La noticia ha saltado como un espectacular cum-shot en nuestras gafas en 3D. ¿Habrá género pornográfico para señoras que aceptan ‘presentes’ en sus gafas de pasta gruesa? Seguramente porque en El Territorio X está todo inventado. Todo. Y la noticia no es que se haga cine erótico o porno en 3D porque desde el éxito estereoscópico que supuso “Avatar” saltaron a la palestra numerosas posibilidades: conciertos en 3D de Marilyn Manson con los escupitajos sanguinolentos de su público en relieve, la vida (al desnudo de escrúpulos) de tonadilleras en 3D con secuencias en plazas de toros y clavada de cornamenta directa a nuestros ojos, “Sálvame Deluxe 3D” con los invitados de excepción insultándose en nuestro propio salón y con sonido envolvente incluido y, para finalizar, programas de cocina en 3D con técnica Olorama para llenarnos de olor a fritange (fritanga en francés) nuestra casa al completo. ¿Se encuentra el Cine X en las anteriores novedosas propuestas? No. Pues claro que no. El cine en tres dimensiones lleva décadas y la primera película porno en 3D data de finales de los sesenta. Se titulaba “The Stewardesses”: recaudó más de 25 millones de dólares en todo el mundo y costó 100.000. Le siguieron otras pero la moda quedó apagada hasta ahora. Se habla del eterno regreso de “Emmanuelle” en tres dimensiones (“Emmanuelle IV” ya tuvo ese honor en el 84) y del remake de Tinto Brass de su propia y carnalmente y sádica divertida “Calígula” como nuevas fórmulas de calidad para el gran público. Pero aquí aparece la noticia y el listo de turno: el largometraje erótico hongkonés (y festivo chinoise) “3-D Sex and Zen: Extreme Ecstasy” está arrasando desde su estreno en salas el 14 de abril. 30.000 localidades vendidas en su estreno y su taquilla está siendo excelente pese a estar en una docena de salas de Hong Kong. Ha empezado la invasión a Taiwan, Australia, Nueva Zelanda y próximamente en Francia el 10 de Agosto. ¿Están preparados para que nos revelen el relieve?
Mientras que nos conformamos con el 3D Porno que están ofreciendo plataformas digitales de pago y en canales como Playboy TV la información que existe en la red de “3-D Sex and Zen: Extreme Ecstasy” es justa y apretada como la ropa interior de sus protagonistas. Sus actores dicen que es injusto que se le censure en China porque la historia es muy sentimental y dramática. Prometen humor, guión y erotismo para evitar los clichés odiosos del género con sus 3 millones de dólares de presupuesto. Obviamente está siendo rodada en cantonés y no estará subtitulada para evitar que las letras de los subtítulos censuren la obra.
Destape Oriental |
Los actores de Hong Kong son al parecer muy puritanos y no tienen nada que ver con los nuestros que se despelotan hasta en las secuencias gastronómicas (Elsa Pataky siempre rueda desnuda secuencias haciendo unos huevos fritos como catarsis de la miología —y los huevos fritos— al otro lado de la pantalla). Esa castidad de los actores ha provocado que las secuencias de sexo ‘explícito’ (porque es más erótico que otra cosa) sean rodadas por japonesés (creadores del bukkake y co-creadores del bondage junto a los nazis).
El Sexo y en Zen venden |
La saga “Sex and Zen” ni el wuxia pian erótico no son para nada desconocidos a los seguidores del cine oriental y mucho menos el género ero-guru (grosso modo, erótico y grotesco a la vez), lo que es un bokashi (ese borrado y censura de parte de la imagen en los genitales por la legislación japonesa), el pinky violence, el pinku eiga o el roman porno como variaciones eróticas del género. Mucho menos es desconocido para el gran público aquellas secuencias eróticas y desfasadamente desopilantes como la que protagonizaron en la red los extractos del filme “La sala de las torturas chinas”. Se le llamo Ninja Sex Matrix entre otros calificativos y etiquetas y fue uno de los vídeos de la temporada en su momento.
El argumento “3-D Sex and Zen: Extreme Ecstasy” trata sobre un erudito de la dinastía Ming bastante engreído que cree que su destino en la vida es perseguir el placer sexual todo el tiempo que pueda. Hay boda y decepción ya que Wei Yangsheng, el protagonista, es insaciable. Aunque el titular indica la palabra ‘porno’ hay que recordar que el producto final va a ser más erótico que otra cosa y sus imágenes recuerdan a una re-versión re-titulada de “La Casa de las bragas voladoras”. La ropa interior de los chinos es así: está de saldos.
El protagonista está como quiere.
ResponderEliminarHola anónimo!
ResponderEliminar¿Era una queja? ¿Cualquiera en su sano juicio estaría más salido que Rocco Sifredi y adicto sexual afiliado con su pareja loca por agradarle y no perderle?
Saludos bastardos,