Serie de TV
“Jennifer Falls”
EEUU
2014
Sinopsis (Página Oficial):
“Jennifer Falls” gira en torno a una profesional de carrera y madre, Jennifer Doyle (Jaime Pressly), que deben regresar a casa de su propia madre después de haber sido despedida de su elitista trabajo de seis cifras de nómina. Con su hija adolescente a cuestas, Jennifer tiene que enfrentarse a su nueva vida y averiguar cuáles son los próximos pasos para reconstruirla.
Cualquier persona que lea la sinopsis de la nueva sitcom de TV Land lo normal es que salga corriendo al baño a vomitar. La arcada, ante la enésima comedia en la que la (o el) protagonista tiene que volver a vivir al nido materno tras ‘fracasar’ en su vida, revela una absoluta falta de ideas en el panorama catódico norteamericano. Los problemas de ira de Jennifer Doyle le cuestan su excelente trabajo y tener que dejar su sofisticado y costoso modo de vida para volver a vegetar con su madre en busca de tiempos mejores. Sus planes inmediatos pasan por tener que buscar trabajo (y encontrarlo) siendo camarera del bar de su hermano y soportar a su odiosa y siempre sonriente cuñada. No es “Blue Jasmine”, pero debería revisar los muchos aciertos de la cinta de Woody Allen. Tampoco revitaliza nada la screw-ball clásica... Es “Jennifer Falls”, una sitcom clásica familiar con pinceladas de mockumentary para darnos la evolución de la anunciada, en el título, ‘caída’ de Jennifer.
Puede que los televidentes de TV Land estén acostumbrados a ese aire de telecomedias de humor blanco con aroma a los 80 y 90, aunque aquí la cuestión es su aterrizaje en el panorama actual de series. Un panorama que no deja de constatar la ausencia de talento en las premisas que generan las sitcoms de los últimos años. El problema de la serie al servicio de Jaime Pressly —que también recupera a la siempre genial Jessica Walter (“Arrested Development”) e incluso ofrece un cameo de Jeffrey Tambor— no es precisamente su trillado punto de partida sino las pocas variaciones que propician el entorno de la protagonista. Ni siquiera sus inconvenientes con frenar su ira o el reencuentro con su mejor amiga de la infancia y adolescencia, que ha dejado de dirigirla la palabra, se molestan en desviarse del tópico. Que veamos aparecer a un chico de ojos azules por la barra como futuro romance no deja de confirmar que “Jennifer Falls” es un simple piloto automático que funciona alrededor de las humillaciones que tiene que sufrir la protagonista con su cambio drástico y económico de vida.
Jaime Pressly está bastante desaprovechada y “Jennifer Falls” pudiera dirigirse (y digerirse) como un video-diario de una pija y ejecutiva, que ganaba un cuarto de millón de dólares al año, que ahora se somete al ‘divertimento’ (y contrariedades) de la vida del resto de hormiguitas que apenas consiguen llegar a final de mes con su nómina. De nuevo, el problema no lo genera el elenco sino un libreto obsesionado con la superficialidad con algunos elementos de comedia de situación que aciertan más en el sketch físico (como ese asalto al coche de su amiga) que en el catálogo de chistes sobre ese humor demasiado ‘blanco’ y descafeinado. El segundo capítulo tampoco aporta nada a la mecánica con esa matriarca controladora y Jennifer no pudiendo reconocer ante sus antiguas compañeras de trabajo su mediocre estado actual. Los recursos son un tanto obvios y evidentes: desde lidiar con la superficialidad que enmarcó su pasada vida teniendo que elegir entre su mejor amiga afín a su catastrófico entorno actual o mentir a discreción para tratar de aferrarse a su lucrativo pasado. Se puede agradecer, entre tanta avalancha de mal gusto y humor zafio-sexual simplemente de relleno, que opte por otros resortes cómicos más clásicos aunque algo sexistas, pero realmente me duele pensar que la serie venga de Matthew Carlson, uno de los responsables de “Malcolm”. ¿Se acabó el talento y la originalidad o que la serie fuera concebida como un sitcom grabada en estudio con multi-cámara ha pesado demasiado en el resultado final? Sea como fuera, Jennifer (y su serie) caen al unísono. Otra cuestión es que consiga levantarse y si queda alguien allí para comprobarlo.
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