The Flash (2x12) Fast Lane: Dramas familiares y alquitrán argumental

Llegados ya al duodécimo episodio de la segunda temporada de “The Flash”, se siente que la serie de The CW comienza a reestructurarse y propulsarse para una recta final que enfrentará directamente a Zoom con Barry Allen y su equipo. Esta nueva entrega da la impresión de articularse sobre la misma distribución aunque existe un reflejo en Harrison Wells para que el personaje que interpreta Tom Cavanagh crezca a niveles insospechables en todo ese universo de dobles y reflejos. ¿Podrá finalmente traicionar a The Flash y robar su velocidad para así salvar a su hija? ¿El asesinato de Turtle fue su definitivo paso al lado oscuro o existe ahora más que nunca un dilema moral? El conflicto de Wells va a ser aprovechado por los guionistas para posicionar al inteligente científico más cerca que nunca de Barry Allen y de las consecuencias directas de su traición. “Fast Lane” es un capítulo incluso extraño dentro de los márgenes del show ya que el villano episódico y meta-humano (Tar Pit) se convierte en un simple macguffin y objeto secundario de cara a otros dramas mayores. Tras el adiós de Eobard Thawne, la propuesta sigue unificando múltiples capas desiguales, queriendo ser “Fast & Furious”, un drama familiar con devaneos de comedia romántica y, por supuesto, una ficción dedicada en cuerpo y alma al mundo de los superhéroes. En esa complicada mezcolanza la familia siempre ha sido el eje de todo y precisamente el episodio se centra en todo momento en tal concepto, como si ese germen fuera a condensar y justificar cualquier posibilidad presente, pasada y futura. La pregunta, por lo tanto, debería ser otra. ¿Hasta dónde están dispuestos a llegar los personajes por proteger a su familia? Y, sobre todo, ¿qué hará Wells cuando se dé cuenta que Barry y los suyos son también su ‘otra’ familia? Repasemos “Fast Lane”. 

El episodio va a justificar que el equipo se una y empiece a trabajar como tal. Aunque “Fast Lane” quiere trabajar sobre su meta-humano episódico y recurrir a un flashback un tanto clásico de cómo afectó al personaje el incidencia de S.T.A.R. Labs, se siente que la historia de Joey Monteleone es netamente secundaria incluso dentro de otros arcos argumentales secundarios. Lanzado a un pozo de alquitrán, su conversión pude ser la más ‘lenta’ de todas de las que hemos sido testigos en “The Flash”. Tras dos años… veremos cómo ya es capaz de manejar sus poderes, escapar de su prisión, transformarse en alquitrán e incluso lanzar bolas de fuego volcánicas. Evidentemente quiere vengarse y los dos matones que le ‘asesinaron’ son el objetivo primordial. ¿No interesa? No mucho y no por culpa del potencial de la historia sino debido a que los escritores están más preocupados en dar hondura e integrar a Wally West. Si algo hace bien la serie de The CW es conocer sus lagunas argumentales y explotarlas. No tiene sentido que Wally siga participando en carreras ilegales de coches cuando ya no es necesario pagar las facturas médicas de su madre. No tiene sentido… e Iris se lo recordará. Bueno, no tiene sentido salvo que los productores quieran meter con calzador un homenaje a la saga de “Fast & Furious” y revelar el fanatismo por la velocidad de su nuevo personaje, claro. Iris aprovecha también para ponerse sus más sensuales trapitos y ejercer como periodista-detective que se meta en los negocios con hombres peligrosos y violentos con tal de salvar a su hermano pequeño. Que nadie se preocupe por el ‘perchero’ que todo es una simple maniobra argumental para unir la venganza de Tar Pit con las carreras de coches organizadas por ese mafioso llamado Clark Bronwen. Interesa de nuevo establecer la mecánica familiar aquí, que Joe ejerza como padre de Wally y no como su colega y que éste sea el hermano pequeño que Iris necesita. Fin de la cita, aunque se siente de momento todo de relleno hasta ver el destino que le quiere dar al joven de los West. ¿Acabará abandonando Central City como Patty Spivot?

Cisco también ha ayudado a ‘rebajar’ el nivel de importancia de los meta-humanos tanto en la serie como en la propia mecánica de trabajo del equipo. Gracias a una nueva aplicación, las irrupciones de futuribles villanos serán rápidamente detectadas dejando caer que, a partir de ahora, van a ser más secundarios debido seguramente a que los escritores van a empezar a desarrollar ese esperado enfrentamiento entre Zoom y The Flash. Todavía nuestro (super)héroe no es suficientemente veloz para una lucha directa y en “Fast Lane” se agrava todo al acabar Wells el dispositivo para robar la velocidad de aquel joven que ahora ya confía en él. Los guionistas van a introducir muchas secuencias para que Barry y Harrison trabajen juntos y vemos el dilema moral reflejado en el rostro de un padre en apuros. Wells robará un 2% de la velocidad de The Flash y comprobaremos que no tenía una doble agenda. Al menos, a estas alturas. Su idea era tratar de negociar con Zoom tras el primer ‘chute’ pero, tal y como le recuerda dolorosamente el supervillano, no se encuentra en una posición para poder negociar absolutamente nada. Si algo negocia es un dolor de cabeza en su hombro como parte de las torturas que puede propinar el vil villano. Para colmo, una de las acciones de Tar Pit meets “Fast & Furious” ponen en relieve que la leve pérdida de velocidad de The Flash puede traer consecuencias funestas para los seres queridos que trata de proteger Barry. Iris será herida por un trozo punzante de vidrio en el hombro sin que Barry puede detenerlo, como si Wells sufriera en sus carnes aquello que otros están padeciendo por sus indeseables y traicioneras acciones.

Harrison Wells, tras la enésima crisis debido a que Barry le considera como un padre y un mentor, confesará y veremos a un ‘furious’ Joe West en plan Dominic Toretto dando puñetazos a diestro y siniestro. No importa que Wells trabajara junto a Barry para diseñar un dispositivo que permitiera cerrar las brechas que posibilitan la comunicación entre Tierra-1 y Tierra-2. No importa. Aquí lo que importa es que Joe West pegue puñetazos. Tar Pit vuelve a ser otro complemente secundario, para que simplemente veamos los efectos visuales que le transforman en ese monstruo de alquitrán. Una pena que no le hayan querido dar más provecho. Será derrotado con facilidad con el gadget de turno y , por supuesto, Joe pegará otro de sus puñetazos. ¿Para ESTO ha quedado este personaje? ¿Como un simple rematador atrapado en una telenovela familiar? Con todo ya resuelto, Barry medita qué hacer con Wells aunque él mismo les dio las pautas: cerrar todas las brechas, mandarle a Tierra-2 y… ¿dejar que Zoom acabe con todos? Barry recuerda que lo que ha hecho Wells lo hubieran hecho todos ellos, que el propio Cisco ya trabajó con villanos para salvar a su hermano y que nadie está libre de pecado. Amén. Creo que dice todo eso tras confirmar Caitlin que los daños en sus cromosomas no serán irreversibles al confesar el pecador. Piensa mal y acertarás. Amén. Hay un cambio de planes y Wells confirma su entrada en el Team The Flash para conseguir salvar a su hija, que todos ellos están por encima de las acciones de un ser tan despreciable como Zoom. Vamos a tener un viaje inminente a través del multiverso para conseguir rescatar a Jesse Wells. En “Welcome to Earth-2” (2x13) están acreditados Danielle Panabaker como Killer Frost y Robbie Amell como Deathstorm. Atención al dato. Con el viaje de The Flash a Tierra-2, Central City va a quedar desprotegida y Jay Garrick va a tener que ejercer de protector y héroe… aunque todavía no haya recuperado sus poderes y tenga medio pie en la tumba. ¿No podía prestarle un poco de velocidad Barry? ¿O ese artilugio inventado por Wells junto a la Velocity-6 serán claves para derrotar a Zoom? “Fast Lane”, por lo tanto, queda como un capítulo de transición a todos los niveles para aquello que está por llegar. Pensemos que era una piedra (y bache argumental de alquitrán) por la que tendría pasar en algún momento la serie durante esta segunda temporada. Ahora, ¿a disfrutar? 

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