Páginas Bastardas

miércoles, 14 de octubre de 2015

Agents of S.H.I.E.L.D. (3x03) A Wanted (Inhu)Man: A la caza del Inhumano


Episodio de transición. En realidad, “A Wanted (Inhu)Man”, tercer episodio de la tercera temporada de “Agents of S.H.I.E.L.D.”, es un paso hacia atrás respecto a los dos primeros capítulos que han conformado el inicio de esta reinventada entrega de la serie de ABC. Ir en retroceso no significa que tengamos posteriormente una mayor propulsión a aquello que nos quiere ofrecer el universo de Marvel para introducir definitivamente a Los Inhumanos en un previo a ‘Civil War’. Sin contar que muchas series que se emiten en la actualidad matarían (literalmente) por un episodio de transición como este. La mecánica es bastante simple y efectiva en un juego de tres bandas. La primera es la más potente: Daisy, Mack y Coulson tratan de localizar antes a Lincoln que el equipo de la ATCU le capture. Esa propia persecución se traslada a un habitual caza de un fugitivo y Rosalind Price desea apuntarse un tanto que propicie resultados para seguir con el proyecto y misión del gobierno estadounidense. Por otro lado, tenemos una línea moral en las acciones de Hunter por también cazar a Ward y cortar la última cabeza de HYDRA. ¿Para luchar con un monstruo hay que convertirse en uno? Y, para acabar, la tercera banda se lleva a cabo en los pasillos y salas de la base de S.H.I.E.L.D. con una Simmons bastante tocada y con un Fitz que desea que el amor de su vida recupere su humanidad lo antes posible. Aunque en apariencia parece que es la trama más débil del capítulo nos revela esa jugosa lectura del show sobre juguetes rotos, como la propia Bobbi Morse, todavía en rehabilitación para recuperar su rodilla. En realidad, todos allí son juguetes rotos y he ahí el interés. Esa parcela también es necesaria para consolidar una vía dramática y potente, que “Agents of S.H.I.E.L.D.” no quede convertida en un simple escaparte de caras bonitas y fuegos de artificio. Repasemos “A Wanted (Inhu)Man”.

“A Wanted (Inhu)Man” comienza con su carnaza argumental principal. Los agentes de ATCU, siempre liderados por Banks, cercan a Lincoln. Sabemos que van a utilizar medidas letales si es necesario pero Lincoln tiene recursos gracias a sus poderes y es capaz de electrificar una hilera de torres de línea eléctrica, valga la redundancia, para formar una barrera que le permita huir de sus perseguidores. Lincoln está en graves problemas y Daisy sabemos que quiere encontrarlo por dos razones obvias:

a) Es uno de los suyos. 

b) Se lo quiere follar. Las cosas claras, ¿no?

De hecho, el episodio incide en los dos puntos anteriores. Daisy también se va a enfrentar aquí a su propia organización y, sobre todo, a las decisiones de Coulson. Mack sí tiene claro aquello que defiende y quiénes son sus compañeros. La lealtad es un elemento poderoso pero tampoco podemos hablar de traición sino de las habituales estratagemas de Coulson dentro de una parcela política. Al fin y al cabo, la ATCU no es HYDRA y Rosalind Price (y su labor) sería parte de una nueva misión de S.H.I.E.L.D. si no hubieran tenido una guerra civil —por culpa de unos nazis que crecieron en el interior de su agencia y casi la borran del mapa y la faz de la tierra—. Se trata, en resumidas cuentas, de no gastar recursos en guerras que no llevan a ningún lado. La serie tiene su propio back-story y Coulson cuenta con experiencias similares como esa lucha frente a Talbot o con esa S.H.I.E.L.D. que se hacía llamar ‘real’, liderada por Robert Gonzales, que les apartó de ver quién era el auténtico enemigo: Jiaying. Mack, para empezar, colocó un dispositivo para rastrearlo... haciendo que las palabras de Daisy por teléfono sean el comienzo de su paranoia. Los agentes del ATCU quieren su cabeza y no van a dudar en poner su fotografía en todos los medios haciendo que el cero sobre Lincoln cada vez se estreche más y más… No hay salida… y Daisy ve que el proyecto de los ‘Secret Warriors’ se esfuma prácticamente como muchos de los espectadores. Puede que encuentre un motivo para enfrentarse a Lash o un ‘big bad boss’ que todavía está por aparecer.


Respecto a Bobbi, Fitz y Simmons hay que tener paciencia. Son personajes que han estado (o siguen) en rehabilitación, en esa enfermería que también refleja el juego de laboratorios e intrigas dentro de la base de SHIELD. Simmons está teniendo problemas para acostumbrarse a la luz y el ruido de este ‘nuevo’ planeta y es parca en información: confirma que estaba siendo cazada pero no va revelar por qué o quién. “Agents of S.H.I.E.L.D.” también desea retomar una parcela romántica con la cena que van a protagonizar esa extraña pareja y con un Fitz que mantuvo la reserva en ese local durante meses… hasta hacerla realidad. Lágrimas aparte, es hora de esa trama conjunta y trío nos lleva a la bomba: Simmons examina los restos del monolito pero la secuencia tiene vuelta de tuerca. La bio-química no teme que esas piedras vuelvan a ‘digerirla’ y transportarla al otro lado de la galaxia. No. ¡Ella quiere volver allí! ¿Por qué? No esperen más pistas porque todo el arco argumental alrededor de ese misterioso planeta (de los Kree) va a ir con la misma velocidad que la rehabilitación de Simmons y la rodilla de Bobbi… Paciencia pues. Aquello que da la impresión de ir algo más rápido va a ser la infiltración y misión de Hunter para asesinar (literalmente) a Ward. Antes, Hunter va a tener su momento ‘fight club’ para que tengamos tanto hostias como panes, por parte de May como medida disuasoria a violadores, como que el cuerpo magullado y ensangrentado del ex de Bobbi nos deje claro que en ese lugar uno apuesta sobre su propia vida. Y es que Hunter va a tener que acabar (de nuevo literalmente) con un viejo conocido y mercenario llamado Spud a golpe de puño americano para que compruebe que el precio de toda venganza siempre es elevado. ¿Su recompensa? Un encuentro con Kebo… Y es que acabar con un tipo que salía en “Spartacus” (Daniel Feuerriegel) tenía que tener recompensa, ¿no?


En “A Wanted (Inhu)Man” también nos muestra que Lincoln va a tener conflictos morales tras ser ayudado por un amigo de confianza, John (Daniel Roebuck), y ser finalmente traicionado por éste al ver en las noticias que es un terrorista alienígena. En EEUU no se pregunta: uno coge el bate de béisbol y llama al teléfono que aparece en televisión. Y PUNTO. Toda esa acción va a ser trazada por un encuentro entre Rosalind y un Coulson experto en trollear por obra y gracia de la Casa Blanca. Obviamente la ATCU conoce el paradero del Inhumano y Lincoln acabará llamando a Daisy al ver que a su amigo-traidor John le da un paro cardíaco (de nuevo, y por tercera vez, literalmente) sin que sus poderes puedan servir como un improvisado desfibrilador. Rosalind quiere resultados y Coulson ayudar, evitando el pánico de los civiles ante una amenaza que no debería considerarse como tal. El pobre Lincoln va a ser la moneda de cambio en esa negociación… porque era él o Daisy… Como Banks y los agentes de la ATCU van a evitar el anterior y mencionado punto a) en el reencuentro de Daisy y Lincoln, llega la hora de la verdad. El Inhumano al ver que es traicionado por 4.096.571 (literalmente) vez en un capítulo de televisión, huye del lugar reduciendo con sus poderes a los agentes que se encontraban en la habitación. Daisy es la siguiente de la lista y Mack aquí desvela su lealtad por su compañera. Finalmente, Coulson convence a Rosalind para que se retiren sus agentes. ¿Cuál fue el precio? Coulson y su propia experiencia. S.H.I.E.L.D. y ATCU van a trabajar juntos dejando claro que también esta serie no quiere repetirse… y si lo hace no va a hacer perder el tiempo de nadie. A Mack y Daisy les queda el único consuelo de compartir una partida de un videojuego en ese sillón de la base secreta de S.H.I.E.L.D. que bien se merece un spin-off. Nosotros, literalmente again, a esperar. Lo bueno llega ahora aunque eso no significa que hayamos tenido algo malo. 

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6 comentarios:

  1. 100% De acuerdo, si bien este capítulo no pasará a la historia, hay series que matarían por episodios de transición como este. Aunque si querían que recordáramos este capítulo por algo mas allá de los siempre inquietantes 45 segundos habría bastado con cambiarle el título a "Terremotitos eléctricos".

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    1. Hola Zion1975!

      Me parece curioso que todavía exista gente que critique los capítulos 'de relleno' de "Agents of SHIELD" cuando son muchísimo mejores que la media de shows regulares de 21-22 capítulos por temporada.

      Nuestra Terremoto de Alcorcón tiene también temblores uterinos. :D

      Gracias por el comentario y saludos.

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  2. La opción b es la más clara! En eso se resume para mi el capítulo XD

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    1. Hola AndreBella!

      Yo también apuesto por la b) pero me gusta dejar el libre albedrío para el lector. ;=

      Gracias por el comentario y saludos.

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  3. De acuerdo con AndreBella la opción es la más clara.

    No sé si sea el personaje o el actor, pero Lincon me da flojera (El nuevo novio de Lola me emociono más)

    Y quisieran Daisy /Lincon, tener la química que tienen FitzSimmons..o incluso la que tenia Skye con Ward.


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    1. Hola Danny!

      Completamente de acuerdo. Un problema que tienen que arreglar los guionistas es la falta de química de 'El chispistas' con nuestra querida Terremoto de Alcorcón.

      Gracias por el comentario y saludos.

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