Hannibal (3x04) Aperitivo: Grupo de Apoyo a las Víctimas de Hannibal

THE END? La noticia de la cancelación de “Hannibal” por parte de NBC ha sorprendido a pocos. Se trataba de la crónica de una muerte anunciada incluso desde su comienzo y andadura en la cadena generalista. Evidentemente la coproducción internacional había salvado en anteriores entregas al show de Bryan Fuller pese a sus malas audiencias, insalvables para otras producciones. Pero en esta tercera los ratings no son solamente malos, son simplemente desastrosos. “Aperitivo”, cuarto episodio de esta actual temporada, ha vuelto a marcar un mínimo histórico con poco más de millón y medio de espectadores en EEUU y unos demográficos de vergüenza ajena incluso para la propia cadena del logotipo del pavo real. Y ni sus excelentes críticas, ni su empaque digno de televisión por cable o figurar entre las mejores series que se hacen en la actualidad no han podido salvarla de un entierro notificado tiempo atrás. Los seriéfilos creemos en la resurrección y un caníbal, tal y como señaló Fuller, siempre tiene hambre para poder comer de nuevo… Amazon ha dicho que no quiere revivir el proyecto aunque es normal teniendo en cuenta que está centrada en su producción propia. ¿Ejercerá otra plataforma de salvadora de uno de los más sobresalientes shows que se emiten en televisión? Ningún caníbal o ‘hannifan’ debería perder su fe y hambre… Repasemos “Aperitivo”. 

Uno de los MEMEs y viñetas de los fans previos al estreno de la tercera temporada de “Hannibal” se centraba en el ‘Grupo de Apoyo a las Víctimas de Hannibal’, donde se indicaba la esperanza de que la primera secuencia de la presente entrega fuera una reunión de todos los damnificados por el carismático asesino en serie y decidieran el mejor plan para atrapar definitivamente al bastardo en fuga. Todos estaban vivos… y, en cierta medida, esa imagen se ha cumplido al pie de la letra salvo por Abigail Hobbs aunque su personaje siga presente en la ficción… como cicatriz y fantasma a nivel interno. De hecho, pudiéramos entender “Aperitivo” como ‘el otro capítulo 1’ de la presente entrega de la serie de NBC y que supone una acertadísima visión en esa original estructura. Nos olvidamos del misticismo, imaginación y fábulas europeas de ese relato de un Lucifer que bien pudiera ser retratado como un Dios. Il Mostro, Du Maurier, el Inspector Rinaldo Pazzi o Chiyo van a marcar un punto con retorno para que volvamos de nuevo al pasado y recapitulemos qué ocurrió con el ‘Grupo de Apoyo a las Víctimas de Hannibal’ y cómo quedaron ligados los destinos de todos esos seres atormentados por el mal reencarnado en el Dr. Lecter. 

El Dr. Frederick Chilton es un personaje recurrente dentro del universo de Thomas Harris y a muchos nos sorprendió el destino escogido por los guionistas para que Miriam Lass pusiera una bala en su cabeza en “Yakimono” (2x07). Prácticamente todos le habíamos dado por muerto y su ‘resurrección’ nos será explicada en un plano en slow-motion con estética de “CSI: Crime Scene Investigation”. La bala ‘atravesó’ limpiamente la mejilla de Chilton pero en su reunión con Mason Verger, que busca un nuevo psiquiatra, seremos testigos de cómo ambos se revelan aquello que tienen escondido detrás de sus respectivas ‘máscaras’. Chilton lleva dientes falsos, una lente de contacto para corregir la pérdida de visión en un ojo y todavía conserva el agujero en su mejilla que le ha dejado marcado a lo Javier Bardem en “Skyfall”. Este Verger no es el Verger de la segunda temporada de “Hannibal”. Michael Pitt decidió no continuar ligado al personaje y los productores ficharon a Joe Anderson. Evidentemente está irreconocible entre esos injertos de piel que han reconstruido su rostro de un modo un tanto monstruoso. ¿No le apeteció a Pitt pasar unas horas de maquillaje para quedar completamente como un desconocido ante la pantalla? La cuestión es que Chilton cuestiona esa oferta de un millón de dólares sobre información del paradero de Hannibal. Sabemos que Mason quiere venganza y no a través de la justicia tradicional sino que desea ver cómo el Dr. Lecter es devorado vivo y ya no por sus cerdos sino por él mismo… Chilton no está por la labor de ejercer como perfilador y será el hilo conductor de la narración de “Aperitivo”, visitando a los distintos supervivientes. El próximo de su lista es el propio Will, todavía convaleciente en el hospital. Sabíamos que esa Abigail en su habitación era un producto de su imaginación pero su mente adquirió ciertos elementos del encuentro con Chilton. En el episodio vamos a comprobar que todos los personajes (y miembros del ‘Grupo de Apoyo a las Víctimas de Hannibal’) desean ‘encontrar’ a su verdugo. Unos para cazarlo, otros para detenerlo y mantenerlo encerrado en un hospital psiquiátrico… Pero Will sigue siendo leal a ese amigo al que avisó para que huyera pero que decidió someter a todos a un baño de sangre. Jack Crawford visita al ex agente especial, que repara el motor de su embarcación, para preguntarle por esa llamada que cerraba el ciclo Dr. Lecter -> Garret Jacob Hobbs -> Will Graham. En realidad, aquí llega la bomba a oídos de Jack, ya que Will tenía deseos de huir con Hannibal, con aquel que consideraba su amigo (y su alma gemela). La dirección de Marc Jobst nos prepara para una línea temporal alternativa en la que Will cede a su monstruo interior y ayuda al Dr. Lecter a acabar y degollar a Jack antes de que pudiera tomar su ‘aperitivo’ en una hipotética mesa. 

Para acabar con el repaso de ‘Grupo de Apoyo a las Víctimas de Hannibal’ —y otra de las visitas de Frederick Chilton— veremos que Alana Bloom también sobrevivió pero su recuperación pasará por barras en su pelvis tras numerosos huesos rotos. Incluso un poco de su médula ósea se filtró en su sangre… y la broma de Chilton se convierte en realidad: Alana es una nueva mujer… otro ser transformado y emergente monstruo con sed de venganza. Al igual que Frederick sabe que Will es el señuelo perfecto para atraer al Dr. Lecter y cazarlo. Veremos la evolución de Alana en una silla de ruedas y encuentro con Will en la ya espectral y marchita mansión de Il Mostro. Éste prefiere vivir con otros fantasmas, con esa Abigail que todavía yace en su mente y recuerdo. Alana, ya con bastón, visitará a Mason Verger y Margot hace las presentaciones y advertencias… Alana ya no es la Alana del pasado, es una mujer ‘impenetrable’, capaz de lidiar con ese monstruo maleducado y chirriante que yace ante ella. Esta vez las máscaras también caen y las motivaciones de ambos son conjuntas. ¿Temblamos? Para terminar con el ciclo de supervivientes llegamos a Jack y los guionistas aprovechan para despedir a su esposa Bella introduciendo el melodrama en “Hannibal” y revelando que hay más espacios dramáticos en la serie. Desde su despertar agarrado a la mano de su moribunda esposa iremos desmigajando a ese personaje trágico que informará a Chilton (en su última visita) que deja la Unidad de Análisis de Conducta y será trasladado a Seguridad Nacional. Los terroristas son los nuevos asesinos en serie y desconozco si Fuller deja caer aquí la historia de una especie en extinción en esos monstruosos animales habituales en el show, como si Will y Hannibal fueran los últimos de sus respectivos linajes… 

El adiós de Bella, su último suspiro, su entierro —retratado como una boda en esa vacía iglesia con la conexión del vestido mediante Alana— y ese beso final en su frente. Toda ese torbellino sentimental rápidamente explota con una tarjeta que yace en un ramo donde Hannibal envía sus condolencias. Recordemos, que el Dr. Lecter trató a Bella e incluso la salvó del suicidio que ansiaba, aunque no sabemos si realmente aquí yacía un ser en el arte de la maquinación en sus delirios de grandeza (aquí no muere nadie que yo diga) o simplemente había sentimos reales de afecto. Jack necesita meditar y Will también acude sentándose detrás de él. Es una imagen extraña pero realmente nos indica un relevo: esa carta cambiará de destinatario. De Bella a Will… como si ambos estuvieran marcados por la muerte y el corazón de Jack no pudiera soportar otro golpe similar. Digamos que “Aperitivo” funciona como un season premiere pero cuenta con un prólogo de tres capítulos repletos de material, guiños, información y conexiones. De nuevo, la iglesia, lo sagrado y la fe… con la muerte en un sepulcro que se viste de novia. Los elementos se agolpan y aquí aparece ese sentimiento circular: Will tratará de salvar a Hannibal por todos los medios al ser su amigo, Jack hará exactamente lo mismo por su amigo Will… Destinos cruzados que quedan atrapados en esa telaraña que preparan que ya preparan Alana y Mason para iniciar su caza. El buen gusto de Hannibal le delata… y estamos seguros que con todo aquello que hemos vivido en los capítulos anteriores las alarmas ya han saltado para que el ‘Grupo de Apoyo a las Víctimas de Hannibal’ dé su peculiar pistoletazo de salida y ponga cerco sobre el bastardo en Europa. Una fría y manipuladora Alana (en otro espectro y onda a Bedelia Du Maurier) ya está empujando a todos los intérpretes de esta gran y sangrienta tragedia griega. Mason prepara el escenario para ajusticiar a Il Mostro y Will parte rumbo en su embarcación (¿transatlántica?) al encuentro. Alana lanza el dardo envenenado a Jack para que parta en su búsqueda… y dé sentido en “Contorno” (3x05) a todos esos arcos argumentales cruzados y ligados. Nunca un título fue tan preciso y aclaratorio, como el del presente y sobresaliente “Aperitivo”.

Historias Bastardas Extraordinarias by Maldito Bastardo is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional License.