cierre de “Nanda Parba” obedece a ese orden. No es una idea y/o solución argumental reveladora e incluso está inspirada en un cómic, sino que complementa todo el discurso que está ofreciendo una serie que quiere crecer a un nivel más trágico que icónico. Black Canary, Arsenal, The Atom, John Diggle, Speedy e incluso Nyssa al Ghul van sumándose a esa concepción de un gran show alrededor de muchos puntos cardinales. Resumamos todo esa sensación en gestación como un proceso de la serie para prepararse ante la desaparición de sus habituales flashbacks. La mecánica cambiará y la experimentación es primordial para ofrecer jugosas percepciones y posibilidades de futuro. “Nanda Parba” es una vuelta de tuerca pero no sobre Oliver Queen o Malcolm Merlyn sino sobre la idea y significado de Ra's al Ghul en el envoltorio del producto final. El gran acierto ha sabido dosificar a su gran villano en tres apariciones a lo largo de la presente temporada, imponiendo su pose presencia fuera de campo y construyendo que sea el gran temor de todos los protagonistas. 

Qué no tienes que hacer en una entrevista de trabajo...

En los flashbacks pudiéramos pensar que el jefe de Amanda Waller, el General Matthew Shrieve, es un buen tipo que libera tanto a Oliver como a Maseo y su familia para ir a Japón. Los militares parecen contentos con el trabajo realizado por Oliver… pero nada puede salir de un militar en una serie amparada en el universo de DC Comics y mucho menos con A.R.G.U.S. por medio. ¿Piensa mal y acertarás? ¿O Amanda es la villana de la historia y la traidora por excelencia? Da la impresión de que es un personaje que justifica su fin con cualquier medio y presumiblemente el traidor y villano sea el General Shrieve. Pensemos en esa línea de suspense en la que Queen y la familia Yamashiro son emboscados en Japón por el operativo de Waller y/o Shrieve. Un tiroteo provoca que la familia quede separada y que Oliver tenga que llevarse a Akio a un lugar seguro. Continuamos con esa gestión oriental de la serie que tampoco está resultando tan exótica o potente como pudieran pensar los productores, pero que sigue dinamitando ese tablero alrededor de una futurible villana o villano. De momento, vamos con el actual antagonista… aunque la agenda oculta es más peligrosa que el propio autor. Y es que Ra's al Ghul ha mantenido velados a su propia hija sus planes sobre Oliver y Malcom. Nyssa reclama venganza sobre los responsables (directos o indirectos) de la muerte de Sara y, en cierta medida, es una pesada al respecto. ¡Pesada! ¡P-E-S-A-D-A! Sí, que era tu novia y ese etcétera… pero no dejas de ser una P-E-S-A-D-A… El desafío sobre Ra's al Ghul por parte de Mister Queen puede ser suficiente aliciente para hacer que ese baño en el ¿Pozo de Lázaro? sea más que una necesidad… 


En Starling City suenan los tambores de guerra. Team Arrow toma medidas para la inminente llegada de la Liga de los Asesinos y el Club de Thea se convierte en en una auténtica fortaleza inaccesible. ¡Por fin! ¡Por fin ya no va a parecer el coño de la Bernarda! ¡Por fin! ¡No más DJs sin acreditación profesional! Thea, por el contrario, no se muda de su lujoso apartamento para disgusto de Malcom y no va a ser la primera de sus diferencias. Thea tiene que lidiar con su nuevo rol de asesina y Roy le ayuda con sus propios traumas. “Arrow” siempre se ha basado en esos conflictos morales sobre sus personajes y sus crímenes. Ese material se ha convertido en la otra capa y máscara del show. Roy enseñará a Thea cómo ha lidiado con la muerte del policía que mató bajo los efectos del Mirakuru. Thea también sufrió los efectos de esa planta llamada Votura pero su manera de lidiar con su culpa es mucho más oscura, cercana a esa identificación e influjo que supone tener un padre psicópata y un hermano asesino que ansía hallar una vía de redención. El tributo a la esencia de Tommy da la impresión de ser ya papel mojado para el propio del espectáculo y es la lucha moral de Thea/Oliver parte de las futuras esencias. Thea busca enfrentarse a sus actos y su sinceridad con Laurel simplemente ubica a su hermano como un perpetuo mentiroso y a su padre como el culpable y responsable de sus actos. Laurel, por lo tanto, se convierte en la báscula que atenaza la conciencia de Oliver y que trata de vengar a su hermana convertida en Canario Negro. No está a la altura de derrotar a Malcolm Merlyn dentro de esa humillación entre la venganza y la justicia. Para Nyssa al Ghul ambos elementos están vinculados mientras que Oliver desea apartarse de esa senda y aislarlos. He ahí su lucha y evolución. La cuestión es que Merlyn es hecho prisionero por Nyssa y éste fue entregado por su propia hija como acto redentor pero posiblemente equivocado en el fondo. Oliver no desea consentir que el alma de su hermana quede destruida por los remordimientos futuros… Y he aquí el caramelo envenenado para confeccionar alguna secuencia de acción y dar hondura y cobertura de suspense a la misión suicida de John Diggle y Oliver Queen a Nanda Parba para rescatar a Malcolm Merlyn, mientras que Nyssa es dejada como rehén en Starling City. Ese cambio de fichas ya divisaba un elemento que van a utilizar los guionistas en las frases maliciosas que le dedica Al Sa-Her a la hija de Ra's al Ghul: «A tu padre no le importa la muerte de Sara, lo sabes tan bien como que tu relación con Sara te ha costado cualquier oportunidad de ocupar el lugar de tu padre». Todo ese posicionamiento es vital para enfocar la evolución a los conflictos de los personajes, sumando ese juego de justicia y venganza. Laurel no se sentirá más feliz después de sentir que Malcom será torturado y ejecutado, por ejemplo. Y la propia Thea lidia con sus sentimientos concediendo a Nyssa la venganza que ésta buscaba, liberándola de su prisión y dándola una espada a tal efecto. Continuará… Como el sexo entre Palmer y Felicity… Es normal que Ray Palmer esté exhausto y agotado trabajando en ese traje que le transformará en el Iron Man del universo televisivo de DC. Felicity se convierte en esa musa que todo superhéroe necesita y la sombra de Oliver se transforma en el material para convencer y ayudar a arreglar esa armadura que se convertirá en músculos y carne lúdica para nuestra hacker televisiva favorita. Digamos que Felicity debe pasar por todos los clichés para eludir el propio cliché y que ambos acaben en la cama para que la obsesión de Palmer tome un descanso, no dejando de marcar la propia ironía de la resolución. En realidad, no hay nada como el sexo para tener la idea esclarecedora que necesitaba un genio como Palmer para concluir de formalizar su traje. La contraseña es contraseña. The Atom es The Atom y podemos pensar ciertamente que los guionistas han decidido juntar a esa pareja de cerebritos que no va a desentonar en absoluto en el venidero crossover con “The Flash” o en un posible y futuro spin-off propio. Todo trata sobre exaltaciones al fin y al cabo.

Cómo tienes que comportarte en una entrevista de trabajo

También hay una motivación en todo ese acto de Oliver para volver a enfrentarse a ‘la cabeza del demonio’ y aquel hombre que le derrotó sin muchas complicaciones. Diggle parece tener las respuestas y juntos hallan una culminación a los sentimientos de ambos. No es que tengamos un bromance a la vista sino un sentimiento de hermandad entre ambos y conexión vital. De nuevo, el show lanza una esperanza para que Oliver sea el padrino en la boda de su antiguo chófer y guardaespaldas… como si la locura egocéntrica fuera la solución a todo. Y, en cierta medida, fue así. Ra's al Ghul tenía todo calculado y utilizó a Merlyn para capturar al ese ‘escuadrón y dúo suicida’. Su sentencia de muerte, en realidad, era su propia entrevista de trabajo por ese hombre que ha vivido desde mucho antes de 1854 y que conoce a todo los tipos de personas… incluidos a esos magos que son incapaces de engañar a la propia muerte cuando ésta se presenta delante de ellos. Ra's al Ghul es la parca… pero posiblemente esté cansado de su propio rol y condición. Busca un relevo de futuro y su propia hija le defraudó con la relación que mantuvo con Ta-er al-Sahfer. Aquí queda en evidencia que el temor de Merlyn por aceptar su muerte le repudió mientras que la valentía de Oliver por sacrificarse por su amigo (y antes por su propia hermana) aporta al líder de La Liga de los Asesinos el componente y motivación que necesitaba. Son dos secuencias que replican entre sí y en las que el show lanza su órdago para la recta final de la actual temporada de la serie. No va a ser un enfrentamiento físico entre Ra's al Ghul y Oliver Queen —aunque no hay que descartar que repitan un duelo a muerte épico— sino que su guerra es psicológica e incluso ética. ¿Oliver está condenado a ser Flecha Verde o, por el contrario, a ser el líder de La Liga de los Asesinos? ¿Él y solamente él está condenado a ser el próximo Ra's al Ghul? El dilema existencial está servido… aunque no probemos el plato hasta el próximo 18 de marzo en “The Offer” (3x16). 

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