Después de la Comic-Con
llegó la calma… y eso que el anterior capítulo, “Hopeless”, dejó las
heridas tan abiertas y sangrantes a la espera de una mayor dosis de sangre
vampírica. Después de la renovación para su sexta temporada y el inicio de su medianoche
en la presente llega el séptimo capítulo, “In
the Beginning”, para dejar claro
que esta quinta temporada se está moviendo en otro tipo de territorios que
desea explotar. Muchas
especies mitológicas y fantásticas y humanas que desean llenar unas cuotas de
sexo y violencia siempre marca de la HBO. La serie de Alan
Ball siempre ha sabido reinventarse y morir gracias a multitud de
personajes y tramas aunque siempre su segunda temporada (aquella por la que la
serie fue nominada a los Emmys) se mantendrá como cumbre a
conquistar. ¿Intentará tocar el cielo esta quinta temporada reciclando todo lo
posible de las anteriores?
Esta quinta temporada de “True Blood” supone la despedida de Alan Ball como showrunner y da la sensación que quiere homenajear a todas las anteriores. Puede que “In the Beginning”, con el aroma de un episodio de transición, quiera meter numerosos flashbacks y guiños a todo lo vivido anteriormente. Aunque en esta entrega de capítulos tenemos numerosas tramas que atañen a todos los personajes que componen la serie. Podemos destacar un par con absoluto protagonismo: la vuelta de Russell Edgington y la muerte de los padres de Sookie y Jason.
Después de la muerte verdadera de Roman a manos de Russell, se activa la alarma y durante el trascurso del caos el antiguo vampiro puede liquidar tanto a Eric como al resto, pero finalmente los guardias aparecen y le reducen con una red de plata. Bil y Eric son llevados a su celda donde repasan todo lo ocurrido: Nora tiene un aliado… Es obvio quién es ‘la aliada’ cuando todo estaba tan claro desde el principio. Russel, Nora y Salomé forman la alianza y pese a lo que pudiera parecer el Sr. Edgington les ofrece una tregua. Salomé reconoce que ella fue el vampiro que desenterró a Russel y conocía su paradero al seguirles cuando le enterraron allí. Roman debía ser sacrificado con todo el dolor de su corazón y les pide que se unan a ellos. Eric se niega y Bill cree que la coexistencia es la única posibilidad de que ambas especies sobrevivan…
Rikki, ¿la futura novia de Alcide? |
En la tienda de objetos antivampíricos Andy se cuestiona si está en forma mientras que Sam olisquea todo y da con la caja que contiene las máscaras de Obama ante la incredulidad de la ayudante del sheriff. Ahora les ha olido, sabe lo que comen, cuántos son y qué sienten: envidia y odio. Obviamente esos nuevos archienemigos de los no-humanos salvaron a Hoyt y de esta manera podemos saber quiénes son. Se trata de su compañero de colegio Joe-Bob y sus colegas Ray y Tyrese. Allí reciben una misteriosa llamada de un tal Dragón, que podría ser el líder del grupo criminal, y que les informa de la muerte de Junior. El grupo no da más pistas a Hoyt, que les habla acerca de Jessica y del odio que siente por ella. Hoyt se montará en la furgoneta y se pondrá la máscara de Obama… pero serán uno menos: Joe-Bob es descubierto en el hospital por Sam. Andy visita al ex sheriff Bud Dearborne (otro homenaje) que pasa de sus problemas y se centra en su nueva vida sexual.
Bill sigue siendo fiel al negro |
Arlene
recuerda en el vídeo de su boda aquella felicidad que ya queda atrás. ¡Más
found-footage! Es consolada por Holly… mientras que Terry y Patrick
se ven las caras de nuevo con el Ifrit que se descojona de ellos.
Terry intenta quitarse la vida arrebatando el arma de fuego que tiene Patrick,
pero éste le convence para que no muera y
pelee por aquellos seres a los que ama.
Otro problema fogoso se persona ante una Tara que demuestra ser mejor bailarina que barman… Su madre Lettie Mae se presenta en Fangtasia para informarla que para ella está muerta: un nuevo disgusto para la pobre vampiro. Pam se encuentra a Tara en su oficina llorando y, por primera vez, le ofrece un consuelo y apoyo: dentro de 100 años Tara no se acordará de la madre que le hizo sufrir tanto en vida. Tara abraza a Pam que intenta no emocionarse y pasados uno segundos rompe el calor por su habitual hielo.
Sookie se entera ahora que las medio-hadas llevan pilas |
Jason en esta temporada tiene que hacer frente a replantearse su vida como ‘gigoló de pueblo’ y la muerte de sus padres profundiza por primera vez en la psique del personaje (y pene). Jason sabe que su hermana se siente culpable y decide prepararla el desayuno y convencerla de que no es culpa suya. También visita a Jessica para contarle todo pero al besarla Jason nota el sabor a sangre que hay en su rostro: acaba de comer de la entrepierna de un desconocido. Jason pierde los papeles, discuten y acaba pegando un tiro a Jessica que le manda fuera de su casa. Al salir detecta destellos en el cielo: provienen de Sookie, que ha decidido librarse de todos sus poderes…
Russell ha vuelto |
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