Flaked: Bluffaked y otras supuestas fallidas catástrofes de Netflix

Serie de TV

“Flaked”

EEUU

2015

Sinopsis (Página Oficial):

En Venice, California, Chip es el gurú al que todos piden consejo sobre la vida. Pero cuando se trata de su propio bagaje, la iluminación brilla por su ausencia

Crítica Bastarda:

Como dicen por ahí, que hay que vivir la vida mirando al futuro pero que a veces sólo se entiende mirando al pasado. 

He aquí la historia de un hombre atrapado tanto en su pasado como en la mentira que lo conforma, cuya realidad es que ha acabado creyéndose la farsa y formando parte de la misma sin desear apartarse de su camino y condenada espiral. “Flaked” ha llegado como la serie de Netflix con peores críticas cosechadas por los medios estadounidenses y tampoco parece haberse ganado el favor del público a juzgar por su recibimiento en redes sociales. La serie creada por Will Arnett y Mark Chappell puede ser una de las mayores decepciones de la temporada seriéfila para aquel público ansioso por hallar cierta inmediatez del que el espectáculo carece. Y es que la decepción pudiera ser, por el contrario y de modo relativo, menor a la sobrevalorada “Grace and Frankie”, aunque “Flaked” también hace valer tanto el carisma de su protagonista como algún punto de giro en su recta final que haga mantener el interés al otro lado de la pantalla. Es posible que sus ocho episodios en el habitual modo maratón de Netflix pasen tan fugazmente que algunos espectadores se animen, aunque esté demasiado lejos de esa joya que supuso “Master of None” e incluso de la recientemente estrenada “Love”. Queda claro que al portal de entretenimiento, vía streaming, le gusta acariciar la dramedia aunque en el caso de esta propuesta la comedia prácticamente carezca de presencia salvo en ‘violaciones’ caninas, juegos de palabras con el café gratis o cameos maternos (Kirstie Alley). 

Más que el retrato de un loser se puede decir que estamos presentes ante un personaje que decidió hipócritamente detener el tiempo y convertir su propia mentira en una farsa vendida como verdad, centrado en vivir a toda costa gracias a la misma. Cuando el espectador descubre las revelaciones que desnudan al antihéroe, “Flaked” alcanza una dimensión con interesantes matices e incluso su visionado merece la pena desde una perspectiva revisionista. No obstante, la serie de Netflix no deja huella aunque pudiera sintetizarse en ese taburete que define a su protagonista, como si la dramedia estuviera compuesta de esas tres patas y mínimo necesario para mantenerse en pie, siendo cualquier otro adorno o variación meramente superflua. Me gustaría afirmar que contar con Tom DiCillo o Wally Pfister detrás de las cámaras o el talento de Chappell y Arnett es suficiente, pero si lo hiciera estaría mintiendo tan descaradamente como el protagonista. «Los cambios son inevitables» y nuestro antihéroe desea evitarlos a toda cosa, dando vueltas e ese viejo y rayado disco que conforma su vida. Cuando sueltan la bomba al cierre de “Avda. Shell” (1x06) [el hermano difunto de London es el hombre al que atropelló Chip desconociendo el papel e intenciones del consorte romántico del protagonista] comienza una cadena de acciones en las que la verdad y los auténticos secretos comienzan a filtrarse, finiquitando las farsas de ese tan desaliñado como imperturbable eje y estrella de la serie. Tal vez la idea sea de lanzar una metáfora sobre el fin de ese distrito de Los Ángeles (Venice) y su ya impuesta bohemia, una farsa carente de gracia y significado dispuesta a congelar el tiempo perpetuando su autodestrucción. Incluso se podrían establecer paralelismos en esa caída libre de personajes ligados a Will Arnett dentro del universo Netflix. El problema es que Chip no es BoJack Horseman y aunque esconde un secreto muy interesante y trágico no es Don Draper aunque sí establece una dimensión de construir una nueva vida tras un accidente sin encontrar el equilibrio entro lo auténtico y la propia farsa implícita. Al final y lamentablemente, “Flaked” acaba siendo “Bluffaked”: mitad de bluff y mitad de agradecido ‘faked’. Lo mejor que se puede decir de la nueva propuesta es precisamente que acaba cuando comenzaba a ponerse sumamente interesante… acrecentando ese espíritu de decepción a ambos lados de la pantalla. 

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