“Gotham” ha encontrado un campo mediático que ya le gustaría descubrir a otras muchas series. El juego de guiños, referencias e incluso recreaciones de personajes ilustres del imaginario de DC Comics ha supuesto que poner rostros y nombres de actores se convierta en noticia instantánea. Las primeras imágenes de Anthony Carrigan encarnando al sádico asesino Victor Zsasz o Nicholas D'Agosto dando vida Harvey Dent forman parte del juego viral que mantiene una serie tremendamente limitada en otros múltiples aspectos. Tan ridícula como absurda y pésimamente escrita, la vergüenza ajena que provoca “Gotham” en cada episodio genera multitud de risas y MEMEs para el recuerdo. El problema es que hay personas que se toman esta serie cómica en serio… e incluso disfrutan (y no para reír) con semejante catálogo de despropósitos. Hay que respetar todo tipo de posicionamientos: desde el sadomasoquismo a la coprofagia. De momento, me quedo… Me quedo aquí para tirarme por los suelos y disfrutar de tan brutales compulsiones. En “Spirit of the Goat”, sexto capítulo de la primera temporada de “Gotham”, llega… ¡Ta-chán! ¡Ta-chán! ¡Ta-chán! ¡Ta-chán! ¡¡El Espíritu de la Cabra!! Para mear y no echar gota, oigan. A continuación, su review.
En un flashback de hace 10 años nos van a introducir al villano episódico: ¡¡El Espíritu de la Cabra!! En inglés suena algo mejor (Spirit of the Goat). GOOOOOOOOOOOOAT! Algo mejor… Martillo en mano y máscara que le proporciona el truco de ‘Modo Dios’, secuestrará una joven con un elegante vestido de fiesta. Veremos que Bullock, en aquel entonces, era un idealista y ‘héroe’ como lo es Gordon ahora. La corrupción de Gotham ha podido con él a lo largo de los años y ahora es un cínico alcohólico, como lo era su compañero Dix (Dan Hedaya). ¿Está condenado Gordon a lo mismo? En este capítulo ya suelta alguna frase que deja entrever aquello que necesita la ciudad. O sea, Batman pero sin decir Batman… aunque van a aparecer personajes y vigilantes en sus casos a lo largo de los capítulos como el que nos ocupa. Se trata de una especie de hombre del saco para los ricachones de ‘Ciudad Gótica’. Dix le suelta la frase del millón («La Regla de Oro de Gotham: nada de héroes») y Bullock se encamina a salvar a la doncella en ese pilar ¿cabruno? antes de que lleguen los refuerzos. Él es el héroe… o, al menos, lo era. Randall es el nombre real de aquel que se hace llamar el Espíritu de la Cabra, su víctima está muerta y tiende una trampa a Dix para provocar que caiga desde lo alto del altar. Bullock pondrá fin con unas balas al villano con el peor nombre de la historia del mundo-mundial y veremos que después de una década aparece una víctima en idénticas circunstancias… y esto NO ES “True Detective”. ¡NO LO ES! Un momento, ¿El Espíritu de la Cabra? ¿De la Cabra? JAJAJAJAJAJA ¡ME DESORINO! No puedo continuar con esta review… ¿Cabra? JAJAJAJAJAJA ¡ME DESORINO! GOOOOOOOOOOOOAT!
Al no poder continuar realizando una review en condiciones serias por los continuados ataques de risa [¿El Espíritu de la Cabra? JAJAJAJAJAJA ¡ME DESORINO!] llega un resumen de los desarrollos de las tramas:
— Nos olvidamos de las aventuras de Fish Mooney, Carmine Falcone o Liza AKA Greta, La Gremlin. Ohhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh! Pero si es lo mejor de la serie. Ohhhhhhhhhhhhhhhhhh!
— Nygma sigue con sus enigmas tanto para molestar como para resolver crímenes y nos presentan a Kris Kringle (nombre de personaje mitológico alemán que trae regalos durante la Navidad según la Wikipedia más cercana). Es una tía güena a la que ponen una gafas de pasta gruesa pensando que podrá pasar por una nerd. Lleva el archivo de la policía y su sentido de la ordenación no es el mismo que Nygma. ¿Problemas o romance a la vista?
— Selina Kyle hace una visita extraoficial al joven Bruce Wayne mientras se echa una siesta. Observa sus líneas de investigación y se lleva un ‘trofeo’ que para eso es una ladrona. No sé si ya Alfred piensa en ‘socializar’ al muchacho con Leslie Thompkins. Recordemos el fichaje de Morena Baccarin y aquello para lo único que vale esta serie aparte de los MEMEs: para dar noticias.
— El asesino no es un copy-cat… del todo ni tampoco un conspiración como señalaba Dix, que sigue vivo pero chocheando en un hospital y da detalles a Gordon sobre ese pasado que desconocía de su compañero. Era obvio que ciertos detalles no desvelados de los crímenes pasado (el asesino deja una moneda de un centavo de 1813 en el cuello de sus víctimas) nos lleva a una conexión y que tal vez Randall no trabajara solo. La conexión pudiera estar en el trabajo de las cabras ya que tenían/tienen acceso a los edificios donde realizan los secuestros. Si Randall trabajaba en la empresa de mantenimiento de aire acondicionado el nuevo asesino debería cumplir con el mismo patrón. Nygma resuelve rápidamente el acertijo ya que para hacer del Espíritu de la Cabra uno tiene que pedir unos días en el trabajo o simular que está malo. Raymond Earl es el villano y un chivatazo de su supervisor sobre su posible paradero les lleva al lugar del mismo escenario que el secuestro de hace 10 años y ciertas réplicas. Esta vez salvan a la joven de clase alta y detienen (vivo) a Raymond no sin unos apuros. Bullock no ve ninguna clase de conexión entre ambos cabras y tiene una revelación.
Como se venía venir desde la primera secuencia en la que presentan al villano en las sombras, era la Dra. Marks aquella que hipnotizaba y manipulaba a mentes moldeables como la de Raymond. Lo considera una terapia para Gotham y nos topamos con otra justiciera que quiere meter miedo a las clases altas de la ciudad con un hombre del saco para frenar su codicia. ¡La casta también tiene que sufrir! Tendremos una secuencia de vergüenza ajena con la Dra. Marks levantando su patita como una perra en celo mientras Bullock se las tiene que ver con otro de sus hipnotizados y padre ricachón de la primera víctima. Sobran las palabras, las balas y las neuronas. Caso resuelto.
— James Gordon y Barbara se aclaran. O no. Gordon se va a sincerar. O no. Y es que Montoya y Allen encuentran un testigo (y confidente) que confirma que Gordon asesinó a Oswald Cobblepot y que Bullock estaba presente. El testigo en cuestión se vale para sus informaciones con unos prismáticos más guarros que un baño público en Mordor. Sí, un testimonio para un juicio que valdría tanto como una película de los ‘Power Rangers’ en el Festival de Cannes. Barbara habla con Montoya, Barbara habla con Gordon, Barbara habla… Que la pongan en un escaparate porque no hace otra cosa en la serie que ser un simple perchero. En resumen, Gordon es arrestado y también Bullock en un numerito en la comisaría que parece un sketch de ‘Saturday Night Live’. ¿Podría ser peor? Sí, Oswald Cobblepot hace acto de presencia después de un limpiarse el potorro en casa de su loca mamita que no se entera ni del NODO. O no. O sí. En fin, para mear y no echar gota…
— Entendemos que el regreso oficial de Oswald Cobblepot a Gotham va a provocar una cadena de sucesos aparte de que Gordon y Bullock sean un par de cachorros de pit bull enfrentados. En “Penguin's Umbrella” (1x07) Oswald conocerá a su paraguas… y esperemos que se lo meta por el orto a todos los guionista o a Ben McKenzie para comprobar si tiene otro registro que no sea su habitual cara-palo. ¿Tendrá algo que ver la reaparición de El Pingüino con la llegada de un asesino como Victor Zsasz? Esperemos que también haga algo de limpieza. Esta serie de comedia y la más divertida del otoño (aunque hay gente que se la toma en serio e incluso le gusta) lo necesita.
En un flashback de hace 10 años nos van a introducir al villano episódico: ¡¡El Espíritu de la Cabra!! En inglés suena algo mejor (Spirit of the Goat). GOOOOOOOOOOOOAT! Algo mejor… Martillo en mano y máscara que le proporciona el truco de ‘Modo Dios’, secuestrará una joven con un elegante vestido de fiesta. Veremos que Bullock, en aquel entonces, era un idealista y ‘héroe’ como lo es Gordon ahora. La corrupción de Gotham ha podido con él a lo largo de los años y ahora es un cínico alcohólico, como lo era su compañero Dix (Dan Hedaya). ¿Está condenado Gordon a lo mismo? En este capítulo ya suelta alguna frase que deja entrever aquello que necesita la ciudad. O sea, Batman pero sin decir Batman… aunque van a aparecer personajes y vigilantes en sus casos a lo largo de los capítulos como el que nos ocupa. Se trata de una especie de hombre del saco para los ricachones de ‘Ciudad Gótica’. Dix le suelta la frase del millón («La Regla de Oro de Gotham: nada de héroes») y Bullock se encamina a salvar a la doncella en ese pilar ¿cabruno? antes de que lleguen los refuerzos. Él es el héroe… o, al menos, lo era. Randall es el nombre real de aquel que se hace llamar el Espíritu de la Cabra, su víctima está muerta y tiende una trampa a Dix para provocar que caiga desde lo alto del altar. Bullock pondrá fin con unas balas al villano con el peor nombre de la historia del mundo-mundial y veremos que después de una década aparece una víctima en idénticas circunstancias… y esto NO ES “True Detective”. ¡NO LO ES! Un momento, ¿El Espíritu de la Cabra? ¿De la Cabra? JAJAJAJAJAJA ¡ME DESORINO! No puedo continuar con esta review… ¿Cabra? JAJAJAJAJAJA ¡ME DESORINO! GOOOOOOOOOOOOAT!
Al no poder continuar realizando una review en condiciones serias por los continuados ataques de risa [¿El Espíritu de la Cabra? JAJAJAJAJAJA ¡ME DESORINO!] llega un resumen de los desarrollos de las tramas:
— Nos olvidamos de las aventuras de Fish Mooney, Carmine Falcone o Liza AKA Greta, La Gremlin. Ohhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh! Pero si es lo mejor de la serie. Ohhhhhhhhhhhhhhhhhh!
— Nygma sigue con sus enigmas tanto para molestar como para resolver crímenes y nos presentan a Kris Kringle (nombre de personaje mitológico alemán que trae regalos durante la Navidad según la Wikipedia más cercana). Es una tía güena a la que ponen una gafas de pasta gruesa pensando que podrá pasar por una nerd. Lleva el archivo de la policía y su sentido de la ordenación no es el mismo que Nygma. ¿Problemas o romance a la vista?
— Selina Kyle hace una visita extraoficial al joven Bruce Wayne mientras se echa una siesta. Observa sus líneas de investigación y se lleva un ‘trofeo’ que para eso es una ladrona. No sé si ya Alfred piensa en ‘socializar’ al muchacho con Leslie Thompkins. Recordemos el fichaje de Morena Baccarin y aquello para lo único que vale esta serie aparte de los MEMEs: para dar noticias.
— El asesino no es un copy-cat… del todo ni tampoco un conspiración como señalaba Dix, que sigue vivo pero chocheando en un hospital y da detalles a Gordon sobre ese pasado que desconocía de su compañero. Era obvio que ciertos detalles no desvelados de los crímenes pasado (el asesino deja una moneda de un centavo de 1813 en el cuello de sus víctimas) nos lleva a una conexión y que tal vez Randall no trabajara solo. La conexión pudiera estar en el trabajo de las cabras ya que tenían/tienen acceso a los edificios donde realizan los secuestros. Si Randall trabajaba en la empresa de mantenimiento de aire acondicionado el nuevo asesino debería cumplir con el mismo patrón. Nygma resuelve rápidamente el acertijo ya que para hacer del Espíritu de la Cabra uno tiene que pedir unos días en el trabajo o simular que está malo. Raymond Earl es el villano y un chivatazo de su supervisor sobre su posible paradero les lleva al lugar del mismo escenario que el secuestro de hace 10 años y ciertas réplicas. Esta vez salvan a la joven de clase alta y detienen (vivo) a Raymond no sin unos apuros. Bullock no ve ninguna clase de conexión entre ambos cabras y tiene una revelación.
Como se venía venir desde la primera secuencia en la que presentan al villano en las sombras, era la Dra. Marks aquella que hipnotizaba y manipulaba a mentes moldeables como la de Raymond. Lo considera una terapia para Gotham y nos topamos con otra justiciera que quiere meter miedo a las clases altas de la ciudad con un hombre del saco para frenar su codicia. ¡La casta también tiene que sufrir! Tendremos una secuencia de vergüenza ajena con la Dra. Marks levantando su patita como una perra en celo mientras Bullock se las tiene que ver con otro de sus hipnotizados y padre ricachón de la primera víctima. Sobran las palabras, las balas y las neuronas. Caso resuelto.
— James Gordon y Barbara se aclaran. O no. Gordon se va a sincerar. O no. Y es que Montoya y Allen encuentran un testigo (y confidente) que confirma que Gordon asesinó a Oswald Cobblepot y que Bullock estaba presente. El testigo en cuestión se vale para sus informaciones con unos prismáticos más guarros que un baño público en Mordor. Sí, un testimonio para un juicio que valdría tanto como una película de los ‘Power Rangers’ en el Festival de Cannes. Barbara habla con Montoya, Barbara habla con Gordon, Barbara habla… Que la pongan en un escaparate porque no hace otra cosa en la serie que ser un simple perchero. En resumen, Gordon es arrestado y también Bullock en un numerito en la comisaría que parece un sketch de ‘Saturday Night Live’. ¿Podría ser peor? Sí, Oswald Cobblepot hace acto de presencia después de un limpiarse el potorro en casa de su loca mamita que no se entera ni del NODO. O no. O sí. En fin, para mear y no echar gota…
— Entendemos que el regreso oficial de Oswald Cobblepot a Gotham va a provocar una cadena de sucesos aparte de que Gordon y Bullock sean un par de cachorros de pit bull enfrentados. En “Penguin's Umbrella” (1x07) Oswald conocerá a su paraguas… y esperemos que se lo meta por el orto a todos los guionista o a Ben McKenzie para comprobar si tiene otro registro que no sea su habitual cara-palo. ¿Tendrá algo que ver la reaparición de El Pingüino con la llegada de un asesino como Victor Zsasz? Esperemos que también haga algo de limpieza. Esta serie de comedia y la más divertida del otoño (aunque hay gente que se la toma en serio e incluso le gusta) lo necesita.
Historias Bastardas Extraordinarias by Maldito Bastardo is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional License.
Hay algo por lo que vale la pena ver la serie: tus reviews. Me he descojonado vivo
ResponderEliminarGracias por el comentario y contenido Anónimo.
EliminarSaludos bastardos. :D
jejeje genial tu review!! qué lastima esta serie, empecé a vérmela con tantas ganas!! y eso que no soy fan de Batman.. no sé si me la siga viendo con la esperanza de que mejore como Agents of Shield cuando decidimos darle una oportunidad
ResponderEliminarSi la sigo viendo bookeateer es precisamente para reírme de ella. La peor versión de "Agents of Shield" no generaba tantos MEMEs aunque si dejamos Gotham tampoco nos podemos fiar de los fanboys que tiene ahora. :/
EliminarSaludos bastados.
No quiero parecer obsecuente. Seguro que si le dan palos así a una serie que me guste a lo mejor no me guste. Pero que manera de reírme, por favor! jaja. Me parece genial tu estilo en general. He visto un solo capítulo de Gotham y no puedo creer que tenga buenas críticas, es muy mala. Lo peorcito que he visto en mucho tiempo en categoría series; cabeza a cabeza con Helix.
ResponderEliminarMe he podido reír con "el espíritu de la cabra" y los memes lo que no está escrito.
ResponderEliminar"unos prismáticos más guarros que un baño público en Mordor... Sí, un testimonio para un juicio que valdría tanto como una película de los ‘Power Rangers’ en el Festival de Cannes..." eres un puto genio, jajaja gracias por la review, la verdad es que la serie es flojilla (nunca me han gustado las series con capítulos autoconclusivos, me gustan más las tramas intercapítulos que refuerzan los personajes) pero aún así me aporta más que "True detective" que le estoy dando mil oportunidades y quitando las tetas de Alexandra Daddario, los primeros capítulos son un truño atao con piedra.
ResponderEliminar