Si se encuentra con alguien que le diga que esta octava temporada de “The Big Bang Theory” ha sido la mejor de todas, salga corriendo de allí lo más rápido que pueda. ¡Es un ultracuerpo y querrá colocar una extraña vaina debajo de su cama! ¡CORRA! O puede que sea algo peor: la sitcom de CBS ha creado ya su ejército de dummies. ¡Es un levantamiento robot! ¡Llame a la policía! “The Graduation Transmission”, vigesimosegundo episodio de la octava temporada de “Big Bang”, llega para lanzarnos un preocupante recordatorio: Emily no existe y cuando Amy desaparece, el show pierde encanto. Puede que la muerte del padre de Mayim Bialik condicionara su práctica ausencia de un capítulo para olvidar. El resto es desechable: chistes baratos, lugares comunes para aburrir y el deseo de la audiencia de que un drone teledirigido comenzara a decapitar la cabeza de todos los protagonistas. En realidad, con unos golpes en la sien nos bastaban para que alguien se despertara allí… ¡Qué aburrido! ¡Qué sopor! ¡Qué aburrimiento! En resumen, si se encuentra con alguien que le dice que esta octava temporada de “The Big Bang Theory” ha sido la mejor de todas, salga corriendo de allí lo más rápido que pueda. ¡Es un levantamiento robot! ¡Llame a la policía! Aunque hemos tenido algunos episodios salvables el tufo a rancio ya no hay quién se lo quita a semejante cúmulo de despropósitos, cero risas e infinito aburrimiento. Repasemos “The Graduation Transmission”.
Si el único riesgo de ‘Big Bang’ actualmente es el mismo que quedarse ciego con los birretes puntiagudos arrojados por estudiantes al graduarse, estamos apañados. El discurso de Leonard y su aventura, hacia Nueva Jersey a su antigua escuela de secundaria con Penny, rápidamente queda abortada. Leonard recibe una alerta y su vuelo fue cancelado por una gran tormenta por toda la costa este. Penny se tiene que quedar con su prometido pero piensa en alguna otra aventura picantona en su apartamento. Si el único riesgo de ‘Big Bang’ actualmente es enseñar las patorras de Leonard, estamos apañados. Y es que el discurso de Leonard acaba en ese recital de lugares comunes, de chicos populares y empollones que no deberían ser tan nerds para encajar en ese complicado mundo de ex camareras rubias —y aspirantes a actriz—, volviéndose más interesantes. ¡Abajo los estudios y las clases de cello y más Instagram! O algo así. No me enteré mucho. Solamente puedo decir que me quedé como Penny… BOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOORING!
Las aventuras de Sheldon y Howard para reparar un drone teledirigido pasan por el desastre, aburrimiento y una pésima calibración… y precisamente en ese orden. Contrasta con los intentos desesperados de Raj para mantener la fuente de ingresos de sus padres ante la negativa de su progenitor de mantener gastos como un ‘helicóptero de juguete’ que cuesta lo mismo que su alquiler. Ese insensato estilo de vida nos lleva a la reparación howardiana del drone y chistes sin gracia del Dr. Cooper sobre sus amadas locomotoras y las causas de defunción de sus fanboys. Ante la limpieza anal con garantías, Raj manipula a su madre y, por extensión, a su padre para aumentar los ingresos de ese ser inmaduro… ¡Helicópteros everywhere for everybody! ¿Y dónde está Emily para poner un poco de orden? Estará con Amy que prácticamente se evaporó del capítulo desde su arranque… Solamente puedo decir que me quedé como Penny… BOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOORING!
Con la llegada de las neuronas de Bernadette, aparecen los clichés y lugares comunes donde no falta el clásico «Hay dos clases de gente en este mundo: los que llaman a soporte técnico y los que se burlan de los que llaman a soporte técnico». Los chicos tienen que ceder a su incompetencia y llamada y el sketch racista revela la única sonrisa del capítulo al sonar al mismo tiempo el teléfono a Raj. JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA… ¡Me parto! ¡El mejor chiste de la historia de la humanidad! ¡EL MEJOR! JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA… ¡Me parto! ¡El mejor chiste de la historia de la humanidad! ¡EL MEJOR! JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA… ¡Me parto! ¡El mejor chiste de la historia de la humanidad! ¡EL MEJOR! JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA… ¡Me parto! ¡El mejor chiste de la historia de la humanidad! ¡MEJOR! ¡MEJOR CHISTE! JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA… ¡Me parto! ¡El mejor chiste de la historia de la humanidad! ¡MEJOR! ¡MEJOR CHISTE! JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA… JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA… PUES ESO. BOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOORING! Al final el drone se vuelve loco. ¡MEJOR CHISTE! JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAAJAJAJA… JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA… PUES ESO. BOOOOOOOOOOOOOOOORING!
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