The Slap: La bofetada y la verdad

Miniserie de TV

“The Slap”

EEUU

2015

Sinopsis (Página Oficial):

“The Slap” es una miniserie basada en la serie de televisión australiana, adaptación del libro de Christos Tsiolkas. Conoceremos a Hector (Peter Sarsgaard, “An Education”, “Blue Jasmine”), un funcionario público, esposo, padre y fiel amigo en la cúspide de su 40 cumpleaños. También nos presentarán a Aisha (Thandie Newton, “Crash”, “Beloved”), la bella e inteligente esposa de Hector que está organizando su fiesta llena de amigos y su familia griega muy bulliciosa. ¿No suena todo como parte de los ingredientes de un gran día, verdad? Se equivoca. Del mismo modo que Hector trata de sortear toda la política familiar, amistades incómodas y una joven por la que está peligrosamente cautivado, estalla la tensión acumulada cuando el primo impetuoso de Hector golpea por mal comportamiento al niño de otra pareja. Todo el mundo se queda comprensible aturdido y la fiesta termina abruptamente con los padres del niño prometiendo acciones legales. Lo que los anfitriones e invitados no saben, sin embargo, es que este momento encenderá una cadena de eventos que van a descubrir secretos largamente enterrados dentro de este grupo de amigos y familia… desafiando enérgicamente los valores fundamentales de todos los involucrados.

Crítica Bastarda (SPOILERS):

En muchos sentidos, este caso es pequeño. No se derramó sangre, no se dañaron bienes, no se perdió ninguna fortuna. Pero en otro sentido, es algo fundamental. Este caso trata sobre nuestra responsabilidad como civiles en los que recae la salvaguarda del buen comportamiento de la gente de Nueva York, de proteger nuestro bien más preciado: nuestros hijos. Esta es la historia de una reunión familiar feliz marcada por un imperdonable acto de agresión sufrido por un inocente. Las heridas de Hugo puede, claro, curarse, pero el representa a los niños de todos los cinco barrios de Nueva York que merecen la total protección de la ley, del mismo modo que el señor Apostolou merece un castigo tan severo como la ley pueda imponerle.

El mejor resumen de la miniserie de NBC, remake de la adaptación de la ficción australiana de la homónima novela de Christos Tsiolkas, lo ejerce ese climático juicio y alegaciones tanto de la fiscal como del abogado defensor: 

Estoy de acuerdo con mi estimada colega. Esto va, ciertamente, sobre un acto imperdonable de agresión. Pero este no lo sufrió un niño, sino el mismo señor Apostolou, el que, como su tío, su primo, y como muchos otros inmigrantes que han venido a este país pidiendo nada más que un trato justo, pero en su lugar, lo que están recibiendo es estos perniciosos cargos. Nada menos que la eliminación del carácter, sin garantías, inmoral e injusta.

La bofetada acaba siendo un mcguffin, un pretexto para analizar a esa familia y esas líneas que les atan entre sus secretos y pecados. Viendo los primeros capítulos de esta norteamericana “The Slap”, que recupera a Melissa George en su mismo papel que en la adaptación australiana, da la sensación de que falta algo… y no es precisamente Zachary Quinto haciendo de heterosexual y macho alfa. Al igual que la última temporada de “Girls”, el actor de Pensilvania no es el elemento que desentona. No, rápidamente surgió la línea de debate en el propio espíritu y esencia de la novela de Tsiolkas y esa adaptación que encaja mejor en los moldes que recrea: la sociedad australiana y esas familias griegas que emigraron allí.

Obviamente las comparaciones pudieran ser odiosas y la audiencia de NBC tampoco ha respondido e incluso fue cambiada de horario ante ese desastre que supone para la cadena la noche de los jueves. La bofetada, por lo tanto, llegó incluso por los medios que tampoco acabaron tan excitados y atraídos con una miniserie de supuesta calidad que contaba con la dirección de Lisa Cholodenko en su primer episodio. La propuesta nunca encontró esa mezcla de intelectualidad y sentimientos enfrentados y soterrados, causando incluso la antipatía por los personajes imperfectos que retrata. Posiblemente la incursión de ese narrador (que tampoco tiene demasiado sentido) dentro del microcosmos coral y, al mismo tiempo, volcando en un diferente punto de vista en cada capítulo acabe en una crisis que no duda de ser analizada como una crítica y lectura interna. ¿Realmente interesa una miniserie de grises morales, de ritmo lento y pausado y con personaje que nos resultan incluso cargantes deseando abofetearlos? “The Slap” funciona mejor como cuento familiar con moraleja, como juicio para evaluar a todos los acusados de esa bofetada y revelar la verdad, la verdadera naturaleza de las cosas y las personas. Todo se hace público y la autenticidad lo es todo junto a esa sentencia final de una jueza que sintetiza la lección ética y moral de una sociedad egoísta condenada a sus secretos y mentiras: 

Anoche, fui lo largo de los argumentos que hemos escuchado a la espera de una resolución. Y me di cuenta que cuando lo reduces todo, de alguna manera hemos pasado días debatiendo si un niño de cinco años estaba sujetando un bate o no cuando un adulto le golpeó. Luego me di cuenta de que quizás no se trata de eso en absoluto. Podría haber sido con la misma facilidad sobre el estatuto del Estado de Nueva York «descuido por los padres debido a la embriaguez o la falta de atención». Lástima que todo esto produjo casi la muerte de un niño de 17 años para decirnos lo que de verdad se trata: Simpatía, o la falta de ella, de la que no podemos adjudicar en este tribunal. Todavía, tengo un trabajo que hacer. Señor Apostolou, le declaro culpable de intento de asalto de un menor en el tercer grado. Le sentencio a tiempo cumplido, el tiempo que pasó en prisión en la lectura de cargos, porque no estoy segura de que si le llevo a Riker's Island le hará más arrepentido de lo que está ahora. Señor y Señora Weschler, antes de que dejen este tribunal, pueden esperar una visita de Servicios de Protección Infantil. Si hay otro incidente de su hijo potencialmente siendo dañado o dañando a alguien más, ustedes serán los responsables. Ahora, si no les importa, tengo tres casos en mi expediente, uno que implica la violación de una niña de nueve años de edad. Así que vayan a casa y cuenten sus malditas bendiciones. Ahora fuera de mi sala de justicia.

RESUMEN BASTARDO: Sale nuestra ‘hamada’ Greta la Gremlin de “Gotham” aunque en el tercer episodio un hipster hace playback… y el cerebro, cual efecto de la bofetada, de muchos exclamó: ¡Sal corriendo de allí! 

We miss you... Greta

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